Las heridas de la sociedad, la desgracia de la misma.
Un mar de prejuicios y desdicha.
Dónde no hay respuesta ni esperanza.
Hajime Hinata, tiene claro que la única manera de salir de tan frío agujero es con el proyecto de cultivación de esperanza do...
Continuaba leyendo el expediente del chico aun en la sala de juntas, era un momento dispar gracias a la diferencia de edad Matsuda y yo aparentábamos, en medio de adultos y personas cerca de la edad de Tengan, dos adolescentes como nosotros eran irremediable que no resaltaran, ya que la persona más joven a proseguirnos debía ser por lo menos de diez a catorce años más grande y esa edad era solo calculando la del director Jin Kirigiri, la persona más joven entre todo el comité, aunque por el momento aquella persona no se encontrara en este lugar.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Tanto Matsuda como yo esperábamos en nuestros asientos en silencio, ya estaba casi todos los asientos ocupados a excepción de tres, uno podría ser el del antes mencionado Jin Kirigiri, otro el de Koichi Kizakura y por último del chico de quien tenía su expediente.
La puerta se abrió, dejando que el crujido de la madera rechinara por el tamaño y pasar del tiempo. Los murmullos entre todos cesaron dejando un silencio tan atormentador que en un cambio de emociones tu respiración sería la primera en delatarte.
Jin Kirigiri, el actual director de Kibougamine fue el primero en pasar; tenía una sonrisa en su rostro tranquila, muy a diferencia de la persona que escoltaba tomando de los hombros "abrazándole" en señal de "camaradería".
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Kizakura cerró las puertas del recinto, no se le prestó en ningún momento la atención a aquellos dos sujetos, no importaba en aquel momento su rango u ocupación, cada uno de los presentes estaban concentrados en el chico que había sido escoltado hasta este lugar.
Tenía casi la misma estatura de Jin y llevaba puesto el uniforme del curso de reserva; de cabello corto marrón, con unos ojos que se debatían entre un miel y un ligero toque verdoso, sin embargo, la característica más sobresaliente de su mirada eran los signos de negación que en cierta forma remarcaban una agresividad a su posible personalidad, sin embargo, a pesar de que estaba segura de que, la mirada del chico era más brillante, en aquellos momentos, se veía decaído y perdido, con una leve fuerza que le hacía querer continuar, una determinación peligrosa sobresalía de él.
Jin dejó al chico solo a unos cuantos pasos de la mesa ovalada, una vez todos tomaron asiento, observaron a la persona que de cierta forma se veía como un acusado.
