Dairy Queen [l.r.h]

2.0

"Así que Libra, ¿lista para que te derrote en los videojuegos?" Habló Luke caminando a mi lado mientras nos dirigíamos hacia el local de videojuegos dentro de la plaza en el último piso.

"Supongo que estarás listo para perder Luke." Le miré y después rió. Me guiñó un ojo y seguimos caminando hasta llegar a nuestro destino. Nos habíamos encontrado hace alrededor de veinte minutos, le vi en el establecimiento donde todo comenzó y esperamos a quien lo supliera en el trabajo para así poder pasar el resto de la tarde juntos en nuestra ¿cita? Si es que a esto se le podía llamar de esta manera. Jamás en mi vida había tenido una cita, por lo menos no con alguien que me atrajera como Luke lo hacía.

Durante mi camino hasta acá mis manos no paraban de sudar y de temblar debido al nerviosismo que mi cuerpo emanaba, esa fue la razón por la cual Michael se encargó de traerme junto con mi amiga peli negra. Una vez llegando di como veinte mil respiros profundos para poder calmarme de una vez por todas pero joder! Iba a salir con el chico cabello color sol. ¿Cómo no estar en este estado? Cualquiera en su sano juicio estaría igual o peor que yo, aunque supongo que eso es casi imposible.

La mayor parte del tiempo cuando llegamos a aquel gran establecimiento estuvimos riendo, algunas veces hacía pucheros con sus mejillas mostrándose completamente tierno cuando le ganaba. Y cuando yo era la que perdía me ponía simplemente a inflar mis mejillas sonrosadas por la vergüenza de haber perdido contra él. La tarde pasó demasiado rápida para ser sincera, no quería que esto terminara nunca. Era una de las mejores cosas que existían en esta vida. Luke, su sonrisa y su risa eran la octava maravilla de este mundo y de otros mil más.

Terminando de jugar durante un par de horas decidimos ir a comer algo, una pizza para ser más exactos.

"Demonios Libra, ¿en dónde aprendiste a ser tan buena en los videojuegos?" Habló con interés Luke antes de llevarse la rebanada de su pizza a la boca.

"Suelo venir muy seguido con Michael..." Contesté desinteresadamente haciendo que él volcara su atención hacia mí al mencionarle a mi mejor amigo. Éste asintió un par de veces mientras terminaba de tragar su bocado para después volver a hablar.

"¿El chico que entró buscándote en la tienda el otro día?" Preguntó mientras ahora yo era quien masticaba mi porción de pizza. Asentí un par de veces mientras observaba cómo sus facciones iban perdiendo emoción. "Supongo que ha de ser lindo salir a jugar videojuegos con tu pareja."

En el momento en el que soltó aquello mis ojos se salieron de órbita, literalmente, y después estuve a nada de escupir lo que aún no tragaba de mi boca. Instantáneamente comencé a reír frenéticamente haciendo que el bello chico me mirara con su ceño fruncido demostrando confusión por mi repentino humor. Así que decidí aclararlo todo antes que nada.

"Michael no es mi novio; él es mi mejor amigo." Limpié mi boca con una servilleta después de hablar, y seguido de mi aclaración Luke asintió y su rostro volvió a tomar una tranquilidad, como si lo que le hubiese dicho le hubiese agradado.

Para terminar el día una vez terminamos de comer/cenar se ofreció a llevarme a casa en su Ford Galaxie 500 color negro. Un carro clásico pero sin duda alguna bellísimo.

Pensé que la noche y todo lo que hubiese pasado aquel día iba a ser olvidado en algún baúl de recuerdos bellos que solo pasaban una vez en la vida pero no fue así. Una vez frente a mi casa y debido a la gran lluvia que se desencadenó en California, debimos quedarnos en su auto mientras hablábamos de cosas sin sentido o hacíamos preguntas para conocer el uno del otro.

Una vez la lluvia fue parando decidí entrar a casa, pero antes de bajar del auto su voz me detuvo.

"Libra..." murmuró para que solo yo pudiese escucharlo, aunque eso no tuviese mucho sentido ya que éramos los únicos allí.

"¿Si Luke?" Pregunté volviendo a sentarme en aquellos asientos color crema mientras me giraba para verle a la cara.

"Me gustó mucho pasar el día contigo, en verdad fue muy divertido." Dijo regalándome una de sus hermosas sonrisas, dejándome ver sus bellos dientes blancos a pesar de la tenue luz por la hora.

"A mí también me gustó Luke." Respondí con la misma sonrisa boba en mi cara. Rió un poco por lo bajo y después fijó sus ojos en los míos. Café contra azul.

Pero antes de que pudiese decir alguna palabra se acercó a mí acortando la distancia, haciendo que mi respiración se volviese más rápida, y antes de otra cosa sus labios hicieron contacto con la comisura de mis labios y mi mejilla derecha.

"Debemos volver a salir, esta vez tú elegirás a donde ir Libra." Le sonreí y seguido de esto asentí varias veces con euforia y felicidad. "¿Entonces es una cita?" Sonreí más si eso era posible dándole a entender que sí y me sonrió de la misma forma.

Bajé del auto corriendo y llegué hasta la puerta de mi casa. Me volví de entre mis talones y observé como se alejaba haciendo que mi sonrisa se fuese haciendo más grande.

¿Por qué me gustaba tanto este chico?

(...)

Hey! Aquí su autora uh.

Gracias por el apoyo en esta historia en verdad. Han habido días en los cuales no se como seguir con esta historia y siento que lo mejor sería eliminarla pero no puedo hacerme y hacerles esto. Apenas entré al colegio y no estoy segura de qué tan libre estaré para poder pasarme por aquí, escribir y actualizar. Sin embargo no dejaré esto de lado.

Quizá a veces tarde un poco pero siempre habrá capítulos nuevos.

También he decidido que la historia no será larga, ¿a qué me refiero con esto?. La historia no contendrá tantos capítulos y no faltará mucho para que termine. Quizá a partir de este capítulo de la cita entre Luke y Libra los capítulos comiencen a ser más específicos, sin darle tantas vueltas a un solo asunto para que así avance y sea más rápida y menos tediosa.

De igual manera me agradaría mucho que me dieran sugerencias del qué les gustaría ver en esta historia de amor, uh si.

Sin más por el momento gracias de nuevo por el apoyo, y las leo pronto con un nuevo capítulo de Dairy Queen.

Con amor, Brenda.