¿Puedo Quedarme Contigo?

44: "Recuperarla"

Estaba comenzando a empacar, cuando tocan la puerta de la habitación. Me dirijo a ella y abro.

- Hola Patrick – dice Rose.

- Hola Rose – digo. – Pasa.

Entra y cierro la puerta de la habitación.

- ¿Ya se van? – pregunta al ver mi valija.

- Yo solamente, él se quedará por unos días más. Supongo que tiene que ver con que aceptaste que conozca a tu hijo.

- Si. ¿Por qué te vuelves?

- Tengo que hacerme cargo de las cosas haya.

- ¿Marcus ya renuncio? – dice riendo.

– Murió hace cuatro años, en un accidente de auto. - digo con tristeza.

- ¿Qué? – dice en shock. – No lo sabía, lo siento.

- Con lo de la muerte de Marcus y tu partida, él se volvió aún más una persona insensible, odiosa, exigente y obsesionada con el trabajo. Mi madre se fue a vivir en forma permanente a Barcelona, Tim se casó y se fue a vivir a China, y Jane se fue a un internado en Francia. Todos huyeron.

- Menos tu...

- Así es... Ni se porque me quede. Supongo que no lo odio tanto después de todo. Sentía que no podía dejarlo, de alguna forma era el único que entendía realmente por lo que estaba pasando. E Ian no quiso dejarme a mí, me dijo "ahora que finalmente eres mío no voy a dejarte ir tan fácilmente"

- Me alegro mucho de que se hayan tenido el uno al otro todos estos años.

- Si. – hago una pausa – Me conto la última conversación que tuvieron él y tú. Le dijiste que tomara distancia contigo, para que yo no lo aparte. Le pediste que no me dejara solo.

- Si, bueno, Ian se lo tomo muy literal. – dice. Ambos reímos. - ¿Eres feliz?

Asiento afirmativamente – Si lo soy, me ha tomado tiempo, eh sufrido mucho y eh estado triste, pero ya sabes lo que dicen "las mejores cosas llevan su tiempo". – quedamos callados – Sabes, nos pusimos a hablar y no te pregunte que necesitabas.

- Yo venía a hablar con tu padre, pero veo que no está, así que volveré más tarde.

- Debe estar por venir, espéralo acá.

- ¿Has visto a mi madre y a mi hermana? – pregunta.

- Ohm... Si, a menudo, de hecho. Nikki trabaja en la empresa.

- ¿Qué? – dice sorprendida.

- Si, a tu madre no le agrado nada cuando se enteró, le echa la culpa a mi padre por todo. Pero ya sabes cómo es Nikki, les busca la bondad a las personas.

- Es como mi padre en ese sentido. – dice con melancolía.

- Si, quiso acercarse a mi padre y el la dejo. No sé si porque vio lo inteligente que es, o porque de cierta forma le recuerda a ti. Mi padre ya casi no viaja, a menos que sea dentro del país, los viajes al exterior los hace Nikki o yo.

- Así que están bien.

- Tu hermana trata de seguir adelante, ella tiene la certeza de que tu estas bien. Tu madre en cambio ya casi ni sale de la casa, a menos que sea a trabajar. Cuando te fuiste te llevaste una parte de nosotros y ninguno volvió a ser el mismo.

- Juro que, si tuviera el poder de volver a ese día, rechazaría el trabajo sin pensarlo un segundo.

Se abre la puerta de la habitación y entra Robert.