2

13 0 0
                                    

Llegamos a la casa de mi amigo para pasar la noche allí, había algunas personas, un par de amigos y algunas conocidas, la verdad que no me intereso mucho quien estaba, apenas entre hice un saludo general para todos y me fui a donde mis amigos, la noche se tornaba tranquila, un par de tragos aquí y unos pares de tragos allá, la gente se ponía cada vez mas eufórica, me divertía viendo como se alocaban, una de las chicas que estaba allí se peleaba con el novio más que seguro por alguna estupidez de ellos o alguna escena de celos, me causaba tanta gracia las escenas de celos que sufría ese pobre muchacho, no preste atención tanto tiempo por una vibración en mi bolsillo, saque rápido el teléfono de allí pero no era ninguna llamada, era solo un aviso de batería casi agotada, le pedí a mi amigo un cargador para mi teléfono y lo dejamos cargando en una de las habitaciones, cuando volví con mis amigos vi que había varias chicas con ellos, ellos decían cosas como sus proyectos, que estudiaban, de donde eran y todas esas estupideces que uno dice para intentar conquistar a alguien, no quería escuchar todas esas mentiras, me prepare un trago y me fui hacia la terraza para tomar mi trago tranquila apreciando la oscuridad de la ciudad, cuando salgo me senté en un borde para ver mejor de ahí, no pude tomar ni dos sorbos de mi trago que vino uno de los muchachos del grupo a hacerme compañía, estuvimos hablando un poco de todo, la conversación no era muy interesante, el me hablaba de su familia y los problemas que tenia, pero no lo podía echar del la terraza, además el me convidaba de su trago que era demasiado bueno y de sus cigarrillos, aun que no fumaba cigarrillos industriales se los acepte, ya que los míos lo había dejado en mi casa, en un momento al otro empezó a venir más gente a la terraza, gente que no conocía mucho, de un momento en nuestra conversación se metió una chica que de vista la conocía, la charla siguió un par de minutos más cuando mi conocido se fue a buscar más tragos para tomar, tragos que nunca llegaron, en pocas palabras me dejo solo con una chica que me contaba de su vida como si a mí me importase algo, me decía que estudiaba, donde vivía y de donde era, que su país era maravilloso, no tarde más de 5 minutos en irme de la terraza con la excusa de irme al baño. 

Amar es dulceWhere stories live. Discover now