El Ultimo Sparkling

Capitulo 7 🐝 Prueba Intensa: Parte 1 🐝

Bumblebee miró ofendido el D-pad frente a él. Ratchet lo había puesto ahí y le dio un stylus para que escribiera.

Ratchet: Quiero que escribas 500 veces la siguiente oración: No debo hacer bromas a los demás bots. —

Bee: ¡¿Qué?! Ratchet, es estúpido. — Se quejó.

Ratchet: Estupido fue que volvieras a bañarnos de pintura aún cuando se te advirtió que el castigo sería mas severo si volvías a hacerlo — Regañó.

Bee: Solo quería divertirme, es demasiado ser el unico younling aquí, siempre estoy solo. — Lloriqueó.

Ratchet: Hay formas sanas de diversión que no dañan a los demás, te aconsejo investigarlas. — Dijo molesto mientras se dirigía a la puerta. — Si vuelves a hacer algo así te haré escribirlo 2000 veces. — Advirtió cerrando con un fuerte azotón.

Bee: Maldito sistema retrograda. — Se quejó, empezando a escribir.

Después de lo que pareció una eternidad Bumblebee se dispuso a contar las oraciones. ¡Por Unicron! Apenas y llevaba 300. Esto era tan aburrido. Si Ratchet quería lograr que Bee dejara de hacer las bromas por miedo a recibir nuevamente este castigo lo estaba logrando, no estaba en los planes del pequeño explorador escribir esta oración 2000 veces mas.

Bee: Esto es estúpido. — Se repitió mientras rodaba los ópticos.

La puerta se abrió, llamando la atención de Bumblebee. Optimus entró, agachandose un poco para no golpearse la cabeza con el pequeño pedazo de pared que tenía la puerta por encima.

El pequeño mech inmediatamente volvió su vista al D-pad, los circulos luminosos de sus grandes opticos se encogieron al maximo mientras ocultaba su rostro tras el D-pad y se hundía en la silla.

Optimus paró frente a el pequeño y lo miró fijamente, esperando que su Sparkling lo mirara directo a los ópticos. Bumblebee sintió la mirada de su padre y, aunque se mantuvo hundido en la silla, hizo contacto visual con él.

Optimus: Sabes que lo que hiciste está mal ¿verdad? —

Bee: Sí. — Susurró.

Optimus: Y sabes que voy a tener que castigarte... ¿verdad? —

Bee: ¡Pero es que yo...! -

Optimus: Desobedeciste una orden, Bumblebee. Se supone que te permití entrenar como explorador para que adquirieras disciplina y respetaras a tus superiores. —

Era cierto, el younling había rogado a Optimus por decadas hasta que este aceptó dejarlo unirse a la guerra. Su padre estaba consciente de que se aburría y, aunque era un cybertroniano demasiado joven como para luchar, sabía que Bumblebee algún dia tendría que hacerle frente a la guerra. Después de todo... No iba a terminar pronto.

Bee: Perdón. — Miró al piso con tristeza, estaba decepcionado de si mismo.

Optimus: Se que es aburrido. — Se arrodilló y agachó un poco para quedar a la altura de su hijo. — Pero lo hacemos por tu bien. Porfavor, prometeme que esta será la ultima broma. -

Bee: Lo prometo. — Su voz se entrecortó, las lagrimas amenazaban con salir.

Optimus acarició el procesador de su pequeño y se puso de pié, camiando hacia la puerta. Al llegar a esta paró antes de salir y se giró nuevamente hacia su hijo.

Optimus: Cuando dije que me prometieras que sería la última broma, solo me refería a las bromas en juntas. — Finalizó dedicando una sonrisa al younling. Después salió.