Capítulo 20 🐝 Mi SweetSpark 🐝

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Preparación de aterrizaje, porfavor, tome asiento y abroche el cinturón. —

Bumblebee miró con pereza hacia una de las bocinas ruidosas de la nave. ¿Tomar asiento? Lo había hecho desde hace horas, de hecho no se había levantado para nada, le dolía el trasero. La nave no contaba con habitaciones o literas, solo asientos y un gigantesco panel de control. Había tenido que dormir sentado, su columna dolía como el infierno y ni hablar de su cuello.

Arcee miró hacia su cría al escuchar un suspiro proveniente de él. Estiró su brazo hacia la derecha y acarició la cabeza del pequeño. La nave estaba conformada por una habitación en forma de rectángulo vertical donde estaba el cristal frontal, el panel y los asientos. Estos últimos estaban en 2 columnas con filas de 2 asientos.

Tenía una habitación triangular en cada costado. La del lado izquierdo era para almacenar y procesar energon, también ahí estaba la zona de carga de combustible de la nave. En el derecho estaban las duchas. Era una simple habitación con regaderas, no había nada de privacidad.

Ratchet y Cliff habían acordado ir en la primera fila para conducir la nave, no era qué Arcee no supiera, Bee necesitaba el consuelo de su carrier. Optimus seguía vivo, pero aún así la tristeza había inundado su pequeña Spark. Nunca había estado tan lejos de su sire en toda su vida.

Ratchet: Sujetense bien, no sabemos que tan suave será el aterrizaje. — Habló desde la primera fila.

La nave bajó en picada, estabilizandose poco a poco mientras se acercaba a la tierra. Finalmente tocó el suelo terrestre, parando a unos metros del punto inicial. Había sido uno de los mejores aterrizajes qué habían tenido desde el inicio de la guerra. Generalmente eran caídas violentas provocadas por algún disparo de sus contrincantes.

Cuándo la nube de polvo se disipó, la puerta de la nave se abrió y los Autobots bajaron. El primero en salir fue Cliff, seguido de Arcee y finalizando con Ratchet y Bee. Los 2 guerreros adultos se mantuvieron atentos, con sus cañones cargados y listos para disparar.

Ratchet: Mi scaner solo detecta formas de vida pequeñas y primitivas. Muy pocas, de hecho. — Comprobó su artefacto mientras seguía estudiando su entorno.

Cliff miró hacia el orbe brillante en el cielo, una estrella, nunca había visto a una tan cerca de un planeta. Cybertron no necesitaba de una fuente de luz externa, él mismo la producía en su interior.

Cliff: Esa estrella me está asando. — Se quejó protegiendo a sus ópticos de el orbe brillante con su brazo.

Arcee: Este planeta está vacío. — Miró a su alrededor. — Está cubierto de... Mugre. — Tomó un puño de la extraña cosa parecida al polvo.

Ratchet miró a la femme e imitó sus acciones.

Ratchet: Se parece a la suciedad que crece en nuestras armaduras pero, es raro, esta tiene un color amarillento y se escapa fácilmente de las manos. — Observó como el polvo caía.

Los 3 adultos estaban tan perdidos tratando de averiguar que era esa mugre tan extraña, que nadie notó al joven younling caminando de regreso a la nave y sentándose en las escaleras de la entrada. No le importaba en lo más mínimo este planeta, de hecho quería abandonarlo y regresar a casa.

Deseaba tomar la nave y regresar a cybertron. No le importaba si moría en el camino, no le importaba buscar entre los muertos del planeta, quería encontrar a Sire y Jazz. Si cybertron estaba vacío, eso era lo de menos, solo quería ver a los 2 miembros faltantes de su familia.

Arcee fue la primera en darse cuenta, lo supo cuando sintió ese repentino cambio de humor en la chispa de su pequeño por medio de su enlace. Miró a su younling, notando su mirada triste y su bajo animo. La luz de sus ópticos era tenue y su mirada estaba perdida. Estaba más que deprimido.

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