You Don't Own Me.(Thomas-brodie Sangster y tú)

Cap 50

-¿Me tengo que hacer ilusiones por que me invites un helado?-preguntó mientras jugaba con la cuchara de plástico

Reí.

-Aún no estás perdonado, Thomas. Te recomiendo que no -le dije mientras comía un poco de mi helado.

El sol chocaba contra mi rostro y se me hacía difícil tener mucho tiempo los ojos abiertos. Thomas estaba en mi misma situación pero al ser más alto que yo ayudaba un poco. Caminábamos por un sendero al lado de la playa.

Se detuvo un momento y me hizo girar para mirarlo.

»¿Qué pasa?-pregunté frunciendo el ceño

-Ah. Nada, sólo tonterías mías-negó arrugando la frente. Su teléfono sonó en tono de mensaje y Thomas lo sacó para leerlo.

Se había quedado un momento con la vista clavada en su teléfono y se le veía confundido.

-¿Todo bien?-me acerqué a preguntarle y reaccionó

Guardo su teléfono y sonrió. Alzé una ceja.

-Si, todo bien.

-¿Seguro? Te veías raro-le dije sonriendo mientras me giraba para seguir caminando

-¿Sabes?-habló haciéndome que me detenga-Creo que sería mejor que regresemos.

Apreté mis labios girándome completamente.

-Esta bien.Vamos.

Desde entonces Thomas no dijo ni una palabra hasta que llegamos a mi casa. Ya era de noche y empezaba a hacer frío.

-Me divertí hoy-comentó-espero que me invites más seguido-bromeó y reí mientras bajaba de la motocicleta

-No te acostumbres, todavía no estás perdonado como te recuerdo.

-Eres difícil-se detuvo un rato-Tendré que ser más eficiente.

-Mmmmm...supongo que si-empece a jugar con el casco, pero luego se lo extendí-Ten.

Miró el casco y luego me miró a mí.

-Es tuyo, ¿Lo recuerdas?-dijo alzando una ceja y sonreí apoyando el casco en mi estómago

-Lo olvidé-bajé la vista un rato avergonzada- Bueno, adiós.

-Adiós-sonrió y volvió a encender la motocicleta

Me quedé esperando a que se fuera y cuando lo hizo entre a casa. Me quedé un rato mirando el casco mientras mordía mi labio.

Dí unos cuantos pasos a las escaleras decidida a ir a mi habitación cuando una voz me detuvo.

-¿Es de él, no?-preguntaron y giré disgustada en dirección a la cocina

-¿Debo responderte?-dije cínicamente-Mmm...Creo que no, así que adiós.

Sus pasos fueron rápidos y antes de que pueda poner un pie en la escalera me hizo girar con fuerza.

-No te atrevas a acercarte a él, ¿Oiste?-me amenazó apretando la mandíbula. Apretó mi brazo haciéndome daño.

-Suéltame- le dije entre dientes quitando su mano con fuerza-Créeme cuando te digo que si vuelves a tocarme te echaré de mi casa, ganas no me faltan, ya me tienes harta, Thomas no es nada tuyo que a mi conste.

-Él no te ama maldita idiota-escupió molesta con sus ojos rojos- Él siempre me quiso a mi y te usó, le das pena y sólo quiere arreglarse contigo para acercarse a mi, eres muy tonta para notarlo.

-Tú eres más tonta al no notar que a Thomas no le interesas. Por favor, te haces un mundo donde todo es color de rosa, pero la vida no es así, te recomiendo que pises tierra porque está es la vida real, no tu estúpida idea de un mundo perfecto.