Resident Evil "La Otra Kennedy"

6. Buenos Días Señor Presidente.

- ¿Cómo que estas suspendida? – pregunto Leon cruzado de brazos mirándome

- Sip – comente sin poder verlo a la cara – Yo... bueno ya sabes. Los directivos que se ponen exigentes y un poco locos y esas cosas de...

- ¿Qué hiciste Leanie? – interrumpió con voz autoritaria

- Yo – me señale – Nada – asegure - ¿Por qué tendría que hacer algo? Para que me suspendan – Leon me observo con cara de ¿En serio lo estas preguntando? Y suspire rendida para contarle la verdad – De acuerdo – mencione – Yo...bueno. Discutí con una persona y por eso me suspendieron

- ¿Discutiste? – pregunto incrédulo – Y solo eso, porque en la DSO por discutir con una persona no te suspenden, si no yo ya estaría despedido. ¿Segura que no hubo puños de por medio – con una risa nerviosa empecé a hablar

- ¿Qué? Pff – quite la vista de el - ¿Golpes? ¿Por quién me tomas?

- Por ti – aclaro

- Ay ya – me puse de pie del sofá y fui a buscar comida al refrigerador – Golpe a Jessica hasta casi asesinarla ¿Contento? – lo mire y este solo levanto su ceja derecha señal de que esta conversación iría para largo, muy largo

- ¿Qué hiciste qué? – pregunto mirándome sorprendido

- Bueno no fue tanto – cerré el refrigerados y tomando mi vaso de leche y el enorme paquete de galletas avance de nuevo a mi cómodo sofá – No la golpee como hubiera querido porque me separaron de ella. Pero si no – señale a Leon – Estaría en una camilla del hospital reacomodando su operado cuerpo – asegure

- ¿Y debo de estar más relajo porque no la golpeaste como deseaste? – interrogo mi hermano

- Debes – sonreí

- Esa no es una respuesta Leanie – menciono mi hermano molesto

- Ella se lo busco de acuerdo – deje el vaso de leche en la mesita y suspirando hable en voz baja – Ella hablo de ti

- ¿De mí? – cuestiono Leon sin entender – Yo ni siquiera la conozco o tal vez sí, pero no he tratado con ella en la vida

- Pues ella si te conoce – mencione – Una vez te vio cuando me fuiste a dejar a la base y bueno... - guarde silencio de nuevo

- ¿Y qué fue lo que pudo mencionar para que te pusieras asi? – Leon se sentó en el sillón a un lado del mío

- Prefiero no mencionarlo – asegure mirando a otro lado

- Entiendo – Leon me observo comprensivo - ¿Y ahora que harás? – menciono con su voz más suave

- No lo sé – me encogí de hombros – Supongo que recoger la casa que está hecha un desastre

- Buena idea – comento - ¿Qué te parece si pintamos el departamento? Por ahora y según yo no tengo misión alguna y podemos aprovechar el tiempo, yo puedo traer un poco de ropa y las cosas necesarias para mudarme contigo – hizo comillas en la palabra mudarme con sus dedos

- Me parece perfecto – acepte feliz – Yo compro la pintura y todo lo necesario y tu traes tus cosas para acá a mudarte conmigo – sonreí de oreja a oreja feliz

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- Hola mi grandote favorito – salte a los brazos de Chris

- Hola enana favorita – me abrazo levantándome del suelo muchos centímetros - ¿Qué haces aquí? – me coloco en el suelo – No estabas suspendida por dos semanas y déjame te digo que hoy es viernes y apenas es la primer semana