Capitulo 3

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Era de mañana y dos magos estaban durmiendo tranquilamente hasta que un pelirosa comenzó a despertar, abrió los ojos poco a poco y vió a la hermosa maga que lo estaba abrazando, ambos tenian la cara bastante cerca, Natsu veia lo hermosa que Sorano se veia durmiendo hasta que ella comenzó a abrir los ojos lentamente encontrandose con la mirada del pelirosa, ambos magos se sonrojaron al ver lo cerca que estaban y se levantaron de golpe, despues de prepararse ambos salieron a desayunar despues de que ambos comieran se dispusieron a salir del lugar.

Quieres pasear de nuevo? - pregunto Natsu con una sonrisa.

Me estas invitando a una cita? - dijo Sorano.

Porque no? - dijo abrazandola por la cintura y comenzando a caminar.

Ambos se encontraban sonrojados ya que se escuchaban  susurros de la gente diciendo sobre lo tierna que se veia la pareja, asi pasaron la el resto del dia, paseaban, comian en restaurantes de comida local, si los miembros de fairy tail vieran a Natsu se asombrarian ya que Natsu comia de forma normal y educada, aunque no se notara Natsu habia cambiado hace tiempo pero nadie lo notaba el se habia vuelto menos destructivo y trataba de verse bien incluso era mas educado, el se habia vuelto así para que Erza dejara de verlo como una persona infantil y destructiva pero nadie habia notado el cambio, a pesar de que ya casi no se vestia igual siempre trataba de vestirse bien y ya no usaba la misma ropa siempre, ahora estaba agradecido de haber cambiado ya que no queria tener una mal imagen frente a Sorano.

Ambos magos habian pasado un buen dia era casi como si fueran una pareja real, aunque Sorano habia notado a Natsu diferente al dia anterior, este dia se veia mas pensativo, serio y muchas veces evitaba cruzar miradas con ella e incluso le habia contestado de forma cortante en varias ocaciones, a pesar de habersela pasado muy bien con el pelirosa habia un poco de incomodidad y tristeza dentro de ella pero no quiso darle imporatancia, asi que decidió seguir con su dia al lado del mago de fuego.

La noche comenzaba a caer y el festibal estaba empezando, Natsu y Sorano se dirigian hacia donde esta la fiesta, pero se veia a un pelirosa que caminaba unos pasos adelante de una peliplata, bueno la razon es simple, antes de que ambos se dirigeran al festibal Natsu llevó a Sorano a una tienda para comprarle una yukata ya que vió que muchas mujeres lo estaban usando pensó que era buena idea comprarle uno a ella, pero cuando salió casi se le sale el corazón al verla, ella se veia hermosa y para el pelirosa era dificil estar demaciado cerca de ella ya que segun él se veia demaciado adorable, por otro lado Sorano se veia triste ya que los sentimientos de incomodidad y tristeza habian vuelto, se podia ver la mirada triste mientras veia como el pelirosa caminaba adelante de ella, ella comenzó a pensar que el mago de fuego ya no queria estar cerca de ella y ahora la veia como una molestia, la tristeza comenzó a hacerse mas fuerte y a pesar de que el pelirosa siempre trataba de hacer que ella se la pasara bien veia que el pelirosa se habia vuelto un poco mas distante en compracion con los dias anteriores ya que no la veia a los ojos y parecia que este queria decirle pero despues cambiaba de tema y se la llevaba a otro lugar, la realidad era que el pelirosa queria confesarle sus  sentimientos pero se sentia nervioso y mejor cambiaba de tema y que ella se viera tan adorable no ayudaba mucho.

Natsu trataba de hacer que Sorano se la pasara bien pero no podia evitar sentirse nervioso junto a ella, muchas veces trató de confesarse pero se acobardaba y trataba de cambiar de tema, sin saber que Sorano malinterpretaba eso y pensaba que ya no queria estar junto a ella.

Asi pasaron ambos en el festibal, con un Natsu que queria confesarse y una Sorano que se sentia realmente triste.

Despues de un par de horas Natsu se llenó de valor y decidió confesarle sus sentimientos a Sorano que se veia pensativa y triste.

Oye Sorano, quiero hablar contigo - dijo tomandola del brazo y llevandosela a un lugar apartado, Sorano sintió una gran tristeza ahora estaba segura que el le diria que ya no queria estar cerca de ella.

My AngelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora