Cuento de Luna ~•EDITANDO•~

Reencuentro (Capitulo 19 ).

El sol se asomaba lentamente por el horizonte iluminando lo todo a su alrededor, era una mañana tranquila y fresca como todas las de esa época del año, desde temprano los lobos de la manada del bosque ya estaban despiertos, preparados y reunidos en grupos listos para llevar a cabo una búsqueda exhaustiva por los territorios cercanos , debían de encontrar a la Luna de su manada lo antes posible, pues su alfa no debía estar sólo mucho tiempo más; su ahora alfa estaba encabezando el equipo principal de búsqueda, su padre y el ex-beta encabezaban los otros dos equipos, antes de salir en su búsqueda el padre del alfa se acerco a su hijo y le dijo que se concentrará en sentir a su Luna, le pidió que conectará su corazón con el de ella y así el destino lo guiaría hacía donde fuese que se encontrara, el joven alfa así lo hizo, pasaron minutos pero no sentía absolutamente nada pues ella estaba demasiado lejos para sentir la o eso creía, cuando estuvieron listos el joven alfa dio un gran aullido y los equipos se dividieron, emprendieron camino a diferentes lugares cercanos unos al norte otros al sur, este y oeste todos en busca de una pequeña loba dorada con la marca y el olor de su ahora alfa.

El equipo encabezado por el joven lobo rojizo se dirigió de inmediato hacia las montañas pues ese lugar era el territorio de su querido amigo, seguro si le pedía ayuda el y su manada también lo ayudarían a buscar a su Luna, así podrían cubrir más terreno y la encontrarían más rápido, necesitaba toda la ayuda posible pues ya habían pasado unos días y seguramente ella estaba ya muy lejos de el por eso no la sentía, tal ves ya estaba fuera de los territorios amigos, si así era, entonces encontrar la seria casi imposible, el lobo rojizo rogaba por qué eso no pasará.

Luego de unas horas de camino el grupo de lobos llego exhausto a las montañas, al momento de entrar al territorio fueron recibidos por los guardias que vigilaban el lugar los cuales se pusieron a la defensiva al ver ese grupo de lobos que no eran de su manada pero de inmediato reconocieron a Natsu como alfa del bosque.

—Solicito una audiencia con su alfa, es un asunto de suma importancia... soy Natsu Dragneel alfa del bosque—dijo el joven alfa con firmeza pero un poco agitando por el trayecto que había recorrido al igual que sus compañeros.

En ese momento a toda prisa los guardias fueron a llamar a su alfa Gajeel quien se encontraba en ese momento en su parte de la montaña con su Luna hablado de ciertos asuntos relacionados con Lucy la loba dorada.

—Entonces quieres decir que Lucy es... —la pequeña loba miro a su mate algo sorprendida por lo que le acababa de contar —Eso quiere decir que ya no puede quedar se más aquí.... — dijo con cierto tono de tristeza pues le gustaba estar con su amiga todos los días así como en los viejos tiempos.

—Asi es enana.... no podemos tener la más tiempo aquí, seguro en cualquier momento vendrán por ella y no podemos evitar que se la lleven a donde ahora pertenece— dijo el lobo azabache mirando a su pequeña Luna y de inmediato noto su tristeza pues sabía que era muy apegada a su amiga, pero si venían por ella no podía impedir que se la llevarán o se harían enemigos de ese manada.

—Solo espero que Lu-chan sea feliz, sabes a ella nunca le gustó la idea de pertenecer le a alguien... siempre fue un espíritu libre y rebelde ella ni siquiera obedecía las órdenes del Alfa en nuestra manada era muy complicada— soltó una leve risilla nostálgica al recordar todos esos momentos con su rebelde amiga cuando ambas estaban en la misma manada.

—Depende que como sea el alfa que la ha marcado, me preguntó por que ella no me dijo nada de esto, ahora entiendo por qué su aroma cambio tan de repente— se acerco y le Dio una pequeña lamida cariñosa en la mejilla a su pareja

—A ti te fue bastante bien enana gihi — dijo el alfa con cierto orgullo y perversión riendo un poco.

La pequeña loba se sonrojo y miro a su Alfa —G-gajeel baka... — desvío la mirada haciendo un pequeño puchero y moviendo su colita de un lado a otro a lo que su alfa la miró con ternura.