Oscura Tempestad

Desde el cielo

Un cielo gris acobija mi templo, nubes blancas le sirven de sustento, el suelo que contemplo no lo puedo pisar y para cumplir mis sueños, solo tengo que bajar.

Un guerrero pasajero alza su mirada y me susurra sus miedos, con esperanzas inmortaliza musas sin vida, lucha por sus sueños y muere por un poco de amor, me pregunta cómo amar otra vez porque lo dio todo, se arriesgó, pero sus piezas las arrojaron por el suelo y dejo de creer diciendo que el amor es cruel y traicionero; por eso, hoy me susurra la historia de un amor que florece y muere de pena, para que escriba lo que él no pudo y lo libere de su tormentosa condena.

Un almirante fugaz canta y me recita sus rimas, con valentía triunfo ante el mar, vio grandeza desde una tempestad, encendió una hoguera con una canción, sin embargo, murió abrasado por la llamas y hoy recita sus rimas para que lo escuchen aquellos grandes guerreros: les dice que confíen en el amor porque es lo más grande que rodea la tierra y aunque a veces duela, al final siempre les avivara una nueva hoguera.

Aunque quiera, no puedo tocar el suelo cuando bajo los pies, pero si me dan un corazón prometo que no lo romperé, sé que puedo escribir con latidos un verso que motive, puedo encender con letras el silencio para que nunca suspiren, puedo bajar la voz y llorar mis penas, puedo hacer la mejor poesía y morir porque mis palabras ya no son lo que eran...

Pero no sé qué hacer ante este guerrero y su almirante, mientras uno me susurra su dolor, el otro recita con gran emoción, mientras uno me cuenta sus penas, el otro enciende con rimas nuevas hogueras, mientras uno se va satisfecho, el otro se queda sonriente y yo solo los contemplo, admirando el suelo porque sé que algún día bajare y podre cumplir mis sueños..!