My Alpha || Boys Love • Omegaverse [Finalizado]

10.-Adiós al sufrimiento

Nos recostamos en el césped a descansar, Ben se había quedado dormido recostado en el regazo de Alan que estaba sentado hablando y riendo con Jean.
---¿Te sientes mejor, Dylan.?---preguntó Jun sentado a mi lado.
---Si gracias, realmente me ayudó distraerme y descansar.
---Me alegra verte mejor, ¿Sabés.? Puedes decirme si algo te pasa, somos amigos y te ayudaremos, Jean y yo claro, ambos.
---Jun---las lágrimas comenzaron a correr por mi rostro alarmando los, no eran lágrimas de dolor o al menos no del todo, me sentía raramente bien, protegido, feliz de oír a Jun decirme eso.

---Dylan..---me llamó tratando de llamar mi distraída atención y tanto Alan como Jean centraron su mirada en mí.
Rápidamente bajé el rostro limpiando mis lágrimas y descubrí mi cuello mostrando la marca.
---¡Dylan.!---exclamó Jun muy alterado liberando feromonas un tanto peligrosas que calaron en mi nariz, mi omega interior se hizo bolita inmediatamente tratando de ser lo más sumiso posible, reprimí un pequeño chillido que quería escapar de mi garganta.
¿Q-qué me pasa.?

---¡¿Quién fue.?!---preguntó Jean frunciendo el ceño---¿Te obligaron.? ¿O peor, te atacaron.?
---Juro que lo mataré sí te obligó---murmuró Jun apretando sus puños.
---T-tranquilos fue su destinado.. Lo reclamó por accidente---respondió Ben que apenas despertaba y no se vió tan afectado por el denso ambiente y alarmante aroma que iba bajando lentamente.
---C-cierto, no hay nada que hacer, además el tipo desapareció, no sabemos nada de él desde hace más de una semana---habló decepcionado Alan que también parecía ir saliendo poco a poco del efecto de las feromonas.
---Dylan, lo siento mucho pequeño---me abrazó Jun cambiando la atmósfera a una ligera y tranquilizante, no hice más que llorar en su pecho​ mientras Jean, Alan y Ben trataban de calmarme.
Después de unas horas hablando me dieron ánimo suficiente y logré sentirme mejor, los chicos no parecían molestos del todo, eran mis pretendientes pero ya no los​ veía así, ahora éramos amigos.
---Jun, ya es tarde y debemos llevarlos a casa.
---Qué lastima---exclamó Ben.
--Bueno, vamos---dijo Jun tomándome de la mano delicadamente con una sonrisa en su rostro.
---Si---respondí con una sonrisa más tranquila, su presencia me resulta tranquilizante cuando me sonríe así.

Salimos del parque y entre juegos y risas llegó la hora de separarnos.
---Creo que ya me voy---se despidió Alan quién fue detenido por Jean que lo tomó de la mano.
---Jun, ¿Tú acompañas a Dylan y a Ben.? Yo no quiero que Alan se vaya solo.
---Está bien, nos vemos el lunes en el instituto---respondió Jun, y juntos miramos como se alejaban, Alan un poco distante evitando que Jean se acercará pero éste lo tomó en brazos como princesa recibiendo un golpe en la cabeza de parte de Alan mientras él sólo reía.

---Realmente se llevan bien esos dos---susurró Ben mirándolos con una gran sonrisa cómplice.
---Eso parece---respondí un tanto nervioso rascando mi nuca, son una pareja muy dispareja y explosiva sin duda.
Seguimos caminando hasta la puerta de la casa se Ben que se despidió y entró a su casa rápidamente.
---Creo que aquí te despido---dijo Jun soltando mi mano para abrazarme y darme un beso en la frente, un beso tan cálido que no pude evitar sonrojarme levemente.
---A-adiós---le sonreí una última vez y caminé hacia la entrada de la casa.
Apenas toqué la puerta mamá abrió..
---¡Llegaste más tarde cariño, debiste avisar que saldrías, estuve muy preocupada por... ¿Y ese olor.?!---dijo toda alterada mientras me abrazaba olfateandome extrañada.

---M-mamá, es sólo el aroma de Jun y Jean, son unos amigos alfas, nos cuidaron a los chicos y a mí cuando salimos al parque, no te preocupes, ¿Si.?
---Uhmm, no te confíes tanto de los chicos alfas, ve, date un baño, anda---dijo en tono burlón.
Sonreí leve y caminé a las escaleras pero antes de subir mi madre me miró preocupada antes de hablar---¿Nada aún.?
--No, nada---respondí desanimado subiendo las escaleras y yendo a mi habitación a darme un baño, sabía que mi madre se refería a Erick.

Justo cuando ya no lo recordaba miré la marca y ésta se borraba poco a poco, pero el dolor no disminuye..
¿P-porqué.?
Es de nuevo un gran peso que cae en mis hombros, me di un baño y me recosté en la cama ya con mi pijama puesta, unos pantalones y camiseta holgados y cómodos que dejaban la marca respirar tranquilamente como pocas veces hacia.
Deslicé mis dedos por la piel de la endidura y una descarga de tristeza me congeló los huesos.
---No te quiero olvidar, t-te amo, aunque quizás...lo mejor sea aceptar que te perdí.

Tomé el celular dispuesto a ver su número de contacto, ¿Si le llamo... Me contestaría.? No, no la hecho las pasadas veces, su número fue dado de baja.
¿Él realmente me abandonó.?
Sacudí mi cabeza de esos pensamientos y miré la pantalla encontrando una sorpresa.
O un mensaje más bien.
"Hola pequeño, ¿Cómo te sientes.?"
Sin pensarlo mucho marqué su número y rápidamente contestó.

--¿Jun.? ¿Cómo conseguiste mi número.?

--Ben me lo dió... ¿Ya estás mejor?

--Si, un poco.

--Recuerda, siempre te apoyaré en todo.

--Gracias..

--¿Bueno pequeño y qué haces.?

--Nada realmente, estoy en mi cama.

--¿Ya es tarde porqué no descansas y mañana te invito por un helado.?

--Me gustaría pero, tendrás que presentarte con mi madre..

--No es problema, ¿A qué hora.?

--Te parece a las 12 de la tarde, ¿Y te quedas a comer.?

--Claro, hasta mañana, descansa pequeño.

--Igual tú..

Me sorprendió bastante el mensaje de Jun pero me alegró mucho más hablar con él, bajé a cenar una vez cubrí mi cuello con un collar que mamá me compró y cubre demasiado bien mi marca.
Ya todos estaban en la mesa.
---Cariño, toma asiento---señaló mi asiento vacío con la cena ya servida.
---¡Dylan.!---gritó Zoe emocionada de verme, ahora que lo pienso no la había visto en todo el día por haber llegado tarde, le sonreí y me acerqué a revolver su cabello antes de tomar asiento.

---Mamá, un amigo vendrá mañana, ¿Te molestaría sí se queda a comer.?---me senté mirando atento la reacción de mi madre.
---¡Qué alegría hijo, claro que no me molesta.!---respondió emocionada, lo sabía.
---¡Siii, un nevo amigo.!---exclamó Zoe también emocionada saltando en su sillita especial de bebé.
---Claro, bueno cenemos---murmuró papá un tanto serio, aún estaba molesto por la marca supongo, aunque sé que no está molesto conmigo sino consigo mismo ya que según él "no pudo protegerme bien". Ser el único alfa de la casa sin duda lo hacía muy territorial con nosotros.

[Corregido]