Capítulo 11

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Ya pasaron quince días desde que anunciamos nuestra relación a nuestros amigos, la tarde fue muy agradable y solo recibimos comentarios de apoyo y uno que otro que nos decían que tardamos demasiado en darnos cuenta, podría decirse que en estos momentos sería el hombre más feliz de la tierra si no fuera por el tema del sexo.

Sé que Andrew está físicamente listo, pero no sé si lo esté mentalmente, aún tengo muchos miedos y dudas, pasa todas las noches en mi cama y los besos son más frecuentes, ahora ha comenzado un entrenamiento con los bomberos y protección civil, lo que ayuda a que esté muy cansado para cualquier otra cosa que no sea dormir, pero a este paso moriré de bolas azules.

El entrenamiento con los bomberos es más exhaustivo, ha marcado cada musculo de su cuerpo y está más sexy, además ha decidido dormir en unos pequeños bóxer de licra que le dijeron que los chicos de la estación usan, aún no me dice como consiguió esa información.

Si solo fuera esto lo que me preocupara seria egoísta, lo que en verdad me preocupa es que esta vocación no es menos peligrosa que ser policía, incluso ser policía es menos peligroso en esta ciudad, con el bosque tan cerca protección civil es muy solicitada para rescatar senderistas perdidos o animales salvajes que entran en residencias.

Mas no tengo corazón para decirle que no y su terapeuta dijo que era una gran idea y que yo tenia que superarlo, he estado pensando en cambiar de terapeuta.

- Sr. Lincoln, ya llegué a casa.

No puedo evitar sonreír al escucharlo, estoy preparando su cena favorita ya que últimamente su apetito es más grande.

- Joven Andrew le he dicho que no me llame así, o tendré que azotarle.

- Nunca lo harías, además tengo buenas noticias, me aceptaron como auxiliar en los rescatistas así que a partir de este fin de semana acompañare a la brigada.

Creo que me puse pálido y casi desmayo allí mismo.

- ¿Pero, no hay pruebas ni nada? ¿solo así?

- Bueno e estado con ellos dos semanas y mi formación para ser policía me sirvió de mucho, y resultó que soy muy bueno con las sogas, además solo seré auxiliar para ir aprendiendo, si todo sale bien estaré con ellos de forma definitiva, Dion es muy buen jefe y me ayuda mucho, todos me cuidan mucho papá no es para preocuparse.

Mientras Andrew hablaba yo solo podía pensar en osos, pumas, tomar a mi bebé y salir corriendo.

- ¿Papá? No quiero que te asustes ya soy un hombre, déjame intentarlo ¿sí?

Andrew me tenía pegado a su cuerpo con sus manos en mi cintura mientras besaba mi cuello y la razón escapó. Tenía un olor muy masculino, una mezcla de su olor, sudor y bosque que me erizaba la piel, en momentos como este es cuando debería decirle que tomara un baño antes de cenar, pero ya estaba chupando mi cuello volviéndome loco. Una pequeña mordida y ya estaba a punto de venirme en mis pantalones.

- Andy para por favor, la cena...

- Ya comí un sándwich en el camino y hoy solo hicimos nudos en la práctica, así que no estoy cansado señor Lincoln. O creíste que no me daría cuenta que me estas evitando?

Su voz era baja y ronca, podía sentir su erección moliéndose con la mía, mi camisa estaba completamente abierta y mi pecho a su merced, mordió uno de mis pezones y luego pasó su lengua para aplacar el dolor. Me levanto de las nalgas, puse mis piernas alrededor de su cintura y me llevó a la habitación, con mucho cuidado me dejo caer en la cama y comenzó a desvestirse.

Las Leyes del Amor 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora