¡¿¡PORQUE NO ME TEMES!?! ¡¡ESTUPIDA OVEJA!! (HIATUS) [AU/Katsudeku/yaoi]

¿COCINAR? ¿QUE ES ESO?

Narrador: 3era persona

Serian cerca de las seis a.m. por aquellas epocas donde amenece mas temprano y el sol asoma su faz desde cinco y media de la madrugada aproximadamente, su luz a penas y se filtraba por la rendija de una carpa improvisada, echa de pieles de animales, un fino hilo, casi transparente como la tela de una araña, acariciaba su mejilla, era agradable su calor, sin embargo, le fastidio un poco, aun no tenía deseos de levantarse, sabia que era muy temprano, el gallo de la granja vecina aun no cantaba y aun no olia el tipico olor de desayuno, por lo que su madre probablemente aun no se había levantado tampoco, no ganaría nada despertando aún, despues de todo eran vacaciones de verano, lo mejor seria seguir recostado un rato en aquella suave superficie. El fino hilo iba creciendo en grosor a medida que la brillante estrella hacia su entrada triunfal, fruncio un poco el ceño por la molestia y con una de sus manos se cubrió el rostro con la frasada; era extraño, el muchacho no recordaba que sus sabanas fueran asi de pesadas y...suaves casi como el pelaje de un animal...de un animal...salvaje, en ese instante su memoria lo golpeó como un rayo, desperto de golpe y de un salto se hallo sentado en lo que parecía una piel, estaba completamente desnudo, solo una extraña tela lo cubría, le parecia familiar, ese color rojo, esos bordes blancos...CLARO!! Era la capa de aquel chico, del lobo!!

Miro hacia todos lados esperando no encontrarse con él y para su buena fortuna asi era, no habia indicios de aquel joven cerca, luego miro la capa que tapaba su intimidad y se sonrojo un poco ¿significaba acaso que aquel chico... lo habia visto desnudo? No quiso pensar en eso. Inmediatamente se puso a murmurar cosas casi imposibles de entender para cualquiera, pero resumiendolas, sobre su madre, que haria ahora él? Había prometido quedarse, pero...y su madre? Queria verla al menos una última vez, escapar quiza seria peligroso con tantos lobos afuera, pero la prioridad ahora seria...

-Buenos días bello durmiente!!- irrumpio en su cuarto un chico pelirojo con varias telas envolviendo su cuerpo a modo de vendas, llebaba una amplia sonrisa- es hora de despert...- su sonrisa se esfumo al encontrar a la dulce oveja con el torso descubierto y una cara de sorpresa- L-lo l-lamento!!- grito y acto seguido se retiro tan fugazmente como aparecio.

Izuku quedó helado, algo avergonzado y muy sorprendido.

Una mano se adentro en la carpa y dejo una muda de ropa, seguida se oyo la voz del pelirrojo disculpandose.

Izuku aun avergonzado se vistio, le habían traido una camisa, un pantalon y un chaleco verde, junto con calzado. Al terminar, se sento en la tela que lo acogio en la noche, no sabia que pensar o que hacer. Estuvo haci algunos minutos hasta que el pelirrojo volvió a ingresar, esta vez cubriendo sus ojos por si acaso.

-Ovejita-kun? Estas vestido?- pregunto el chico con su diestra tapando sus ojos.

-Y-yo s-si- solo alcanzo a decir Izuku tímidamente.

-ok- se descubrio la vista- oh pero si eres un niño aun- dijo sentandose a su lado, parece que no conocia el espacio personal y se le notaba muy confianzudo, no a propósito claro.

-Y-yo...tengo 16 años...-dijo izuku mirando hacia otro lado, se sintio algo dolido puesto que el pelirrojo de quiza tan solo unos años mayor lo llamo niño.

-¡¡Que!! Lo lamento mucho!! Pero en verdad, no pareces de mas de 15- le respondio rascandose la nuca-oh cierto! Que mal educado soy, me llaman Kirishima!! Kirishima Eijirou, es un placer!!

-O-oh m-mi nombre es...- nuestro tierno izuku fue interrumpido por el sonido de su estómago hambriento, muy hambriento, pues no habia provado vocado desde el último desayuno con su madre- e-ehhhhh- Izuku quería que la tierra se lo tragara.

-PERDON!!! Debes tener hambre!! No te preocupes, de inmediato te traere algo de comer- y salio corriendo.

Habrian pasado cerca de 15 minutos cuando el chico vendado regreso, con compañía, la pelirosada y el rubio de la marca negra como un rayo lo seguian.