ESPECIAL COMO TÚ

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Narrador 3era persona

Era su tercera mañana como miembro de la manada, abrió sus ojos topandose con las pieles rodeándole, se removió en su lugar y por tercera vez se topó con aquel techo de madera desgastada que lo resguardaba del frío nocturno, se sentó y miro hacía el lugar, vacío, que su acompañante siempre dejaba, ¿A caso algún día despertaría antes que él? ¿O junto con él? Si lo pensaba mejor, solo era en las noches que podía pasar tiempo junto a él, pues en su ocupada rutina no tendría tiempo para dedicarle que no fuera en las noches.

Izuku dio un largo y pesado suspiro, él quería hacer feliz a Katsuki, pero en realidad, sabía muy poco de él y no contaba con el tiempo para poder conocerlo, Izuku sacudió su cabeza, no debía ser pesimista, debía tener siempre una sonrisa ante la vida y resolver los problemas que se presentarán, si Katsuki no tenía tiempo para él, entonces Izuku haría que si lo tuviera o en su defecto, Izuku sería el que hiciera tiempo para pasar juntos, si se ofrecía como ayuda seguramente podría estar al menos un par de horas cerca de él, no importaba cómo, Izuku lograría acercarse al rubio, rendirse no era opción.

Estaba a punto de levantarse cuando la puerta se abrió de golpe asustando al pecoso.

-¡¡Buenos días Izuku-kun!!- era mina- ¡Ya es de diaaaaa!-

-A-ah... buenos días Mina-san-

-Solo Mina- dijo con una sonrisa.

Izuku asintió.

-¡Te traje ropa!- dijo alegre y se la tendió.

-Oh g-gracias ...eh? Es mi chaleco- Dijo mirando la prenda de la cual antes se había olvidado.

-Eri-chan lo guardo para ti, pero, ¿¡que esperamos!? Vístete y te esperó afuera!- y salió del cuarto.

Izuku examinó la ropa que le habían traído, no era muy diferente de la anterior, solo que el pantalón era negro y las botas no le quedaban tan sueltas como las anteriores, de verdad como extrañaba sus amadas zapatillas rojas, la camisa si bien le quedaba mejor que la que tenía puesta, aún era un poco grande pero no importa, Izuku se quitó las pieles de encima develando sus blancas piernas, los shorts con los que había dormido resaltaban sus piernas pues le quedaban por sobre las rodillas, pero esa bonita vista sólo pudo ser gozada por Katsuki al despertar, quien de forma recelosa cubrió al durmiente para evitar que el chico sintiera frío o...que alguien más viera sus contorneadas y blanquecinas piernas de porcelana.

Ya vestido salió de la casa y se encontró con Mina en la entrada de la cueva.

-¡¿Y que quieres hacer Izuku-kun?! ¡Tenemos todo el día!-

Izuku suponiendo que ahora le tocaba a Mina cuidar de él simplemente quiso comer, pues si bien su aporte no fue el mayor en la excavación del día anterior, si fue dura y constante y pues...le dolían los músculos, ese día Izuku solo deseaba descansar.

-¿Te parece si comemos?- dijo tranquilo.

-Oh, yo ya comí, pero espera que te traigo algo!-

-N-no es nesesario, yo puedo ir-

-Tranquilo Izuku-kun yo iré, tu espera aquí- y se fue.

-E-esta bien-

Izuku se apoyó en una de las paredes de la cueva y se deslizó hacía el piso, le dolían los brazos de tanto cavar, sus dedos estaban entumecidos, sus piernas también adoloridas por haber estado en cuclillas y posiciones incómodas todo el día, bueno, en resumen le dolía todo, así que se tiró allí y punto.

Los que pasaban cerca le saludaban e Izuku correspondía los saludos con una sonrisa, todo estaba bastante tranquilo, solo paso un momento incomodo al momento que Kirishima paso cerca junto con Kaminari cargando vario platos, al cruzar miradas Kirishima le saludo con la mano pero con una sonrisa nerviosa, a lo que Izuku con la cara roja le respondió el saludo.

¡¿¡PORQUE NO ME TEMES!?! ¡¡ESTUPIDA OVEJA!! (HIATUS)  [AU/Katsudeku/yaoi]Where stories live. Discover now