Capitulo - 64

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Mis pastelitos de arroz, de antemano una disculpa no voy a poder subir las dedicatorias hoy pero mañana les prometo que si las subo.



El omega estaba hablando con una de las empleadas. Jungkook sonrió cuando unas manos se colaron en su cintura y el olor de su alfa le llegó a la nariz. La chica se despidió con respeto y el castaño se dio la vuelta para abrazar a su hombre por el cuello. Jimin conectó sus labios con los del omega mientras que continuaba abrazándolo por la cintura.

—Que linda sorpresa. —sonrió el alfa.

—No quería interrumpirte, me dijeron que estabas en conferencia.

Jimin rodó los ojos. Se giró al escuchar a su padre hablando con los Lee. Miró a esos empresarios que no le caían muy bien. Frunció el ceño al ver que esos alfas miraban a su omega con una expresión atónita en los ojos, Young Mi mantenía su boca abierta mientras que Hyun lo miraba con sorpresa. Se volteó sólo para encontrarse con la mirada de su omega, llena de sorpresa y miedo. Se acercó a Jungkook y lo tomó de la barbilla. Tanto Chung Hee como él estaban confundidos por el comportamiento que estaban teniendo. Young Mi, Hyun y Jungkook estaban petrificados.

Y la preocupación le llegó al cuerpo al ver como su omega comenzaba a temblar, miró a Jungkook y se encontró con dos cascadas recorriendo sus hermosos ojos. Lo atrajo a su cuerpo y lo miró.

—¿Amor? —dijo tomando las mejillas del omega para que lo viera pero Jungkook no le dirigía la mirada, no podía apartar sus ojos de esos alfas.

Y en menos de lo que Jimin esperaba, el cuerpo del omega se desvaneció sin dejar de temblar, el alfa vio como su chico ponía los ojos un tanto blanco antes de caer en sus brazos. Park lo sostuvo con fuerza y se alertó al ver como el castaño perdía la conciencia, varios trabajadores pusieron atención a la escena. El alfa comenzó a mover el cuerpo de Jungkook mientras que Chung Hee se dedicaba a llamar al doctor del edificio. Mierda y más mierda. Los empresarios miraron todo sin poder creerlo, se trataba de su hijo. Young Mi simplemente no podía reaccionar, el cuerpo de Jungkook estaba ahí, el chico que hace mucho no veían se había desmallado frente a sus ojos. Jimin no tardó en tomar el cuerpo del omega y llevarlo a la enfermería del edificio.

♦♦♦

Los ojos de Min Ho se abrieron poco a poco. Miró a su alfa viendo una película en la televisión. Se incorporó en el sillón y se frotó el ojo derecho. Jin lo atrajo a su cuerpo.

—¿Cuánto dormí? —susurró con la voz un poco más ronca, haciendo que para los oídos del alfa sonara demasiado sexy.

—Como una hora. —dijo el castaño. Min Ho se dejó caer en su pecho, Jin le acarició la espalda con cariño.

—Ordené comida china. —sonrió el alfa. —¿Se te antoja?

El menor sonrió y asintió. La mano del alfa terminó en su vientre y un sonrojo se apoderó del omega cuando el alfa comenzó a trazar líneas en su pancita. El pulgar de Jin se paseaba por esa piel estirada, Min Ho alzó su mirada para encontrarse con los ojos del alfa analizando sus reacciones, sus labios estaban muy cerca, tanto que podían sentir el aliento del otro con facilidad. El omega le había negado un par de veces al alfa sus labios, eso lentamente frustraba a Jin y terminaba haciendo un sonido similar a un lamento lobuno; provocándole una sensación de culpa al pelinegro, pero era hora de ponerse fuerte, no dejaría que el alfa lo siguiera controlando.

Estaban a centímetros de conectar sus labios. Para Min Ho era un tremendo esfuerzo cuando se controlaba, su omega lloraba por negarle los cariños de su alfa. Necesitaba autocontrol. El omega sonrió cuando Jin acarició su nariz con la de él. Bien, quizás un beso no dañaría a nadie. Sonrió al ver la emoción reflejada en la expresión del alfa, se acercó más y en unos momentos estaban uniendo sus labios. Oh sí, esa sensación de sus lenguas encontrándose, esa relajación cuando probaban los labios ajenos volvió a sus cuerpos. Jin pasó sus brazos por la cintura del menor y lo atrajo para sentarlo en sus piernas. El beso era inocente, lento, con cariño. Min Ho llevó su mano a la mejilla del castaño y la acarició, el alfa comenzó a dejar pequeños besos en sus labios, provocando varios chazquidos.

—Min...—dijo el alfa. Min Ho sonrió, amaba ese apodo y saber que Jin era el que se lo decía, le removía su interior de felicidad. —Te amo.

—Yo también te amo. —dijo apenado.

Jin volvió a acercarse para darle otro beso en los labios. Min Ho sintió como las enormes manos del alfa se metían por debajo de su ropa, empujando hacia arriba para tratar de quitársela. El omega se separó rompiendo el beso y lo miró.

—Jin...

—Lo siento, lo siento mucho. —dijo apartándose del cuerpo del omega. —No quería asustarte Min, no... e-en serio, lo lamento.

En eso el timbre sonó y Jin se levantó para ir por su billetera, el omega miró como pagaba por la comida y la dejaba en la mesa para poder ir a sacar unos platos. Min Ho se puso de pie y caminó hasta llegar al cuerpo del alfa, lo abrazó por la cintura y dejó su cabeza reposar en la espalda del alfa.

—Gracias por estar aquí. —dijo con una sonrisa. Jin se volteó y lo abrazó.

—Gracias a ti por darme otra oportunidad.

Comieron, jugaron un poco al hacerlo, vieron una película y por primera vez desde que volvieron a estar juntos, Min Ho se permitió tener un poco de intimidad con su alfa. Ambos en la tina, besándose y con sus cuerpos expuestos a los ojos del otro. Jin amando la forma como las caderas del omega estaban más anchas por su bebé. No hizo falta sexo para demostrar lo que estaban sintiendo, el aroma a felicidad los delataba.

♦♦♦

La oscuridad se fue disipando mientras que un castaño abría sus orbes para encontrarse con unos ojos azules claros. Frunció el ceño por la repentina luz colándose por le habitación. Jimin se dio cuenta de eso y apagó la luz.

—¿Alfa? —dijo el menor.

—Sí, aquí estoy amor. —susurró acariciando el cabello del omega, Jungkook se dio cuenta de que estaba en la oficina del empresario, acostado en el sillón.

—¿Me dormí? —preguntó con una mueca, no recordaba nada.

"Santa virgen de la papaya. ¿No se acuerda?" pensó el alfa al verlo. ¿Qué le diría? ¿Y si era mejor mentirle? Lo más probable es que se asustara, sea cual sea el motivo por el cual se desmalló unas horas atrás. El doctor sólo le dijo que fue un mecanismo de defensa el haberse desmallado. ¿Defensa de qué? Odiaba sentir que se estaba perdiendo de algo muy importante.

—Sí mi rey, caíste dormido. ¿No dormiste bien anoche? —dijo con tal de distraerlo. Se acercó para dejar un beso en sus labios.

—Al parecer no...—dijo el castaño acariciando la mejilla del alfa. Sonrió cuando Jimin le besó la mano. —Me duele la cabeza.

Jungkook no dijo nada cuando su hombre le pasó una pastilla y una botella de agua, como si supiera que despertaría con dolor. Aun así, tomó la pastilla y se sentó, sintiendo punzadas en su cráneo. Una vez que estuvo listo sólo miró como Jimin lo analizaba, tan crítico, tan serio, tan demandante que llegó al punto de intimidarlo. Lo que no sabía era que el mayor estaba pensando sobre una posible respuesta, una que no sabía si sería buena o mala.

—¿Jungkook? —dijo con seriedad. El omega lo miró. —¿Cuál es tu nombre completo?






Hola de nuevo mis pastelitos de arroz.

Perdón por no poder actualizar temprano pero hoy aquí en Costa Rica se celebra el Festival De La Luz la cuál una actividad navideña que se celebra todos los años y pues sin hablar mucho es una tradición.

Acabo de llegar de dicha actividad y lo único en lo que pensaba era que se me estaba haciendo super tarde para actualizar.

Otra vez perdón mis pastelitos!

Besos, abrazos y que en esta época del año tengan a alguien que les diga que los ama.

Y si no, pues Sepan que yo los amo con mi corazón completo.

Bye.

Don't You Hurt Me Jikook (Adap)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora