Yoongi y Jin con dieciséis años de amistad lo han hecho todo menos enamorarse pero eso puede pasar el día en que Jin es abandonado minutos antes de casarse.
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Yoongi tenía la sensación de que esto no iría tan bien como Seokjin pensaba.
En realidad, Yoongi ni siquiera pensaba que llegarían tan lejos cuando aceptó venir. Pensó que Seokjin cambiaría de opinión por completo y se desmayaría una vez que se diera cuenta de que la idea de que durmieran casualmente juntos no sería lo mismo que el acto, pero no. Ambos están acostados medio desnudos en la cama con Seokjin en medio de un ataque de risa como el idiota que es, mientras que Yoongi lo mira con su pene en la mano, ya que su compañero obviamente está un poco indispuesto en este momento.
El par de tragos de tequila que lanzaron cuando Yoongi llegó parecía una buena manera de relajarse. Ahora se pregunta si tal vez el alcohol hizo más daño que bien, ya que han estado acostados aquí durante quince minutos porque ver a Yoongi con una erección en su calzoncillo le recordó al cerebro de Seokjin la fiesta de cumpleaños de Hoseok hace casi doce años cuando encontró a Yoongi en una posición bastante comprometida.
-¿Ya terminaste?
-¡No! Dios, fue muy divertido! Deberías haber visto tu cara.
Si Yoongi tuviera que adivinar, diría que su rostro probablemente estaba con la misma expresión molesta y no impresionada que tiene ahora con su semi erección disminuyendo a cada minuto.
-Era un chico gay de doce años en una piscina llena de niños sin camisa- a esa edad, un fuerte viento podría haberlo endurecido, sus hormonas estaban locas- Tenía que cuidar de una situación determinada y me seguistehasta el baño. ¿Quién incluso hace eso?
-Bueno, ¡saliste tan rápido de la piscina que pensé que algo iba mal!- resopla- ¿Y quién no cierra la puerta para hacerse una paja?
-Um, ¿quién no golpea antes de entrar?
Su pregunta solo hace que Seokjin vuelva a reírse e incluso más fuerte que antes. Y así como ese fatídico día, atrapó a Yoongi con su pantalón corto de natación alrededor de sus rodillas y cada vez que lo menciona, Yoongi siente la clara necesidad de estrangularlo.
-Está bien, eso es todo. Estoy fuera. Te dejo- anuncia, arrebatando la almohada de debajo de la cabeza de Seokjin para golpearlo con ella.
-No puedes. Has estado bebiendo- dice Seokjin con aire de suficiencia.
-Bien. Entonces, voy a dormir como quería- decide Yoongi- Aqui no. En algún otro lugar.
-¡Nooo! ¡No te vayas!- se ríe. Yoongi pone los ojos en blanco, luchando contra la necesidad de reírse cuando las manos de Seokjin se cierran alrededor de su muñeca para mantenerlo allí- Lo siento por reírte de ti todo lindo y prepúberte. Seré más serio. En serio- jura Seokjin.
Apenas podía decir eso con una cara seria, pero sus labios se sienten bien cuando lanza un beso al hombro desnudo de Yoongi.
-Lo siento- dice otra vez, esta vez justo debajo de la oreja de Yoongi antes de que su lóbulo quede atrapado entre los dientes de Seokjin. Y sí, ya lo volvió a convencer.
