Imagen. TaeGi/YoonTae.

III

- Me rindo - Taehyung dejó caer su cabeza sobre la pila de trajes que había tomado para probarselos.

La había insistido a Seokjin por que lo llevará a un buen lugar donde conseguir trajes a medida y especiales, finos, cómodos, lindos, elegantes y aburridos.

Si, aburridos.

Llevaba casi dos horas mirando trajes, comparando texturas, cortes, talles y todo cuanto era posible. Todo para evitar pensar en lo colores, sin embargo, el ver esos colores tan lúgubres le hacían querer correr. La vestimenta sería no era lo suyo.

Aún recuerda el funeral de su suegro, trato con demasiada fuerza el presentarse junto a su esposo en despedida al señor Jeon, con la mayor seriedad posible, sin embargo había algo en su interior que se lo impedía. Vistió un traje negro, claro que si, un traje negro con pequeños lunares blancos, una camisa blanca sin corbata, recién se había teñido el cabello de rubio brillante y usaba lentillas azules para ayudar con su visión. Lucia más como si estuviera en algún evento nocturno que en un funeral. Su intención no era ofender a la familia ni llamar la atención de los presentes pero no lo podía evitar, había cosas que no tenía en su interior.

- Vayamos a casa y llamemos a tu diseñador, todo esta bien Tae - Dalilah froto el hombro de su amigo intentando animarle.

- No, yo necesito algunos trajes. Sólo debo visualizarme en ellos - tomó una par de ellos y los colocó frente a su cuerpo, acarició la tela tratando de acoplarse a ella pero un estremecimiento incómodo lo recorría.

Era demasiado para él dejar la comodidad de sus ropas de algodón, manta y lino por trajes de lana o de materiales como el poliéster. Eso sin mencionar que prefería la ropa holgada o solo la mezclilla demasiado justa. Realmente sería difícil que él se sintiera cómodo en un traje de lana corte recto. No se imaginaba en ello.

Un par de lágrimas se formaron en sus ojos pero él se negó a dejarlas libres. Seokjin lo miro desde su lugar, a una distancia prudente, y concluyó ayudarlo para que consiguiera su objetivo sin sacrificarse.

- Toma un par de trajes o los que creas que pueden servirte, y ve a aquel apartado. En unos minutos estoy con ustedes.

- Pero Jin...

- Ve Tae, no tardaré.

Taehyung y Dalilah tomaron algunos trajes que, de corte, habían medio agradado al artista. Dentro de aquel apartado, una hermosa sala de espera lo suficientemente grande para que hubiera en ella vestidores, espejos de cuerpo completo, un escritorio, una mesa de cortes, máquinas de distintos tipos de costuras, maniquíes y un armario de telas y accesorios, Taehyung colgó los trajes por encima de la mesa y comenzó a verlos detenidamente, eran agradables pero podrían ser lo que el buscaba si se hacían algunos ajustes. Tal vez no podría cambiar la tela de la cual estaban fabricados pero podría añadir centímetros o disminuirlos, reducir las pinzas o modificar el talle. Todo era posible en la mente del peli rojo.

Ambos sumidos en los pensamientos dichos del artista, no notaron sólo cuando una chica entró, saludo y dejó una botella sobre una hielera, un par de copas y unas latas. Después un castaño delgado entró seguido de su Seokjin, ambos hablaban con familiaridad.

- Lamento la tardanza, recien pude tener la atención de este genio - Seokjin alago al chico que lo seguía ganándose una sonrisa llena de agradecimiento y confianza - Tae, me gustaría que conozcas a Byun Baekhyun, es mi diseñador de confianza.

Taehyung miro con curiosidad al chico frente a él, imaginaba que rondaban la edad pero él se miraba muy joven.

- Señor Kim, es un placer conocerlo al fin.