XVIII. Tarde lluviosa.

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El resto del camino estuvimos charlando acerca del pasado sin importar el torrencial aguacero que cae encima de nosotros. Afortunadamente la casa de Alex está a aproximadamente 5 minutos.

La plática se torna muy nostálgica en este punto.

-¿Extrañas tu vida pasada, antes de que fueras famoso?- Pregunto a Turner.

-No realmente, ser famoso me ha abierto muchas puertas y no hay nada como estar satisfecho haciendo lo que amas... - El hombre mira a la nada y luego voltea hacia mí.- Pero creo que ya te había contado esto antes, muchas veces me siento solo. Sí, veo a los chicos constantemente pero ahora es diferente, ellos tienen una vida hecha y varias veces tengo ganas de hablar con alguien acerca de lo que me ocurre o no sé, alguien que simplemente escuche.-

-Hmmm, ya veo...-

-Sí... y creo que por eso es lo que he estado buscando todo este tiempo, alguien que escuche.-

-¿A qué te refieres con eso?-

-Bien...- suspira- ya te había comentado lo que sucedió con Alexa, a raíz de eso fui intentado llenar ese vacío con relaciones que no valían la pena. No voy a negar que tuve buenos momentos junto a esas chicas pero llegué al límite. Llegué al límite una vez que estaba en una fiesta en París con Louise, no había bebido y me sentía desanimado sin motivo alguno. Ella bailaba y a pesar de haberme visto así no le importó y continuó con lo mismo. No quiero decir que por el simple hecho que me sienta mal ella debió detener su vida pero no mostró un poco de interés a lo que yo sentía. Fue ahí cuando me di cuenta que no buscábamos las mismas cosas. Regresé a California al día siguiente y no salí de la cama como en una semana, fue una semana de verdadera reflexión y revelaciones, un día decidí dejar a un lado las emociones que sentía y fue cuando contacté a Nielsen para que revisara el asunto de los contratos. Y después te conocí.-

-¿Y cómo sabes que lo que sientes... bueno, lo que me dijiste esta mañana no es más que un inútil intento en llenar el vacío que dejó Alexa en tu vida?-

-Porque lo sé, lo siento en verdad. No me sentía de esta manera desde... bueno, no me había sentido así en mucho tiempo.-

Estoy segura que estaba a punto de decir "Desde que estaba con Alexa" pero por obvias razones decidió omitir ese detalle.

-Hmmm, ¿cómo estar segura de que puedo confiar en tu palabra?-

-Por Dios, Aly, ¿te he mentido alguna vez?-

-No, no que yo sepa.-

-Pues te digo la verdad.-

-Tranquilo, mira, no hay que presionar las cosas. No te voy a negar esto, me siento un poco sobrecogida por esto pero... debo admitir que me gusta tu manera de ser pero todo esto será un desastre, si Nielsen se entera es sinónimo de "Adiós empleo".-

-Somos adultos, creo que somos capaces de tomar nuestras propias decisiones, Nielsen lo entenderá.-

-No entenderá Alex. Tú no tienes nada que perder, yo sí.-

Me detengo y dirijo mis manos a la cara, acto seguido emito un profundo suspiro.

Un par de lágrimas caen sobre mis mejillas, espero que el británico no las note por la lluvia.

-¿Estás bien?-

Turner se aproxima a mí y me abraza, rompo en llanto.

Es la primera vez Alex me abraza y debo decir que su abrazo es de los más sinceros que me han dado en la vida. Estando contra su pecho siento la humedad de su camiseta mojada, su mano derecha acariciando mi cabello con el gorro café húmedo y su brazo izquierdo sosteniendo mi cintura contra su cuerpo.

Whatever people say I am, that's what I'm notWhere stories live. Discover now