Parte 19

127 8 0
                                    

Llegamos al hotel pasando directo a la habitación cada uno tomando un baño por separado. Nos ponemos pijamas y vemos una maratón de películas, jugamos con los meniques de nuestros pies riendo a carcajadas. Nos concentramos en la película quedándonos dormidos con la tele encendida.

Me desperté con el ruido de mi celular rebuscando por la cama hasta que lo encontré en la mesita de noche observando que es André.

André.

Hola hermosa, me puedo pasar por tu casa, necesito hablar contigo. No me ignores, Pao.

Casi lo mato por despertarme y recordando que estoy en París y que tenemos horarios diferentes. Decido responderle el mensaje con un ojo abierto y el otro semi cerrado

Paula.

Hola André, ¿Como estas? La verdad no podemos vernos, no me encuentro en New York, estoy en París en un viaje de negocios con mi Jefe... Por si no lo sabes son las 3 am aquí, demoró aquí como 3 días más en llegar. Te mando un beso y espero verte pronto.

Había contestado a su mensaje pero me sentía mal por haberle mentido a él. Si estoy en París con mi jefe, pero no en un viaje de negocios, sino de placer. Como decirle a él un hombre con el que tienes momentos buenos, por decirlo así, amigo con beneficios que estoy metida en la cama de mi jefe.

Nuestros encuentros me agradaban antes de conocer a Scott y entregarme por completo a él. Dejaré mis juegos sexuales con André y solo hablaremos por cosas laborales referentes a la editorial o cualquier contrato a trabajar.

Veo la televisión prendida me levanto con algo de pereza y la apago volviendo a la cama al lado de ese hombre tan maravilloso que tengo a mi lado que está dispuesto a luchar por este amor que nació entre los dos, así tengamos que mantenerlo en secreto por algún tiempo. Eso es lo que yo pienso que Scott siente cosas por mí, y que se la jugara todo por mí.

¿Qué precio tan caro tendría que pagar por sus besos?

Al día siguiente me levanté antes que él quise salir a correr, tomar algo de aire fresco olvidando mi móvil en cama. Disfruto del día tan maravilloso que hace. Es un día fresco, luminoso, hermoso. Me encanta tanto lo que veo que tomó foto de todo lo que se mueve. Me dispongo a irme al hotel quiero ver a Scott y mirar que haremos hoy a ver que sorpresa me tiene. Y que sorpresa me tiene.

Llegué y lo noto seco conmigo me acerco a besarlo y me esquiva no permitiendo mi contacto así él.

— ¿Qué pasa Scott? ¿Por qué esa actitud conmigo? — Digo en un tono de reproche no entendiendo por que se comporta de esa forma.

— Eso mismo me pregunto yo, Paula, ¿Qué pasa contigo? Me estás viendo la cara de idiota o ¿Qué?

— No entiendo a qué te refieres ¿Explícate mejor Scott? — Le pregunto impactada, su cara estaba hirviendo del enojo.

— Me refiero a te mando un beso y espero verte pronto... te suenan esas palabras Paula

— Yo te puedo explicar, Scott. ¡Cálmate, por favor! Entre André y yo no hay nada. Nos veíamos, teníamos sexo y ya... pero eso lo deje de lado desde que te conocí a ti.

— No te creo nada. — Grita — Yo hizo esto por ti... mira como me pagas y te molestas que otras chicas me miren y tú lo que haces. Si no hubieras dejado tu móvil jamás me entero ¡Que decepción Paula!

No pude terminar de hablar ya que me dejó sola en la habitación tirando la puerta de un portazo saliendo muy furioso. No sabía para donde se ha ido no lo quise seguir. Quiero que despeje su mente que crea en mis palabras y en los sentimientos que tengo por él, y no en un mensaje que me jodió por completo.

Culpable mi Jefe (Saga Culpable)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora