Una cita para mi jefe

Bajo el paraguas

Por Mycroft

El detective inspector y yo seguíamos hablando en el restaurante tranquilamente yo lo miraba mientras el comía, su cabello gris ondeaba con la ligera brisa, mientras sus manos temblaban ligeramente, esta nervioso por mi silencio pensé, y dije

.D.I estoy agradecido de que el inconveniente haya sido solucionado a tiempo, opina usted lo mismo.

-No podría estar más de acuerdo, Señor Holmes.

.Hace un rato me llamo usted por mi nombre D.I

-Lo lamento yo no....

.D.I, no le estoy reclamando esto, de hecho puede llamarme así cuando usted guste, y yo lo llamaré por su nombre Gregory.

-Por mi esta bien señor, perdón Mycroft.

.Me alegra Gregory.

Digo mirando sus ojos fijamente el sonríe alegremente mientras sus manos tiemblan, levanto mi mano y toco su cabello gris,acariciando suave su cabello, el baja la cabeza nervioso y yo sonrió por primera vez en mi vida, oh D.I que me ha hecho, mi teléfono suena insistentemente y contesto de mala gana, era el gobierno, me necesitaban ahora.

.D.I, debo retirarme no sin antes decir, fue una estupenda velada.

-Yo, también me voy, parece que lloverá en cualquier instante.

.Si, gusta D.I puedo asegurarme de que llegué a su destino en mi auto, eso le molestaría Gregory.

-Yo..., si,digo no, es que bueno, no me molesta Mycroft.

.Perfecto D.I es hora de irnos entonces.

Dije yo levantándome de mi asiento, el D.I quería pagar la cuenta pero me negué rotundamente, salimos de el restaurante de prisa cuando un hombre empujo al D.I,el estaba por caer pero yo lo sostuve de la cintura fuertemente mientras sostenía el paraguas en mi otra mano, el me miro a los ojos con las mejillas sonrojadas, mientras yo lo miraba a los ojos, lo acerqué más a mi cuerpo mientras mi corazón latía apresurado, el tenía los ojos dilatados, y los labios rojos por el frío de la noche lo acerqué lentamente mientras nuestros cuerpos se acercaban más y más, yo respiré su aroma y mi corazón pidió más de eso, de repente sentí mi corazón calentarse por el hombre en mis brazos, Oh Gregory que me has hecho pensé mientra tomaba su rostro y acercaba sus labios a los míos y cuando estuvimos a punto de besarnos , el auto había llegado, nos separamos sonrojados hasta las orejas y el no dijo palabra en el trayecto, definitivamente ese hombre me tiene a su pies, Oh Gregory que me has hecho.

Continuara.....