Mirando mi "estrella" favorita

¡Felicidades! Un Polnareff se ha unido a tu equipo

"Su toque es muy veloz. . ." Escuche decir a la voz de Avdol, ya que si recuerdan yo estaba lamentando mi triste y hambrienta existencia en un rincón de la habitación mirando contra la pared. "Muy impresionante. ¿Así  que dices que me derrotaras antes de que las llamas de la mesa marquen las doce?" Mire por el rabillo del ojo para ver que hacia Avdol, su mano estaba levantada y apuntaba con el índice al misterioso francés. "¿No crees que estás siendo un poco engreído? Eh. . ." 

"Polnareff."  Admitió finalmente. "Permíteme presentarme: Soy Jean Pierre Polnareff."  Y luego de aquellas formalidades comenzaron un diálogo que realmente no me interesaba seguir, era eso o a la escritora le daba flojera. (¡Oye! No lo digas tan alto >:'v) 

Como iba diciendo, a Avdol pareció agradarle el lado amable y caballeroso de nuestro nuevo enemigo. "Sin embargo. . ." Y una vez dichas estas palabras la mesa con el reloj de fuego que había logrado hacer ese tal Polnareff salió disparada como un cohete gracias a que Avdol había subido la temperatura en la parte inferior de esta. Las caras de mis compañeros de viaje había quedado casi atónitas ante lo sucedido, por mi parte solo me levante y coloque al lado de Kakyoin quien me dedicó una dulce sonrisa, a pesar de mi insoportable hambre le devolví lo mejor que pude el gesto.  

Avdol andaba explicándole al enemigo su poder y técnica, siempre me pregunte por que lo hacen, digo, yo jamas explicare toda la capacidad de Honey Honey eso sería ridículamente estúpido, sin ofender Avdol. 

"En el principio de los tiempos, el fuego cubría la Tierra. No esperaría menos de Magician's Red. No obstante ¿Realmente crees que estoy presumiendo? ¡¿Dices que mi habilidad con el estoque  es pura presunción?" 

Y tras decir aquellas palabras lanzó al aire lo que parecían ser cinco monedas plateadas. De un estoque logramos ver que las había atrasado a todas de una, y entre las monedas se encontraron las llamas atrapadas de Avdol, algo que pareció sorprender a más de uno. "Je. . . Jejejeje. . . .Jejejejejejejejejeje JEJEJEJEJEJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAAAAJAJAJAJAJAJA" Todos se giraron hacia a mi, sostenía mis estomago de la risa. "Que divertido que era ¿Se cree especial solo por eso? Puedo hacerlo con una espina y los ojos cerrados jajajajajajaja." De golpe tanto el negro como el viejo parecían asustados ante mi actitud repentina. Ambos buscaban algo entre sus cosas, y lo buscaban de manera rápida y desesperada pero ¿Qué me importa? Tengo hambre, no aguanto mas. "Polnareff te llamabas ¿No? Bueno, solo espero que tengas buen gusto."  Parecía confundido ante mis palabras, como sin no creyera que realmente me lo iba a comer ¿Ustedes que piensan? Si, si me lo voy a comer, y no de la forma que le gustaría. 

Lance unas seis monedas al aire, después de un par de vueltas levante mi dedo índice en forma de pistola y disparé una de mis espinas. Además de impactar en las monedas, antes cortó la mejilla del francés que parecia anonadado al ver que las seis monedas había impactado en la pared completamente alineados. "No pareces ser tan mala niña-" El francés no pudo terminar de decir aquello ya que de un salto estaba arriba de él mordiendo su cabeza. "¡AHHHHHHHHHHHHH!" El pobre hombre comenzó a correr en círculos intentando quitarse a la loca que le estaba arruinando el peinado. 

"¿Enserio lo esta mordiendo?" Pregunto algo impactado el pelirrojo mientras veía la cómica escena ante el. 

"Esto es malo, muy malo." Exclamó Joseph asustado mientras buscaba en su chaqueta algun dulce o algo para calmar a la bestia en la que me había convertido.

Jotaro suspiro al ver semejante espectaculo, luego se dirigió a la cocina del restaurante donde tomó un manzana y silvo captando la atención de la chica. "Ve por ella."  Dijo lanzado la manzana a una punta del cuarto. De un salto la atrape en el aire, para aterrizar tranquilamente en el piso mientras comía la fruta felizmente.