kagome

RYUKOTSUSEI

La había sentido antes que llegara a estar cerca de él, su compañera, pero no podría verla o tocarla al estar atrapado a una gran roca por culpa de inutaisho

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La podía sentir a unos kilómetros no muy lejos de él, pero al mismo tiempo podía sentir que no estaba sola. Podía estar atrapado en esa roca, pero no estaba completamente muerto, su alma seguía ahí, sin poder escapar

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Estaba desesperado por salir de esa prisión, quería ir con su compañera, necesitaba verla, era la primera vez en más de 1000 años, que podía sentirla, y estaba atrapado. Entonces como si sus súplicas fueran escuchadas, sintió como el sello que lo contenía se rompía, pero a la vez sintió que algo estaba mal con él. No sé sintió como si fuera el mismo

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Cuando naraku libero a ryukotsusei, este entro en un ataque de rabia, al ser liberado de una manera brusca. Estaba perdido en una ira ciega. Al distinguir los hijos de inutaisho, mas enojado se puso, y comenzó a destruir todo. Pero entre todo el alboroto, logro entrar en un momento de lucidez sintiendo a su compañera. Logro verla, haciendo que se sintiera algo aliviado

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Podía sentir que era fuerte, y ante lo inesperado era humana, y una miko en eso. Pero quitando eso, era muy hermosa, con grandes ojos azules, con cabellera negra con toques azules, y mirada cálida, pero fuerte. Ella sería una gran compañera para él. Cuando intento tomarla en su mano, pero poder sentir su piel, entro nuevamente en una furia, cuando uno de los cachorros de inutaisho la quito de sus manos

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Volviendo a su ira ciega, comenzó nuevamente la batalla, en la cual ya no podía volver a ser el mismo, tener una vez más el control de su cuerpo. Estaba encerrado dentro de su propio cuerpo sin poder hacer nada para detenerse. Miro con desesperación al ver que cada ataque que el hacía, podía llegar a lastimar gravemente a su compañera

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Pero, en un descuido, uno de los cachorros de inutaisho logro derribarlo. Una vez en el suelo sin poder moverse, se sintió increíblemente aliviado al saber que al menos ya no podría dañarla. Pero también sabía que lo matarían, era inevitable. Al mirar frente a él, ahí estaba ella. Con su ropa extraña, pero su mirada cálida dirigida a él. Se relajó y no le quito la vista de encima. Si iba a morir, quisiera que lo último que viera fuera a su compañera

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Sintió como los cachorros de inutaisho se preparaban para un gran ataque. El último ataque, el que lo mataría. Suspiro y la miro con atención, se sintió feliz al ver que ella estaba derramando algunas lágrimas para él, alguien al que nunca había visto. Al menos moriría feliz

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Sintió los ataques en su dirección pero no se movió, ni quito la vista de ella. Quisiera haberla conocido antes. Cerró los ojos al sentir las cuchillas perforando su piel. Hubieran tenido una gran vida juntos

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