❥ My new addiction | Omelia {ᴛᴇʀᴍɪɴᴀᴅᴀ}

Cap. 10| "¿Celos?"

Como dije antes, estaba muy pensativa y no podía dormir. Tomé mi celular, lo desbloqueé y miré los mensajes que Owen me había escrito, vi que estaba en linea también, sonreí al notar que él tampoco podía dormir.
Quise escribirle, pero cuando comencé borré todo, volví a tomar coraje y decidí finalmente escribirle algo:
"¿No puedes dormir?"
Me respondió al instante y no pude evitar sonreír:
"Por pensar en ti"
Bloqueé el celular sin saber qué responder, me puse a pensar en las ganas que tenía de estar junto a Owen, de sentir su voz y su piel.
"¿No puedo ir a verte?"
Fue otro mensaje que escribió Owen al notar que yo no había respondido.
"Es tarde" le respondí y apagué el celular para poder dormir.
-¿Y George? -preguntó Meredith con Bailey en sus brazos.
-Se fue. Está parando en un hotel -respondí abrigando a Ellis.
-Es agradable -dijo Maggie llegando con Zola de su mano.
-Sí, es una persona agradable -dije sonriendo- hacía mucho tiempo que no lo veía.
-¿Hicieron algo? -dijo Maggie tapando los oídos de Zola.
-Solo un rato, fue bien rápido -dije riendome y cargando a Ellis en mis brazos.
Maggie rió y Meredith también.
Al llegar al hospital me dirigí al vestuario y estaba Owen con su torso desnudo.
-Oh -dije tapando mis ojos- perdón, debí tocar.
Owen rió al escucharme.
-Es un vestuario para todos, mixto -respondió él.
-¿Podrías vestirte rápido que me quiero cambiar yo? -le pregunté sacando la ropa de trabajo de mi casillero.
-Me daré vuelta y no te veré, pero no me iré -Owen exclamó dandome la espalda.
Sonreí al ver su espalda ancha y desnuda. Me desnudé quedando en ropa interior.
-¿Listo? ¿Por qué tardas tanto? -Owen decía riendo.
-Me sorprende que no te hayas dado vuelta para observar -reí.
-¿Quieres que lo haga? -sugirió Owen que comenzaba a ponerse la parte de arriba de su uniforme.
Terminé de vestirme.
-Amelia no puedes tardar tanto -dijo Owen protestando.
-Sí que puedo -dije mordiendo mi labio inferior, tenía ganas de ir con él y besarlo- ¿sabes algo? te quedaba linda la espalda descubierta -dije y muy despacio, sin hacer ruido me fui del vestuario, dejándolo hablar solo.
Operé toda la mañana y luego quedé con George vía mensaje de que almorzaríamos en la cafetería.
-Hey -dije al verlo sentado en una mesa y besé su mejilla.
-¿Cómo fue tu día? -preguntó George.
-Bastante tranquilo, por suerte -respondí.
En ese momento llegaron Alex, Jackson y Owen.
-Hey, tu debes ser George -dijo Alex estrechándole la mano.
-Hola amigo, un placer -respondió.
-George, él es Alex Karev-dije señalando a Karev- Jackson Avery y Owen Hunt -también los señalé.
-Un placer -George también estrechó la mano de Jackson y Owen.
Sonreí incómoda y miré a Owen que parecía mirar a George con desprecio.
-¿Quieren que almorcemos juntos? -preguntó George.
-Seguramente tienen trabajo -le dije a George abriendo mis ojos en señal de "¿qué haces? loco".
-En realidad no -respondió Owen mirándome.
-Genial -dijo George y me miró sonriendo, si quería poner a Owen celoso lo estaba logrando.
Nos sentamos los cinco en la mesa y Meredith se nos unió.
-Gracias por unirte -dije susurrando en su oído ya que se sentó a mi lado.
-De nada hermana -sonrió Meredith.
Owen quedó enfrentado a mí y de vez en cuando hacíamos contacto visual y yo me ponía muy nerviosa, él se veía enojado, se notaba que George no le simpatizaba.
-La verdad -dijo George mientras comía- es que ustedes son héroes, quiero decir, no podría hacer todo lo que ustedes hacen.
-¿A qué te dedicas tu? -preguntó Jackson.
-Estudiaba medicina con Amy -respondió y acarició mi cabello, pude ver que Owen lo miraba muy serio por estar tocándome- pero no era para mí, decidí seguir mi vida viajando por todo el mundo.
-Así que conociste a la Amelia Shepherd universitaria -dijo Meredith sonriendo.
-Oh, era muy cool -respondió George- sigue siéndolo. Hacía mucho que no nos veíamos -dijo palmeando mi hombro.
-Tienes buenos tubos viejo -exclamó Alex- ¿haces mucho ejercicio?
-Siempre -George sonrió.
-Y tengo una pregunta para ti -rió Alex- ¿Amelia siempre fue así de pesada?
-¡Oye! idiota -le dije a Alex riendo.
-Oh, Amelia es una explosión, así la apodo yo. Pero es una hermosa mujer, creo que eso lo compensa demasiado -dijo George acariciando mi mejilla.
-Patrañas -dijo Alex riendo.
Todos reímos, menos Owen que se levantó de la mesa.
-Tengo pacientes -dijo y me miró, pude notar que estaba enojado.
Terminamos de almorzar luego de reírnos un buen rato.
-Me iré a recorrer la ciudad un rato -dijo George cuando quedamos a solas.
-Creo que hiciste enojar a Owen, nunca más lo invites a almorzar con nosotros -dije enojada.
-Eso quería, que te cele. Ve, consuelalo un rato -George me guiñó un ojo.
-Eres muy tonto George -dije.
-Luego me lo agradecerás Amy -palmeó mi espalda y se fue.
Seguí el consejo de George, no planeaba ir y lanzarme a Owen, pero quería hablar con él. Se veía muy enojado cuando se fue y yo no quería eso, quería que fuéramos buenos compañeros de trabajo.
-Hey -dije al verlo en la sala de descanso, estaba sentado sobre una cama.
Owen me miró y ni respondió.
-Okay, no vas a decir nada -dije sentándome a su lado.
-No quiero hablar -dijo.
-¿Por qué? Owen te encanta hablar -dije sonriendo.
-Estoy enojado, no voy a hablar así. Es como si no tuviera filtro -dijo mirando el suelo.
-Entonces controla tu ira -dije- aprieta tus puños y dime que pasa.
Demostré el gesto a Owen y él sonrió.
-¿Ahora me dirás que sucede? -pregunté.
-No -dijo intentando levantarse pero yo lo agarré de su mano y lo empujé para que volviera a sentarse en la cama.
-No te irás sin decirme -dije enojada.
-Me puse celoso -confesó.
-¿Por qué Owen? debes entender que yo no soy tuya -dije en un tono calmado.
-Terminé todo lo que llegué a tener con Carina -volvió a confesar.
-¿Por qué? Owen debes pensar las cosas antes de hacerlas.
-Amelia ya sabes que pienso, pienso que eres lo que me interesa en este momento. Y ver que ese tipo te tocaba, acariciaba y besaba tu mejilla me hacía enloquecer -admitió Owen.
-Owen, George es mi amigo. Y tu y yo no somos nada. No puedes ponerte así -dije levantándome y quedando parada.
-Me pongo así porque de verdad me interesas. Y no sé que hacer para olvidarte, porque ya sé que yo no te intereso -Owen dijo.
Me quedé mirando a Owen, era tan hermoso, quería tirarme encima de él y darle un buen beso.
-¿Cómo sabes eso? -pregunté y me volví a sentar junto a él.
Owen me miró, sus ojos celestes como el cielo me miraban muy profundamente, comenzó a acercarse un poco a mí, quedando a pocos centímetros. Pude apreciar sus perfectos y finos labios enrojecidos, todo mi cuerpo comenzó a estremecerse.
También me acerqué un poco a él. Él tomó la iniciativa, y finalmente me besó. Le devolví el beso, moviendo mis labios junto a los suyos y llevé una mano a su mejilla para tener más agarré. Sus labios sabían tan bien, eran tan buenos, y ni hablar de su colonia que invadía cada parte de él. Era un hombre demasiado excitante.
El beso se estaba profundizando cuando la puerta se abrió y me separé de él rápidamente. ¡Diablos! nunca cerramos la puerta con traba.