Psicópata:

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Narra Ally:

Siento mi cuerpo arder y me levanto, humo negro sale por la rendija que está debajo de mi puerta.

Salto hasta la puerta y intento abrirla, parece que está cerrada por fuera, la golpeo con mi brazo y no se rompe.

-DYLAN ESTOY AQUÍ- grito desde adentro.

Nadie me responde, el fuego empieza a entrar por el cuarto y cada vez se hace mas difícil respirar.

-AYUDA- grito y luego toso.

Mi cuerpo empieza a sudar y a perder fuerza.

Tomo una silla y la aviento hasta la puerta, la silla se destroza pero no le hace ni un rasguño a la puerta.

-JODER- grito y empiezo a desesperarme.

Rompo la pata de la cama de metal y empiezo a golpear la puerta, se abre un gran agujero en el centro y yo sonrio victoriosa, continuo golpeándola hasta que se abre un espacio por donde puedo pasar.

Salgo de la habitación y veo mi departamento en llamas.

-DYLAN ¿DONDE ESTAS?- grito.

Nadie responde, corro hasta su cuarto y lo encuentro inconsciente, lo arrastro por la puerta y busco una salida.

Encuentro una por las escalera y llego a la puerta principal, pero al igual que la de mi habitación está cerrada.

Mis piernas se debilitan al igual que mis brazos. Mis pulmones dejan de funcionar.

Caigo de rodillas al suelo y no me puedo mover mas, luego de unos minutos oigo la puerta partirse y varios bomberos entran, sacan a mi hermano y luego a mi.

Todos los habitantes del edificio se encuentran afuera de este.

Visualizo a Ian correr hacia mi y luego me abraza -Estaba muy preocupado- dice y besa mi frente.

Un paramedico me revisa y me da oxigeno.

Camino hasta uno de los bomberos.

-¿Saben que inicio el incendio?- pregunto.

-Si, querosen, había una linea de querosen desde la cocina hasta una habitación, suponemos la de usted- responde.

-¿Saben quien lo hizo?.

-No, señorita- dice y niega con la cabeza.

-Gracias- digo y sonrió.

Me siento junto a Ian y Dylan que están en la acera, les cuento la información y luego me recuesto en el hombro de Dylan.

-¿A donde iremos ahora?- pregunto y luego bostezo.

-Ah un hotel, supongo- dice Dylan y yo asiento.

-¡NO!- grita Ian y me sobresalta -Lo siento, ¿Porque no se quedan conmigo?- pregunta.

-No lo se, hermano, ¿Estas seguro que quieres vivir con estos dos lunáticos?- dice Dylan y nos señala.

-¡Claro! Seremos los tres mosqueteros- dice con entusiasmo.

***

-¡Los matare!- grita Ian desde el segundo piso.

Dylan y yo nos revolcamos por el suelo mientras nos reímos a carcajadas, Ian baja las escaleras con labial rojo y sombra naranja en sus ojos.

-Amigo el rojo no es tu color- dice Dylan y se seca una lágrima para seguir riendo.

Miro a Ian y tiene una sonrisa malvada impregnada en su rostro, mis risas cesan al igual que las de mi compañero de vida.

-¡CORRE!- gritamos Dylan y yo al mismo tiempo para luego largarnos corriendo de la casa.

Me enamore del mismo idiota. (En edición)Where stories live. Discover now