Prólogo - Daysi Bonn

10 2 1
                                    


Siempre me había preguntado cómo le hacen mis amigas para besar chicos sin sentir nada más que ganas de hacerlo, cero compromiso, cero amor, todo es un acuerdo mutuo de satisfacción sin dependencia emocional. Me preguntada también cómo mis amigos podían tener sexo con varias chicas sin sentir nada, absolutamente nada por ellas. Día y noche me preguntaba cómo lo hacen para no sentir nada, cómo hacen para desconectar el placer y el sentimiento. Pensé luego que quizá la satisfacción personal supera los límites. He llegado a pensar que está bien no depender de alguien emocionalmente porque eso al final te destruye, pero no pude, si estuvieras frente a mí, me atrevería a preguntar: ¿Cómo lo haces?

La vida te enseña varias cosas y no siempre de la mejor manera. "La vida es una putada" solía decir mi amiga, y no hay nada más cierto que eso.

Veintidós años, ninguna historia de amor, una que otra de momentos de emoción y al final, decepción, todo termina en decepción.

Hice cosas de las cuales me arrepiento y otras cuantas que quisiera volver a vivir, una y otra vez. Deseo volver en el tiempo y sonreír, incluso volvería a arriesgarme por lo que vale la pena aunque ese sea el principio de mi final.

Esta no es la típica historia en donde las cosas terminan bien o una buena conversación acompañada de un "te amo" lo cura todo. La vida no es tan fácil, la muerte tampoco lo es. Debería ser un crimen que alguien mate todo lo que eres, lo que sueñas, que mate la ilusión y el valor que creías tener.

Estoy de acuerdo con las "parejas" que aceptan tener encuentros casuales que podrían comenzar con una salida al parque o a tomar un café y terminar teniendo sexo en un coche, en un hotel de cuarta o en un baño en algún puto bar de mala muerte, todo es posible. En lo que no estoy de acuerdo es en que alguien te diga que va a ir en serio y termine haciéndole un millón de pendejadas sin que logres darte cuenta. ¿Por qué no ser sinceros? Alguien una vez me dijo: No podemos decir la verdad porque si lo decimos no querrán estar con nosotros, estarías tú con alguien que te quiere para pasar el rato. Ese momento mi respuesta fue no, ahora, con 22 años y una vida de decepciones amorosas, la respuesta es lo contrario, prefiero la verdad, si alguien quiere tener sexo podría ser sincero, si me gusta podríamos tener unas horas de diversión a puerta cerrada. Quizá ahora no me importa nada, ni siquiera que media ciudad conozca mi nombre, soy Daysi Bonn.


_______________

⇣⇣⇣⇣⇣⇣⇣⇣⇣⇣⇣⇣⇣⇣⇣⇣

Nota de la autora:

Holaaaaaaaaa a todos. Perdón por no haber escrito en mucho tiempo, tenía muchas cosas que hacer y no tenía inspiración pero ahora que estoy en la universidad, mis amigos y amigas me han llenado de historias, trataré de ser constante en esta historia y abarcar lo más que pueda, las historias que me han transmitido, quizá se sientan identificados.

Nos leeremos pronto. No se olviden de votar y comentar.

Besos.

Att: G }ï{

⇡⇡⇡⇡⇡⇡⇡⇡

------------

¿Cómo lo haces?Where stories live. Discover now