Rebel Hybrid🐇 MarkBeom/Bmark

29.🐇

La compra de trajes ya había pasado, cada uno se había por su lado pues era en lo que habían quedado, cuando volvieron a juntarse, el híbrido quería que viera su traje pero estaba siendo ignorado por completo, Mark iba furioso y el idiota de JaeBeom ni lo notaba, desde que iban de camino al centro comercial, JaeBeom estaba con su teléfono mandando mensajes, el híbrido sabía perfectamente con quién hablaba, y le daba más coraje las sonrisas que mostraba en la pantalla. El quería que su cita fuera especial pero ahora solo quería tomar el teléfono de JaeBeom y aventarlo contra uno de los carros, debajo de la llovizna que hacía.

— ¿Por qué no entramos a esta cafetería?. — Preguntó Mark tratando de llamar su atención, JaeBeom alzó la mirada un poco para mirar al lugar del que hablaba.

— Claro, tengo hambre. — respondió y guardó el teléfono.

El híbrido sonrió, al fin había despegado sus ojos de aquel aparato. JaeBeom pidió un americano con una tarta de fresa y Mark un capuccino con pastel de Chocolate, cuando el pedido había sido ordenado, el teléfono de JaeBeom sonó y este no dudó en sacarlo. El híbrido volvió a molestarse, cruzó de brazos para hacerle llegar la indirecta de que estaba enojado. Su pedido llegó y esperó que guardara el teléfono pero no pasó.

— Estoy emocionado de que veas mi traje — soltó mientras consumía lo que había pedido.

— Si yo también — apenas murmuró sin dejar el teléfono.

— Me hubiera gustado que lo eligieras tú, pero como quiera me esforcé mucho, espero que te guste como me queda. — Siguió intentando a largar la conversación pero era inútil.

— Si — se limitó a decir seguido de una risa por algo de lo que seguro estaban hablando Youngjae y él.

— ¿Qué tal tu traje?. — dejó de un lado los alimentos para enfocarse en conseguir la atención del mayor. Su pregunta fue totalmente ignorada con la llamada entrante al teléfono de JaeBeom, no esperó más y respondiendo.

— ¡No intentes convencerme de eso! — rió. — Sé perfectamente como pasó y te aseguro que no fue así. — siguió carcajendose mientras se ponía de pie para salir del restaurante y dejar al híbrido que le miraba desconcertado. Eso más que enojarse, le había roto el corazón, prefirió hablar con el idiota de Youngjae que estar con él. El hambre se le había ido al ver a través de la ventana del local aquella sonrisa que desbordaba JaeBeom y el brillo de sus ojos.

Llamó al mesero para que retirara todo y con el poco dinero que llevaba pagó la cuenta, él no iba a estar como idiota ahí, si JaeBeom quería hablar con Youngjae pues que lo hiciera pero sin estar él de por medio. Tomó su traje y salió de ahí intentando tener cuidado de que JaeBeom no lo notara pero no fue nada complicado, el mayor estaba perdido en su mundo con Youngjae.

Mark comenzó a caminar sin rumbo, no conocía New York pero quería estar lo más lejos de JaeBeom y regresar a casa de su suegro, la cual no tenía ni idea como llegar y la lluvia se hacía más fuerte.

— ¡Mark! — escuchó el grito de JaeBeom a lo lejos, el volteó a verlo que veía a toda prisa con él. El híbrido se echó a correr, al igual que Mark, JaeBeom también se echó a correr para poder alcanzarlo. La adrenalina corría por el cuerpo del híbrido, sentía presión en su pecho y comenzó a llorar, quería regresar a él, pero había sido demasiado tarde, ya se había perdido y por su puesto no le iba a llamar, cosa que en cuestión de segundos su teléfono comenzó a sonar, obviamente era JaeBeom. Iba a tomar la llamada solo para decirle algo.

— Mark vuelve, lo lamento.

Déjame en paz y sigue hablando con la mierda andante de Youngjae, que por lo visto es lo que te importa. —

Terminó la llamada y volvió a hacer otra a Hye.

— ¿Joven Mark? ¿Qué sucede?.

Hye lamento llamarte tan tarde allá pero podrías mandarme el teléfono del padre de JaeBeom, por favor —

— Claro ¿Todo bien?

¡No! Solo mándalo por favor —

Se quedó quieto en una de las bancas de las calles que le cubrían de la lluvia, en espera del mensaje de Hye con el número que necesitaba. Pasó una espera de 5 minutos y el número de teléfono llegó, de inmediato comenzó a marcarle. Jaehyung le había tomado por sorpresa la llamada de un número pero aún así contestó, Mark comenzó a explicarle que quería ir a su casa pero no sabía en qué dirección se encontraba, el señor le preguntaba sobre JaeBeom y el evadía el tema, hasta que finalmente consiguió la dirección.

Buscaba un taxi por todos lados, desesperado por la lluvia y su teléfono que no dejaba de sonar. Su cuerpo ya estaba mojado, abrazaba el traje que por fortuna no le pasaba nada por el plástico protector. Era un niño perdido por las calles de New York, sus lágrimas bajaban cada vez más fuerte al ver que ningún taxi quería pararse.

— ¡Taxi! — gritaba con su mano alzada cada vez que uno pasaba. El Ruido, la lluvia, la gran cantidad de gente que habían comenzaba a darle un ataque de ansiedad. Sus cabellos mojados por toda la cara le hacían enfadarse.

Hasta que sintió un fuerte agarre por uno de sus brazos.

— ¡Te atrapé! — dijo en un hilo de aliento, se notaba que estaba cansado, al igual que él estaba mojado. Volteó a verlo y de inmediato el corazón se le fue a la garganta, JaeBeom lo abrazó con fuerza, el híbrido no correspondió a tal afecto. — No me vuelvas a hacer esto, por favor. — besaba su frente sintiendo un alivio en su pecho. Mark lo miraba con odio, molestia, ira, pero ya no podía volverse a alejar de él.

— Ya basta — se soltó de su agarre. — Quiero regresar a la casa de tu padre. — soltó limpiando el resto de sus lágrimas, mirando a otro lado para que no viera que estuvo llorando, JaeBeom tomó de su mentón con intenciones de besarlo pero este le negó. — ¡Me quiero ir! — exclamó.

— Lo lamento, Mark — dijo algo triste, se sentía mal de que Mark hubiera hecho eso, cometió un error en ponerse a hablar con Youngjae cuando claramente tenía la compañía de su híbrido del que no necesitaba a nadie más.

JaeBeom llamó a un taxi que pasó por ellos para llevarlos a casa de su padre, durante el trayecto ambos temblaban del frío, el mayor intentó cubrir a Mark con sus brazos pero este se negó a la primera, JaeBeom algo molesto lo volvió a intentar y esta vez Mark no se opuso, necesitaba algo de calor.

— Quiero que sepas que pase lo que pase, tú estarás antes que todos, lamento comportarme como idiota. — acariciaba su cabello húmedo, Mark lo miraba con cierto recelo pero apreciaba sus caricias. No respondió nada, solo se limitó a cerrar sus ojos esperando el llegar a su destino.

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HOLAAAAAAA ME EXTRAÑARON?! YO SÍ

Volví de mi curso para el examen de la uni, tengo una semana libre antes de entrar a la escuela, aprovecharé a hacer algunas actualizaciones, gracias por esperar ❤️