Nuestro Hogar.

1.4K 78 9
                                    

En aquella casa de Dorset el sol entraba sin permiso, estuviera la cortina corrida o no, por el gran ventanal. El primero en despertar, de manera casi fresca, fue el mago inglés que al instante, volteó su cuerpo para poder mirar con atención a la bruja a su lado, la calibró con la mirada, ojos, pestañas, pómulos, nariz, labios, mentón, todo perfecto. Notó un cabello rebelde en su cara, lo tomó con delicadeza y lo dejó en su sitio. "Merlín... no lo puedo creer, tenerla conmigo, junto a mi corazón, es más lindo de como lo imaginé, definitivamente no necesito nada más para ser felíz", pensó con emoción mientras la miraba, apoyado con su codo en la cama, luego de unos segundos un suspiro pesado escapó por los suaves labios de la Auror, farfulló unas palabras inaudibles, subió sus manos a su cabello y lo desordeno más aún, ya parecía estar despierta, solo que no quería abrir los ojos.  Pasó unos minutos así, el magizoólogo no quiso interrumpir, solo observaba sus reconocibles y adorables gestos, cuando la bruja comenzó a frotarse los ojos, él con un suave movimiento apoyó su cabeza en su almohada y cerró los ojos, haciéndose el dormido. Tina, que abrió primero un ojo, estructurando todo a su alrededor, confirmó que las sabanas protegían su desnudez, temía despertar después que el mago y estar descubierta, se apoyó contra ambos codos y fijó su mirada en el mago inglés, su semblante parecía rígido, pero su respiración era tranquila, lo observó un momento, aquellas pestañas, lamentablemente más largas que las suyas, sus infinitas pecas y aquellos labios tan diferentes, tan...tan de él, era definitivamente un mago bellísimo.

—Que alivio para mi corazón tenerte cerca, querido.  –musitó suavemente la Auror–  Me haces todo más fácil, me alegras... me alegras la vida, Newt. 

Newt no pudo evitar sonreír ante las palabras de su prometida, claro estaba que el había cerrado los ojos por algo, pero esperaba una Tina que lo atacará a besos en todo el rostro como siempre, o simplemente le acariciara el cabello como lo hacía aveces para despertarlo. 

—Digo lo mismo, calmas todos mis miedos e inseguridades,me das tranquilidad.  –Abrió los ojos, para la sorpresa de Tina que dio un respingo, lo observaba de cerca, la misión de contar aquellas pecas una por una, aún no llegaba a su fin. 

—Me asustaste Scamander.  –reprochó con una ceja alzada calibrandolo con la mirada– ¿Estabas despierto de antes? 

—Sí. –afirmó– El sol entraba de manera decidida y me ví obligado a despertar, ¿dormiste bien, cariño? 

—Ajá. –asintió una vez con la cabeza– Para ser sincera, quede exhausta...  –se mordió levemente el labio desviando la mirada hacia la puerta del baño. 

Newt guardó silencio, a decir verdad, ya no se sonrojaba tanto en presencia de Tina, pero en ocasiones, ella era muy directa y eso, de vez en cuando le desconcertaba, aunque de buena manera. Unos segundos silenciosos y fue suficiente.

—Hoy hay que ir donde mamá, le prometí que iríamos a almorzar ,además, quiere hablar algo respecto a la fiesta de Abigaíl.   –Hablaba mientras con su mirada y sus mejillas un poco encendidas, buscaba su ropa interior. 

—Bueno, no me niego, tu madre cocina espectacular.  –sentenció la Auror– Me cepillaré los dientes y luego me voy a servir un café, ¿quieres un té?  –preguntó mientras volteaba a mirarlo con una amplia sonrisa. 

—Me encantaría, mi amor.  –le regalo un sonrisa parecida a la suya y antes de que la bruja se levantará con la sabana envuelta en su cuerpo, le tomó de la muñeca y depósito un casto beso en sus labios– Oye, además de cepillarte los dientes, cepillate el cabello.  –bromeó.

Tina levantó ambas cejas e hizo un gesto de desagrado hacia su prometido, dejando escuchar un "tonto" de entre sus labios, Newt rió suave mientras la miraba meterse al baño, después de eso se sentó en la cama, se estiró y con un movimiento de varita acercó su ropa interior, un pantalón cómodo y un camisa informal blanca para ponerse.  Cuando Tina salió, ya vestida del baño,también con ropa cómoda, el mago inglés se encaminó hasta su encuentro y la besó.  

•Conociendo el amor• [NEWTINA] Where stories live. Discover now