•Conociendo el amor• [NEWTINA]

Se acabó.

Una vez en el Ministerio y que todos confirmarán que Tina estaba bien le dieron tiempo a la pareja para estar juntos, Theseus ofreció su Oficina como refugio.

—Cariño, desde que nos vimos no he podido parar de mirar tu cara, ¿que te pasó?  –inquirió Tina, preocupada.

Newt solo negó con la cabeza mientras se acercaba para abrazarla.

—Un encuentro con Grindelwald. 

—Merci Lewis, ¿con Grindelwald?  –aún más preocupada, se separó de su abrazo y lo tomó por las mejillas– ¿Que paso mientras no estaba?

—Como lo comentábamos antes, fue una trampa, él hizo que los Aurores fueran hasta el Valle de Godric para dejar libre paso al Ministerio y, no sé, si por coincidencia nosotros nos encontrabamos acá y...

—Espera, dime que cuando dices nosotros te refieres a tí y Kama, ¿Queenie está bien? 

—Preocupada pero bien, Theseus le mandó un patronus para que viniera a verte,si Aaron se encuentra mejor lo más probable es qué vengan los seis.  –comentaba de manera distraída mientras ordenaba el cabello de su prometida tras su oreja y la calibraba con la mirada. 

—¿Como?, ¿que le pasó a Aaron?  –Preguntó angustiada– ¿Abigaíl se encuentra bien?, ¿tus padres?

Newt sonreía encantado, aquella bruja era, quizá, aún más preocupada que él con las personas que estimaba y eso ¡Merlín!  la hacía tan especial.  El magizoólogo se acercó a ella y tomándola por el mentón le plantó un beso en los labios, que casi se podría decir, que le estaba comiendo la boca como hace mucho tiempo no lo hacía, ella por su parte correspondió maravillada pero cuando el aire comenzó a hacer falta ella se separó un poquito, para poder hablar.

—Respondeme... amooor... basta... de besos.  –reprendió la Auror mientras aguantaba una risita. 

—Ya, esta bien.  –le depósito un último beso y caminó con ella hasta el pequeño sofá de oficina– Ven, te lo contaré bien. 

Tina asintió de manera suave mientras tomaba asiento al lado de él, el magizoólogo comenzó su relato desde que se separaron y se despidieron en el Ministerio, ella escuchaba con atención.  

×[San Mungo]×
Queenie, Jacob, Credence y Natalie se encontraban en el pasillo del Hospital, esperando que Aaron y Abigaíl salieran del cuarto, puesto que, estaban decididos en ir a ver como estaba Tina y Newt.

—Que bueno que no fue nada grave.  –agregó Jacob a la conversación. 

—Pienso lo mismo, Grindelwald es poderoso.  –comentó Natalie– Por eso sería mejor no meterse con él. –dijo esto mientras miraba a Credence.

—Creo que tienes toda la razón, Nat, pero ya no somos nosotros los que nos estamos metiendo con él...  Él se está metiendo con nosotros y no es correcto.  –afirmó Queenie.

Jacob hizo ademán con las manos como si negara algo.

—Sea como sea, iremos al Ministerio, veremos cómo están los chicos y nos iremos a casa, es tarde. 

Credence levantó su mano, como pidiendo permiso para hablar y prosiguió.

—Yo me quedaré hasta que vuelvan con Grindelwald, necesito hacerle unas preguntas y me parece que la mejor manera de hacerlo sería con él tras las rejas. 

Jacob se tapó la cara mientras negaba, en eso Aaron y Abigaíl se acercaban a ellos, escuchando parte de la conversación.

—De verdad que, no entiendo, sé que somos diferentes, es obvio. –agregó el panadero– Aquí todos relucen de "un súper poder" –hizo comillas con los dedos– y yo no, pero vamos, ese tipo a hecho estragos en la vida de todos aquí presentes, ¿porque seguir buscándolo? , además, ¿que les hace creer que los Aurores lograrán su cometido?...  El tipo a escapado de peores...  –farfulló por lo bajo.