Parte XIX

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Durante el resto de los días de la vida de Nico jamás se olvidaría de ese día, para empezar Percy y Jason lo despertaron a las 5 de la mañana con un baño de espuma para afeitar, en un principio Nico creía que estaba siendo atacado por un monstruo, fue hasta que despertó lleno de espuma que se dio cuenta que era lo que pasaba. Después de que se bañara, Paul y Sally, junto con Jason y Percy que seguían llenos de espuma le cantaron “feliz cumpleaños” en el desayuno, la madre de Percy había preparado un desayuno increíble, como siempre. Al medio día comenzaron a llegar los invitados, la primera en llegar fue Hazel que iba acompañada de Frank, se lanzó a abrazar a su hermano mientras lo regañaba por no haberle mandado mensajes.

-¿Qué te crees? He pasado meses sin recibir nada tuyo, por cierto feliz cumpleaños- dijo mientras le pasaba su regalo- me he tenido que enterar por Jason de muchas cosas, es increíble que te hayas olvidado de mí.

-Claro que no Hazel, he estado ocupado… perdón por no escribir ni nada, gracias por el regalo- Nico le dio un beso en la mejilla a Hazel lo que pareció calmarla un poco.

Frank seguía en la entrada un poco cohibido, mientras veía a su novia regañar a su hermano. Cuando Nico soltó a Hazel se acercó a Frank, este no sabía qué hacer, siempre había tenido miedo de su cuñado.

-Gracias por venir Frank, pasa, Jason y Percy deben regresar en cualquier momento.

Frank hizo lo que le dijo Nico sin decir una sola palabra, pero se veía que esperaba a que alguien más lo rescatara de ahí.

-¿Cómo ha sido vivir con Jason y Percy?

-Son unos idiotas la mayor parte del tiempo- en ese momento entraron- pero son mis idiotas

Frank y Hazel saludaron a sus amigos que llegaban con comida y refrescos para la fiesta, Sally había insistido en preparar algunas cosas, pero Percy insistió en comprar otras más, así que la casa pronto comenzó a oler a comida. Entonces Hazel y Frank decidieron ayudar a la madre de Percy en la cocina mientras los demás ayudaban a acomodar la sala, resulta que como era de esperar Frank y Hazel quedaron encantados con Sally, ella era como la encarnación de lo que una madre debería ser.

Más tarde llegó Leo y para sorpresa de Jason, venía acompañado de Piper. Todos ya habían comenzado a comer, así que fingieron que los ravioles de la señora Jackson eran la cosa más interesante que habían visto en sus vidas, incluso Nico dejó de moverse para evitar que la pareja se distrajera. Jason se acercó a Piper con cuidado, no culpaba a su amigo, de hecho siempre había admirado al hijo de Júpiter.

Piper y él salieron para hablar y el resto incluido Leo, parecían aliviados de que la cosa entre sus amigos no hubiera resultado un desastre.

-¿Esto es una fiesta o un funeral? Tenía entendido que Nico sólo era el hijo del dios de los muertos… Es broma, ¿lo sabes?- Leo aun parecía tenerle miedo a Nico

-Pasa, hay comida, me alegra que hayas traído a Piper

-Sí, resultó fácil convencerla- Leo no se atrevía a mirar a Nico a la cara- pero todo lo hago por Jason, hablando de eso me pidió que te hiciera un cuchillo, pero la verdad preferí hacerte una espada, aunque no entiendo, tú tienes una y de hierro de Estigio… pero aquí esta- Leo le pasó lo que parecía una navaja suiza- el botón está en un costado, la idea la saqué de la espada de Percy… yo… espero que te guste.

-Gracias Leo, de hecho no es para mí, es para mí… novio- Leo abrió la boca de sorpresa y por primera vez desde que había llegado miró al hijo de Hades.

-¿Qué?- dijeron Leo, Frank y Hazel al mismo tiempo.

-¿No les había dicho?- Percy hablaba mientras masticaba su quinto plato de ravioles que Sally le servía- Nico está saliendo con un chico, es genial, creo que ya debe estas por llegar, se llama Michael.

El ascenso y caída de Nico di AngeloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora