- T w e n t y S e c o n t h

1.8K 160 17
                                    

(2)

La presentación terminó luego de tantos movimientos de cadera, de todas las expresiones sensuales, de los sugestivos movimientos de cuello. El sufrimiento del rapero había durado escasos cinco minutos donde sentía su pantalón apretar demasiado.

—¿Y Jungkook? ¿Dónde está Tae? ¡Hobi debías vigilarlos! —Namjoon trato de verse sereno, aparentar que nada pasaba si aquel par no estaba cerca, aun cuando la angustia le corría por dentro.

Una vez más el celular del pelinegro vibró con un nuevo mensaje de su novio.

De: Jiminie 🐣
â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚

¿Estás bien? Tenías pinta de estarte ahogando con tu saliva hyung 😏…

Me estoy cambiando justo ahora, pero ¿podrías ayudarme? Creo que el nudo de la corbata no me sale y las noonas están muuuuuuy ocupadas 💋ʀᴇᴄɪʙɪᴅᴏ 09:47 ᴘᴍ▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me estoy cambiando justo ahora, pero ¿podrías ayudarme? Creo que el nudo de la corbata no me sale y las noonas están muuuuuuy ocupadas 💋
ʀᴇᴄɪʙɪᴅᴏ 09:47 ᴘᴍ
â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚â–‚

—Iré a buscarlos… —Yoongi se levantó tan rápido como le fue posible, sin alertar a nadie de su necesidad.

Comenzó a buscar entre los vestidores, entre el mar de gente que se preparaba para salir a escena, entre la gente que corría con vestuarios o accesorios. Una mano le tomó por el hombro, jalando un poco de él.

Jungkook estaba siendo retocado en su maquillaje— Hyung, creo que dejaron algo para ti en la habitación — una vez la maquillista dejó libre al castaño, este tendió unas llaves al mayor que estaba algo desorientado.

Miro las llaves en su mano sin entender de qué puerta tendrían que ser hasta que vio el número marcado con plumón. Escucho que el maknae le decía algo como “diviértete” al alejarse.

— ¿Dónde está Taehyung? RM los busca a ambos…

— Ah, V está siendo atendido ahora. No es nada grave, pero de pronto llegó buscando agua. Estaba muy agitado, sudaba mucho y parecía tener fiebre así que lo llevaron a revisión. Todo indica que es cansancio acumulado —una de las chicas encargadas de ellos le comentó. Tratando de infundir tranquilidad al otro, sin realmente entender lo que había pasado ¿Acaso los eventos de fin de año aumentaban el lívido de los jóvenes?

Encontró el pequeño cuarto que les daban para sus cambios de ropa. Al abrir la puerta encontró a un bailarín con la camisa a medio hacer, las piernas cruzadas, los brazos recargados en la parte interior del reposa brazos donde estaba sentado, con una sonrisa de lado que dejaba todas sus intenciones más que claras ¿En serio quería hacerlo ahí?

Puso el pestillo, respirando profundamente un par de veces antes de encarar a su novio una vez más. Lo amaba demasiado. Cada que podía disfrutar de su cuerpo lo hacia con un gran amor de por medio, adorando cada parte que le dejaba tomar, pero ahora se sentía diferente. Quería tomarlo, hacerlo suyo, grabarle su nombre en toda la extensión de piel que pudiera, quería la hulla de sus dedos bien impresa en los muslos ajenos ¿Jimin podría aceparlo?

— Hyung… — le llamo con una voz algo más suave, algo más aguda de lo normal — ¿Me ayudaras? — gimoteo disfrutando el pequeño tirón en el cuerpo de su mayor. Le vio echar la cabeza hacia atrás buscando relajar su cuello de la tensión que había estado acumulando. Se deshizo de su ropa silenciosamente, dejándola acomodada sobre el sillón para que no fuera a estropearse.

Suga giro lento. El aire en sus pulmones le dejo de un momento a otro, su garganta se reseco y su erección punzo contra la ropa. Lo iban a hacer allí, rápido, silencioso. El menor tendría que aprender sobre consecuencias, que si jugaba con fuego no esperara caricias sino algo de dolor o ardor. Lo amaba, pero ¡con una mierda! Se lo iba a coger allí sin tanto romanticismo como estaba acostumbrado.

Se quitó el saco, dejándolo sobre el sillón antes de tomar el cuerpo delgado entre sus manos, ambas hundiendo los dedos en la carne suave de su cadera. Sus bocas se encontraron con necesidad, la lengua del mayor no dudo en invadir la cavidad ajena, degustando el sabor de aquella saliva tibia, de a sinhueso que se dejaba acariciar por él, robándole todo el aliento que pudiese mientras los llevaba caminando de espaldas hasta la pared más cercana. Si, el sillón podía ser más cómodo, pero su pequeño mochi no había sido tan considerado con él.

Dance Again «YoonMin» Donde viven las historias. Descúbrelo ahora