Mi nombre es Timberly Jaqueline Drake, desde muy joven y gracias a que naci en una de las familias más acaudaladas de Gotham, tuve la oportunidad de estudiar en los mejores colegios de la ciudad, era considerada una niña prodigio, debido a mis notas perfectas y afinidad en los deportes en los cuales me gustaba más practicar gimnasia, esgrima y las artes marciales (que empeze a practicar desde los 5, 7 y 8 respectivamente). Mi padre es un socio de las industrias Wayne y madre es una doctora en uno de los hospitales más reconocidos de la ciudad.
En mi cumpleaños número (9) les pedí a mis padres que me llevarán al circo y me tocó presenciar una tragedia en medio del acto principal de los Graysons voladores, los trapecios se rompieron y los padres del joven con el que anteriormente me tome una foto, murieron después de caer desde una gran altura, el joven después fue adoptado por el señor Wayne. Después de 3 meses de esa tragedia Batman el protector de la ciudad empieza a salir a patrullar con un ayudante de aproximadamente 15 años podría ser una casualidad pero no lo creo.
A los 17 años el joven Dick Wayne se fue a estudiar en Bludheaven, donde apareció un nuevo héroe llamado Nightwing y Batman se quedó sin Robín alrededor de 6 meses, el nuevo ayudante de Batman era mejor peleador y menos acrobático que el primero, después de algún tiempo bruce adopto formalmente a Jasón, un joven que vivía en los barrios bajos de Gotham. Tuve que hackear las cámaras de seguridad de la ciudad, para obtener evidencia que respaldara mis hipótesis, después de 1 año de que Bruce adoptara a Jasón se anunció públicamente la muerte del joven que en ese entonces tenía 16 años, Batman se quedó sin Robin por segunda ocasión pero ahora el vigilante de Gotham actuaba con una brutalidad que no era típica de él, y entonces entendí que Batman necesita un Robín. Cuando fui al centro comercial me escabullí de mi guardaespaldas desactive el rastreador que sé que pusieron en mi mochila y compre una de un largo y color similar a mi cabello y tres cambios de ropa de un niño de mi altura y complexión. Llame a mi guardaespaldas que ya estaban a punto de armar un operativo para encontrarme en el centro comercial. Al día siguiente tenia me salte la clase de gimnasia, corte mi cabello para que luciera como el de un niño, vende mi pecho, me puse la ropa que antes había comprado en el centro comercial y guarde todo lo que llevaba puesto en la mochila que llevaba, tome un taxi y me dirigí a la mansión Wayne.
-Necesito hablar con el señor Wayne –digo hablando por el micrófono y mirando la cámara que se encontraba en la entrada.
-el amo bruce no se encuentra en ese momento –dice un hombre de edad avanzada por el intercomunicador.
-tengo formas de probar que el señor Wayne esconde un secreto por el cual me pagarían muy bien en la prensa local –Digo mostrando mi mochila, el hombre duda por un momento pero el portón automático se abre, paso por el camino que se dirige a la mansión el cual es de aproximadamente medio kilometro y llego a la entrada donde me recibe el mayordomo.
-el amo bruce me pidió que le preguntara que es lo que sabe y dijo que dependiendo de la información que usted conozca le dé una compensación monetaria para que guarde silencio –dijo el mayordomo que parecía ser el único sirviente en esta mansión.
-sé que él es Batman –digo y el mayordomo no parece inmutarse.
-Creo que usted, tiene mucha imaginación –dice el mayordomo.
-tal vez, pero tengo pruebas, muéstrele estas a Bruce y no se preocupe si son destruidas tengo las originales en mi casa -muestro las pruebas impresas con las que cuento, algunos cds y el mayordomo cambia su cara de poker por una que me confirma que estoy en lo correcto.
-Hablare con el señor Wayne –dice el mayordomo y yo me siento en el sofa de la sala.
-esta bien –digo intentando sonar indiferente.
-El amo bruce me dijo que le diera la cantidad que pidiera –dice el mayordomo que sostiene el teléfono en sus manos.
-deseo negociar con el –digo y el mayordomo se lo comunica a la brevedad.
-dice que viene en camino – una sonrisa triunfal aparece en mi cara, tardó en llegar exactamente una hora en la que solo me limite a observar desde el sillón donde me encontraba sentada.
-necesitas un robín - digo y Bruce me mira fijamente.
-si viniste para pedir el puesto déjame te informo que no esta disponible –dijo con cierto tono de tristeza y yo nege.
-solo dije que necesitas un robin nunca dije que quería serlo –dije molesta.
-si quieres dinero, solo pon un precio –sentencio el señor Wayne y yo me enfurecí.
-no necesito tu tonto dinero -dije y me dirigí a la puerta con mi mochila en hombros.
-el mayordomo se ofreció a llevarme a la ciudad y le pedí que me bajara en uno de los centros comerciales cerca del gimnasio tome un taxi y me dirigí al gimnasio. Fui a los baños donde me cambie de ropa, me puse la peluca, después llame a mi chofer que pasara por mi.
Continuará
