Vecinos Ruidosos (1/2)

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Es la última noche que Mutsuki y sus subordinados, se quedan en el Chateu, luego de una corta visita en verano.

En honor a ello, Urie organizó en secreto, una pequeña fiesta, aunque no haya movido ni un solo dedo por la causa. Saiko caminó alrededor de la casa, tropezando con un Higemaru apresurado, que prepara bocadillos para la fiesta. Hsiao se encargó de la decoración sencilla, pero ideal para la ocasión. Por otro lado, los nuevos reclutas se encargaban de ir por las bebidas y el pastel decorado con letras de azúcar "Buen Retorno" y un ("Nunca me olvides, porque yo no lo haré") resuena a menudo en la cabeza de Urie.

Más tarde, durante la fiesta, las bebidas surten efecto en los bastos invitados de dicho acontecimiento.

Ayumu, quien se ríe y baila al compás de las melodías de Jazz, que suenan en cada rincón del lugar, insinúa con algo de descaro, el bamboleo de sus caderas, ante el espectro de Aura "el tranquilo" (imbécil absoluto); no pierde su rastro, por muy escurridiza que ella se vea. Saiko balbucea entre snacks endulzados y ponche de huevo y Hsiao mantiene una conversación de clasificación R18 con Touma Higemaru.

Por otro lado, Mutsuki no se considera un "aguafiestas", pero tiene los ojos entrecerrados a fuerza de voluntad y, aunque la música es muy animada, no puede evitar la fatiga envolviendo su cuerpo.

Urie la observa a la distancia hasta decidirse por acercarse a ella. Con cautela , toma asiento en el reconfortable sofá de la sala de estar.

—¿Estás bien?

Mutsuki lo mira aun adormilada, obtiene algo de la voz de Urie perdida en el eco de los tacones de Saiko y Ayumu golpetear contra el suelo de madera y la música vacilona.

—Puedo prepararte un café, si quieres.

—Uh, no te preocupes, Urie-kun, estoy bien. Sólo tengo un poco de sueño, eso es todo.

—Ya veo.

No se había dado cuenta de lo cerca que estaba de ella. Al momento de percatarse de esa cercanía, su brazo es tironeado hacia el lado opuesto.

 Ella es la chica nueva, una Quinx que parecía estar muy consciente de sus movimientos.

Urie se aleja con ella.

Y Mutsuki los sigue con sus ojos, solo un poco.

Mutsuki no entiende mucho la situación. Ella simplemente mira su vaso de plástico rojo, y nota fugazmente como la bebida, simplemente, ya no estaba ahí. Sí, ella había tomado esas bebidas de colores brillantes, con suficiente alcohol, como para ser racional en ese momento.

Y entonces, la música retumbó en sus oídos. Urie se encuentra muy cerca del admirable recluta de Hsiao. Mutsuki mira hacia otro lado, no quiere ver.

El camino hacia el cuarto de huéspedes es largo, y sus piernas no ayudan a la causa. Su habitación está ubicada justo debajo de la habitación de Urie y eso la irrita un poco. Ella no lo sabe con precisión, pero lo hace de todos modos.

Luego se quita los zapatos y el resto de su ropa casual. Se sienta en el borde de la cama, masajeando los músculos de su cuello castigado con los dedos.

Ella no evita echar un vistazo a su ropa en el suelo, no es ni remotamente similar, comparada a la que llevaba puesta esa chica.

"¿Por qué estoy pensando en eso?" Se reprocha a sí misma y se mete dentro de las sábanas blancas.

Mutsuki cierra los ojos, por supuesto que lo intenta. Ella pretende dormir, aunque no lo consiga.

Debido a que ella escucha pasos. Pasos provenientes del piso superior "de la habitación de Urie".

Y ruidos, sonidos metálicos, molestos, "¿Brincos sobre el colchón?"

Ella niega, y le gustaría mucho estar soñando o sorda.

Tal vez sólo estaba ebria. Sí, eso debería ser.

Aquellos ruidos, son similares a los que se obtienen de lo que vulgarmente llaman una buena revolcada, y quiere creer que eso no sucedería si se trata de Urie.

¿O sí?

Maldita resaca.

*


Hola mi amado lector♥

¿Por qué no un poco de celos por parte de Mutsuki?

Bitácora [Mutsurie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora