𝐁𝐞𝐥𝐥𝐞𝐳𝐚 𝐢𝐧𝐭𝐞𝐫𝐢𝐨𝐫𓂃. #1

P.JM♡

Jimin se quedo con ella, acariciaba su cabello aún mojado, al parecer se había dado una ducha. Era obvio que lo haría, se sentía sucia al recordar los toques del hombre asqueroso

—Perdóname —susurró Jimin en un hilo de voz.

Al parecer Baek estaba muy dormida como para darse cuenta que él estaba ahí. Pero aún así Jimin decidió no alejarse de ella en lo que restaba de la noche

Jimin se acomodó aún lado de ella y se quedó observandola. En estos momentos era que se preguntaba porque se estaba alejando de su amiga, la única que lo ayudó cuando nadie más lo hacia, la única que siempre estuvo para él en los peores momentos ¿Porque ahora se estaba alejando de ella?

—Me quedaré contigo siempre —Susurró quedándose dormido.

Muchas veces Baek soñó con estar así con él, pero ahora ella ni siquiera se daba cuenta que tenía junto a ella al chico de sus sueños. Talvez después se lamentaria por no estar despierta en estos momentos.

Para Jimin solo estaba durmiendo con su amiga, la chica que siempre lo ayudaba, para Baek era algo mucho mejor, ella estaba durmiendo con su amor imposible

                                       ~*~

Baek abrió sus ojos lentamente acostumbrandose a la luz que entraba por su ventana, se quedó unos minutos acostada abrazando ese peluche gigante que Jimin le había regalado. Hace mucho no lo sacaba de su armario pero anoche sintió la necesidad de hacerlo, se sentía mal y al tener ese peluche junto a ella le hacia pensar que al menos podía tener a Jimin junto a ella

—Buenos días Park—saludó Baek al peluche de color amarillo, era un oso gigante. Ella decía que se parecía mucho a Jimin ya que era rellenito y muy suave.

Acomodó al peluche en su cama y bajó un poco más animada, ahora se sentía mejor. Los recuerdos de la noche anterior la hacían sentir mal pero decidió no dejar que eso la afectará más, ella era una chica muy positiva y no iba a dejar que algo así bajará sus ánimos

—Veo que sirvió la visita de Jimin —habló su madre cuando Baek llegó al comedor.

—¿Qué visita mamá?— preguntó con un poco de confusión pero sin dejar de comer.

—¿Acaso no recuerdas? Se quedó toda la noche cuidándote

Baek por poco y se ahoga con su comida, anoche había llorado tanto que se quedó profundamente dormida y no se dio cuenta que Jimin había llegado

—¿Que? ¿Cómo? ¿Por que no me di cuenta?—Baek golpeó su frente. En este momento maldecia tener un sueño tan pesado.

—Ay hija— bufo su mamá—A ti te puede pasar un camión encima y tú ni enterada

—¿Pero por que vino?

—No se, dime tú, ¿qué fue lo que pasó para que Jimin viniera alterado a buscarte?— cuestionó sentándose en una silla frente a ella.

Baek se quedó en trance, ni siquiera ella sabía porque Jimin había hecho eso, ella pensó que talvez Yoongi le había contado.

—No pasó nada mamá —mintió. Lo que menos queria era preocupar a su madre —Iré a la Universidad, adiós —se despidió subiendo a su habitación para ir por sus cosas.

Baek no podía dejar de pensar en lo que había hecho Jimin, para ella era un gran gesto y lo valoraba mucho, no podía evitar sentirse feliz. Hasta olvidó por completo lo que había pasado la noche anterior, ahora tenía una sonrisa de oreja a oreja que nadie podía borrar

(...)

Llegando a la Universidad vio el auto de Jimin estacionado así que supuso ya que había llegado. Caminó más rápido para entrar e ir a hablar con él

—¿A dónde va señorita?— la voz de Jimin hizo que frenará sus rápidos pasos. Ella se giró y se encontró con Jimin y Yoongi recostados en el auto, ambos la veían de brazos cruzados mientras le sonreían.

—¿Qué hacen aquí?—preguntó acercándose a ellos.

—¿Recuerdas que tú siempre me esperabas aquí para que entraramos juntos?—cuestionó Jimin moviéndose de donde estaba sentado y se acercó a ella —Me duele que no recuerdes nuestras costumbres —Jimin se hizo el ofendido. Ella sólo rio.

—Yoongi —ella borró su sonrisa al ver a los ojos al mencionado. Y luego bajó su cabeza apenada.

—Tranquila, no pasa nada. Ese imbécil recibió su merecido —habló Yoongi. Ella levantó rápidamente su cabeza viéndolo con asombro —No, no lo maté si es lo que piensas

—Baek— Jimin la tomó de los hombros haciendo que lo viera —Creo que te debo una disculpa, yo fui quien te llevó y te dejé sola

—No importa— respondió ella abrazandolo. Sabía que no debía hacerlo pero sentía la necesidad de abrazarlo.

—Jimin —la voz de Sunha hizo que Baek se alejara del rubio—¿Por que no respondes mis llamadas?— cuestionó la chica haciendo un puchero. Jimin rio dejando a Baek para acercarse a Sunha.

—Estaba ocupado —Jimin se acercó a ella. Baek los veía con confusión no entendía nada—Por cierto chicos, les presento a mi novia

Baek sintió como su corazón se hacia pedazos en ese momento quería creer que todo era parte de la venganza de Jimin pero algo en la mirada del chico no la convencía, Baek más que nadie sabía lo mucho que Sunha le gustaba y aunque él quisiera vengarse sabía que aún sentía algo por ella.

—Felicidades —respondió Baek sonriendo falsamente pero debía aparentar que estaba feliz por su amigo.

—Baek, ¿nos vamos?— preguntó  Yoongi ignorando el anuncio de Jimin. Él sólo rio, ya sabía como era Yoongi.

—Si, vamos. Adiós —se despidió Baek de ambos. Sunha sólo la observaba de mala gana, a ella no le caía muy bien Baek.

—¿Por que ella te abrazaba?—preguntó Sunha cuando ya estaban sólos —Además, ¿por que ayer te fuiste sin decirme nada? —se cruzó de brazos viendo con enojo a Jimin. Apenas llevaban un día de novios y ella ya le estaba reclamando.

—A ver—Jimin lanzó su cabello hacia atrás tratando de contenerse —Baek es mi amiga desde hace años y ayer tuvo un problema así que tuve que estar con ella

—Bebé —Sunha se acercó a él acariciando su rostro —Perdón, es que me da celos

Aunque Jimin quisiera hacerse el fuerte ver a Sunha hablándole así y llamándolo bebé hacían que su corazón se acelerara

—No tienes porque sentir celos de ella, Baek y yo solo somos amigos —Jimin trató de sonar fuerte y que Sunha no supiera que estaba como idiota por verla actuar así.

—Está bien —sonrió dándole un beso en la mejilla—¿Vamos?

Jimin asintió y entró de la mano junto a Sunha. Todos a su alrededor los veían, Jimin sonreía orgulloso ¿Quién iba a pensar que él, el gordito que nadie quería ahora era novio de la chica más popular de toda la Universidad?

Eso significaba que el plan de Jimin estaba saliendo a la perfección, lo único que tenía que hacer era controlar esos estúpidos sentimientos hacia Sunha si no todo se iría a la basura