°¿sᴇñᴏʀ ᴅɪᴀʙʟᴏ?°(ᴊɪᴋᴏᴏᴋ)

07

Maratón 1/?

-Mamá, ¿Cómo sabes cuando alguien te gusta?- Jungkook se sentó frente a su madre quien no dejaba de leer una revista que habia comprado antes de volver a casa.

-¿A mi bebé ya comenzaron a gustarle las chicas?¿Alguien lo tiene loquito?- Su madre apretó sus mejillas con delicadeza y luego besó su frente emocionada.

-Algo así mamá, ahora me puedes responder por favor.- Jungkook hizo un pequeño puchero.

-Pues bueno, todos nos enamoramos de forma distinta pero normalmente sentimos cosas como maripositas en el estómago cuando vemos a esa personita.- Su madre comenzó a hacerle cosquillas en el estomago como juego por lo que Jungkook rió fuertemente.

-Ya veo. Muchas gracias mamá. -El menor se levantó de donde estaba y se fue a la sala a terminar de ver la película que estaba viendo. Titanic era una de sus películas favoritas en el mundo, la había visto mas de diez veces pero él seguía viendola cada vez que la pasaban por la televisión o que su madre le decía "Escoge la película".

Jungkook admiraba como los personajes principales luchaban contra todo para poder estar juntos siendo la muerte la que terminara con ello. Cada vez que llegaba aquella parte en la que Jack daba la vida por su amada Rose, Jimin comenzaba a llorar a pesar de saberse hasta el diálogo, el pequeño era algo sensible por lo que lloraba hasta por ver un perro abandonado en la calle, preguntándole a su madre si lo podía adoptar pero por las alergias que este sufría le era imposible.

Por un momento, luego de que la película finalizo, pensó en que tal vez eso podía pedir, no ser alérgico a los perros y así poder tener uno en casa, bañarlo y educarlo para que fuera el mejor canino antes visto pero Jungkook sabía que eso era imposible, una vez que pidiera algo Jimin, le daría 24 horas para disfrutarlo y luego se lo llevaría con el hasta el infierno. Estaba muy complicado todo.

Jungkook escuchó pasos en su habitación y supo quien era, rápidamente corrió escaleras arriba para después entrar a su habitación viendo a Jimin sentado en su cama admirando a uno de sus películas con forma de unicornio. Segundos después la mirada del mayor se dirigió hasta el y solo pudo sonreír sonrojandose por completo. En aquel momento pudo sentir un cosquilleo en su vientre y una vergüenza total al estar frente a él, las palabras de su madre se repetían una y otra vez en su mente entendiendo en aquel momento a que se refería su progenitora, la verdad era que si se estaba enamorando de Jimin pero aquello era algo totalmente prohibido y que no podía hacer por mas que quisiera, el diablo no podía tener relaciones y Jungkook no quería ni saber el grito que pegaría su madre si llegaba a enterarse de que le gustaba el mismísimo Diablo.

-¿Que necesitas? -Jungkook habló por fin cerrando su habitación para que no los molestaran.

-Nada. Solo venía a ver que tal estabas, te sentí llorar y quería burlarme de tu rostro. -Jimin rió al ver como Jungkook cubría sus mejillas las cuales antes habían sido empapadas por lágrimas. -Así te ves mas gracioso, solo con la nariz roja- El mayor solto una gran carcajada y se levantó de la cama dejando en esta aquél peluche tan femenino que poseía el menor.

-¡No sé burle! -Medio gritó Jungkook dando un paso hacía atras asustado al ver que se acercaba hacia él. Quedó pegado a la puerta y cerro sus ojos aguantando la respiración para después sentir como Jimin tocaba la zona afectada volviéndola normal en un instante solo con su toque. Jungkook miró al mayor mas relajado al tenerlo cerca, acostumbrándose rápidamente a su olor y presencia como lo había hecho con las visistas diarias.

-Mucho mejor. -Susurró Jimin alejando su mano,pero no alejando su cuerpo cosa que Jungkook agradecía ya que se sentía muy bien el tenerle cerca.

Jimin observó de reojo los gruesos labios del menor, antes los había visto pero no con la misma dedicación que ahora le ponía. El menor se sintió nervioso y sin saber porque relamio su labio inferior causando un montón de sensaciones en el interior del mayor.

-No hagas eso...-Le susurró el Diablo, casi suplicando y acercándose cada vez mas al menor.

Jungkook no podía creer lo que estaba sucediendo por lo que solo cerró sus ojos por inercia esperando que algo pasará, hasta que ocurrió. Los labios de mayor dieron un suave roce y a los segundos un fuerte trueno y gotas cayendo llamaron su atención separándose. Jungkook miró por su ventana abierta como las gotas caían fuertemente y se escuchaban los truenos como si fueran a matar a alguien, lo más raro de todo esto es que en el clima no habían previsto una tormenta y hace unos instantes el sol pegaba en lo alto.

Jimin miró hacia afuera y levanto su diestra haciendo algo con sus manos que hizo que la ventana se cerrara por completo con seguro para que no fuera abierta por el fuerte viento que comenzaba a correr. El mayor sonrió levemente y miró al menor quien aun estaba nervioso por aquél simple roce. Segundos después Jimin acarició la mejilla ajena y abandonó la habitación del contrario para dejarlo descansar.

Jungkook observó nuevamente hacia la ventana acercandose a esta que estaba a un lado de su cama. Se acomodó sobre esta con sus peluches a los lados y se acosto con una amplía sonrisa que nadie le quitaría en aquel día lluvioso.

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Holaa~ después de tanto tiempo volví y quería agradecerles por todo el apoyo que le están dando a esta historia, nunca pensé que alguien la fuera a leer y por eso muchísimas gracias. ❤

El maratón todavía no se de cuantos capítulos hacerlo pero creo que van a ser seis, en un rato subo los demás.

Gabi♡