Teen Titans: The Kingdom

Capítulo 11

La celebración había comenzado justo después de que ambos países se unieran gracias al matrimonio. La fiesta se estaba llevando a cabo en los grandes jardines del palacio.

El príncipe y la princesa miraban a los invitados bailar desde su mesa, no habían cruzado palabra alguna desde aquel beso. Además, la hora de retirarse a su alcoba para su "noche de boda" se estaba acercando y no tenían ni idea de como evitarlo.

-Felicidades, altezas- hizo una reverencia con una sonrisa en su rostro.

-Stephanie, gracias- dijeron ambos añ mismo tiempo, a lo que la chica rió.

- Además de eso, vengo a avisar qie su habitación está preparada-.

-Gracias... iremos luego- luego de que se retirara las primeras palabras salieron.

-¿Nos vamos, mi lady? Está oscureciendo- susurró a su oído.

-Creí que no querías hacerlo- se escudó.

-No quiero, pero será mejor irnos nosotros antes de que alguien decida por nosotros y se lo anuncie a todos nuestros invitados...-.

-Buen punto- ambos se pusieron en pie y todas las miradas se postraron sobre ellos. Tenían que decir algo antes de irse.

-Agradezco a todos ustedes por habernos acompañado en este día. ¡Celebren hasta el amanecer!- alzó una copa de vino y los demás invitados imitaron la acción soltando ligeros gritos de alegría. -Mi esposa y yo nos retiramos por el momento, me alegró haber pasado un agradable rato con ustedes. Hasta luego- ambos dieron una reverencia y salieron del salón, siendo acompañados por la dama de compañía de la princesa y el guardia real del príncipe.

-Muy conmovedor- se burló la joven princesa. Tenía que utilizar su sarcasmo para ocultar sus nervios; no estaba segura si su esposo cumpliría su promesa, no lo conocía, no sabía como era realmente. Temía haber corrido la misma suerte que su madre.

...

-Altezas- el guardia y la dama de compañía escoltaron hasta su habitación para luego dejarlos solos, como era la costumbre.

-Wally, ven un momento- se alejaron un poco de sus acompañantes para poder hablar. -Vigila que nadie entre...-.

-O su alteza no permitiré que interrumpan sus necesidades- se burló.

-No seas tonto. No lo haremos- soltó. Era su mejor amigo, necesitaba su ayuda para que su plan funcionara.

-¿Qué?, pero tienen que- dijo confundido.

-Lo sé, pero ni ella ni yo deseamos este matrimonio, no pudimos evitar casarnos pero podemos evitar lo demás- explicó y espero que su amigo comprendiera la situación.

-¿Qué pasará cuando te pidan un heredero?, eres el siguiente al trono, lo necesitas, necesitas un hijo-.

-Mientras mi padre siga con vida y con capacidad de reinar no me preocupa tener un hijo... cuando llegue mi turno de estar en el trono, ya veré qué hacer-.

-Bien... tal vez para entonces ya se amen- le sonrió buscando tranquilizarlo. Pero él no respondió.

-Pueden retirase- ordenó el príncipe. Le dio una mirada complice a su amigo para asegurarse de que seguiría el plan, éste se la respondió con un ligero asentimiento de cabeza.