Cross-Verso:Mundo Ninja

Capitulo 22 Preso Sin Sospecha. Parte 2

Cuando me llegó la noticia estaba en shock. Era prisionero y al mismo tiempo no era prisionero, pero no era prisionero estando encerrado en una jaula, pero al mismo tiempo no era considerado como prisionero por lo que no me debían tratar como prisionero. Bueno incluso el tipo que me dio la noticia estaba rojo de vergüenza de lo me estaba diciendo, porque ni el mismo se entendía. No obstante, aun después de eso no podía desperdiciar mi tiempo así que empecé a ejercitarme todo lo que podía en mi celda. Aunque con las manos esposadas se me dificulto un poco, y así ha pasado casi medio año desde que llegue aquí.

"Oye ninja, oye ninja, ¡ninja! ¡ninja! ¡ninja! ¡respóndeme ninja!"

"¡¿QUE QUIERES?!" este era mi cuidador de celda como me aburría mucho de solo entrenar, tendía a molestarlo un poco y por un poco digo todo el tiempo.

"Hey ninja dile al Hokage que si me pueden quitar estas esposas que así no puedo entrenar bien" ya se lo había pedido unas cuantas veces, pero siempre me ignoraba.

"Ya te dije niño que es contra reglas, ni siquiera me puedo mover de aquí" otra vez esa excusa.

"Solo inténtalo, llama a alguno de tus compañeros y dile que pregunto yo"

"Es imposible" mierda solo me queda jugar mi as bajo la manda.

"Te dejare de molestar por un mes entero, ¿Qué me dices?"

"Espérame aquí, enseguida vuelvo" no es como que me pueda ir idiota. Aun así, parece que funciono. Pasaron unas semanas y por fin pude tener mis manos libres. Dios cuanto extrañé poder moverlas a mi antojo. Esas idas al baño ya no serán tan complicadas a partir de ahora, bueno ahora solo queda seguir entrenando. Lo único bueno de ser un prisionero sin ser prisionero es que me mudaron a una celda más grande y me alimentan tres veces al día, aunque la comida es asquerosa, me basta con que me de energías.

"Oye ninja ¿Cuándo crees que me liberen? ¿he?" le pregunte a mi guardia mientras hacía flexiones.

"Ya te dije mil veces que mi nombre es Saku, deja decirme ninja. Y para serte sincero no tengo la menor idea, pero será un regalo del cielo cuando suceda" sé cómo se llama desde la primera vez que nos vimos y ya perdí la cuenta de las veces que le he preguntado lo mismo, pero esta era de las pocas cosas que podía hacer además de entrenar.

"Bueno ninja cuando dejes de decirme niño yo te dejare de decirte ninja. Verdad ninja" solo apretó su mano y no dijo nada más.

Después de que pude liberar mis manos paso otro año y medio más en esa celda ahora tengo once años y mi taijutsu había mejorado considerablemente, pero aun asi habia un limite de lo que podía hacer aquí. Por otro lado tanto tiempo en este lugar a dejado mi cabello casi hasta la cintura así que lo tengo que amarrar constantemente. También he crecido un poco, aunque no es mucha la diferencia, aun así me estoy cansando de este lugar. He mejorado, fuerza, resistencia y velocidad, pero he ignorado por completo esa habilidad que recién acababa de despertar, pero para ser honesto no es algo que pueda entrenar tan a la ligera.

"Oye ninja necesito un lugar donde entrenar mi ninjutsu. No puedes hablar con el Hokage para arreglar un lugar"

"Otra vez con esas peticiones egoístas, puedo intentarlo por dos meses de silencio ¿te parece?" esto se convirtió en un habito entre los dos. Le pido favores a cambio de no molestarlo por cierto tiempo.

"Hum...eso es mucho tiempo que te parece un mes"

"Me tomas el pelo. Dos meses tómalo o déjalo" no me queda opción si no lo consigo serán unos muy largos dos meses, pero si lo logro valdrá la pena el riesgo.

"Muy bien tú ganas, acepto el trato" el solo sonrió y se fue de inmediato. Dejándome sin guardia, después de todo ya llevábamos dos años aquí soportándonos el uno al otro, o más bien soportándome el a mí, pero que puedo decir, no es como que aquí haya televisión o horas recreativas en el patio, y de alguna forma en estas situaciones buscas cualquier cosa para distraerte. Ya perdí la cuenta de cuantas veces he contado los ladrillos del techo. 

Por otro lado, he conseguido muy poca información del exterior. Se con certeza que la nube ha perdido el deseo de luchar, por otro lado la arena también está al borde de la derrota incluso después de una alianza con la roca, la cual se ha mantenido firme por el momento. De la niebla no se absolutamente nada. Y hasta ahí alcanza mi conocimiento desgraciadamente.

Pasaron unos días hasta que llego mi guardia. Debo admitir que se tardó demasiado espero que rogándole al Hokage para convencerlo.

"¡Oye niño, lo conseguí! Tuve que rogarle al Hokage y pedir unos cuantos favores, pero lo logre" mierda en verdad le rogó ahora tengo una mejor impresión de ti ninja o mejor dicho Saku.

"¡Excelente Saku sabía que podía confiar en ti!" dije emocionado. Por fin podría salir de aquí.

"¡Oh dijiste mi nombre, este día se pone cada vez mejor!" es un poco patético que es te tan feliz por eso, pero no importa ¡saldré de aquí!

"Oye, pero no te apresures mañana será el gran día espera hasta entonces" era demasiado bueno para ser verdad, pero solo es un día. Pensando eso me fui a la cama.

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"Tú, tú me mataste"

"No mamá yo, yo no"

"¡Fue tu culpa!" 

"Tu culpa" 

"¡SAYO SENSEI ESTA MUERTA POR TU CULPA!"

"¡Chicos yo... lo intente Yugito, Samui Karai por favor créanme!" mis manos temblaban y me encontraba cubierto de sangre.

"Kyo mi hijo, a pesar de todo. ¡¿POR QUE ME ASESINASTE?!"

"¡¡NO!! ¡YO! ¡NOOOOO!"

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"¡¡HAAAAAAAAA!!" mi respiración era agitada y me encontraba cubierto de sudor.

"¡Un sueño! Solo fue un sueño, un sueño nada más" lleve mis manos a la cara intentando calmarme.

"Otra vez, paso...cada vez se repite más. Necesito calmarme" me senté sobre la cama y abracé mis rodillas pude notar la mirada de preocupación de la guardia del turno de noche. Esta situación se repetía cada vez más seguido.