¿Seguro Que Eres El Jefe?

4. Reunión Antigua.

Al siguiente día:
11:30am

La mañana se terminaba pero ellos estaban allí sentados. Esperando buena información, que el gran trabajador fiel de Héctor de la cruz llevaría a su mesa sobre los tipos que andaban buscando.

Lo vió entrar y caminar rápidamente hacia ellos con una sonrisa en labios. Indicaba que sus fichas habían hecho una buena movida.

— Buenos días. — Tomó asiento despreocupadamente. — Tranquilos tengo noticias que esperaban.

Abel de inmediato se acercó más a la mesa con los brazos cruzados. Todos estaban impacientes por ir a destrozarle la cara a quien había hecho el daño.

— ¿Qué? — Dijo Jimmy recostado del sofá.

— Anthony y Johan Morgan son hijos de Johnny Morgan, el hombre tiene una buena cantidad de dinero, está relacionado con robos, algunos asesinatos y ahora también ligado a asuntos ilegales como falsificación de documentos, lavado de dinero y venta de droga.

— ¿Dijiste Johnny Morgan? — Comentó Abel rascando su barbilla. — ¿Recuerdas lo que te conté del tipo que había insultado a Melany? Dijo que era hijo de ese hombre...

— ¿Crees que éste relacionado con la violación de Tifanny? — Comentó su padre.

— Destruyeron mi casa, mi auto. — Dijo Abel algo incómodo. — No hay ninguna relación con esto...

— Estoy de acuerdo con Abel. — Dijo Héctor. — Porque en realidad tiene 3 hijos él menor es Luis Morgan. La dirección que dió Tiffany es incorrecta. Antes vivían allí pero vendieron la casa a una señora adinerada.

— ¿Entonces que mierda... ? — Comentó Jimmy abriendo los brazos.

— Este hombre tiene experiencia escapándose de la justicia, también puede esconderse bien de nosotros. — Dijo Héctor y entrelazo los dedos.

— Lo necesitamos. Mueve cielo y tierra pero necesitamos tenerlo.— Dijo Abel.

— Ustedes tienen personas que trabajan para ustedes en este lugar que también nos servirían de ayuda. ¿Se les hace familiar el difunto Nick? — Comentó.

Nadie dijo nada.
Mencionarlo traían malos recuerdos. Muy malos.

— ¿Qué podemos hacer aparte de comunicarnos con nuestros sicarios para conseguirlo? — Preguntó Jimmy.

— Recuerden que Tiffany dijo que eran dos tipo de la universidad. Al menos alguna clase ha de compartir con ellos. — Comentó su padre. — Es más fácil si simplemente lo matamos.

— ¿En una universidad, papá? Creó que por allí podemos tener buena información. Y matarlos... — Dijo Abel. — Tan fácil como el simple hecho de enviar algunos sicarios allí a que los asesinen luego de haber salido de la universidad y si es necesario en la misma universidad.

— No los quiero muerto. Porque la venganza es mejor cuando tú la implementas. Quiero verlos personalmente. — Dijo Jimmy. — Y de pasó invitemos a Luis.

— Bien. Eso sería lo ideal. — Comentó Abel.

— Bien. Entonces tenemos que hablar con Tiffany de una mejor manera ¿entiendes? Que no se sentía presionada. Está mal psicologicamente. — Dijo su padre.

— Gracias por la información Héctor. — Dijo Jimmy levantándose del asiento.

Caminó rápidamente a la sala para encontrase de pie con Enmanuel. Parecía hablar por teléfono, organizar algunas cosas. Él se quedo detenido mirando su silueta.