El saiyajin y la dragona ☑

Capitulo 4

Ahora empezaba un nuevo día, concretamente en el monte Paoz, donde vive un sujeto extremadamente poderoso, inocente y amigable llamado Son Gokú, quien actualmente vive con dos dragonas.

-Mmm buenos días Goku -dijo la dragona mirando fijamente a Goku.

Esa noche había sido mala para el saiyajin, había dormido con Tohru y Kanna. Y esta última dormía de manera mala: movía bastante los pies, para desgracia del saiyajin. Y esos golpes iban directos a la espalda de Goku. A pesar de no ser fuertes, fueron bastantes, hacían cierto daño, incluso para Goku puesto que a la hora de dormir era algo sensible.

-Buenos días Tohru -dijo el saiyajin estirando los músculos- Vaya, me duele un poco la espalda -dijo Goku rascándose la nuca.

-Si quieres te puedo hacer un poco de masaje -dijo Tohru sonriendo.

-¿Que es un masaje? -dijo el saiyajin dejando con una gota de sudor a Tohru.

-Solo haré que te sientas mejor, para ello debes quitarte la camisa -dijo Tohru algo sonrojada.

Goku miró extraño pero obedeció, y dejó expuesto su torso trabajado.

-Increíble -susurró Tohru sonrojada.

-¿Pasa algo Tohru? -preguntó Goku sonriendo.

-N-nada, comencemos -dijo Tohru posicionándose detrás del saiyajin.

Tras esto puso su mano en la espalda de Goku y empezó a masajear suavemente.

-T-tohru esto se siente bien -dijo Goku sonriendo.

-Lo sé sólo disfruta -dijo Tohru sonriendo y sonrojada.

El masaje siguió avanzando de manera pasional hasta que acabó.

-Dime, ¿te gustó ? -susurró Tohru sensualmente en la oreja de Goku.

-Me gusto bastante, aunque en cierta manera me sigue doliendo, pero da igual, ahora voy a comer -dijo Goku levantándose de la cama pero Tohru lo retuvo.

-Mmm, hay una forma rápida de curarte esto -dijo Tohru sonriendo.

El saiyajin sintió más curiosidad y se sentó de nuevo en la cama.

-Dime, ¿cual es esa forma? -dijo Goku sonriendo.

-Debes cerrar los ojos -dijo Tohru sonriendo.

Goku obedeció y cerró los ojos. Tohru se acercó a él y le dio un profundo beso en los labios.

El saiyajin juraría que puso sus manos en la cintura, pero quién lo sabe.

Hasta que Tohru se separó por falta de aire.

-Dime, ¿estas mejor? -dijo Tohru sonrojada.

-S-si Tohru, muchas gracias por todo -dijo Goku vistiéndose de nuevo la camisa- Ahora me voy a comer, ¿vamos?

-Si claro, le llamo a Kanna para que estemos todos -dijo Tohru.

-Por cierto, ¿donde estaba? No la he visto -dijo Goku rascándose la nuca.

-Tranquilo, está afuera jugando con los animales -dijo Tohru.

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Tras el desayuno, llegaron a una conclusión. Había que comprarle una cama a Kanna. Puesto que Goku no soportaría otra noche de más.

-Pero, ¿cómo lo haremos? Yo no tengo dinero -dijo Goku.