El saiyajin y la dragona ☑

Capitulo 18

-Goku, ¿eres tú? -dijo Tohru con muchas lágrimas en los ojos, mientras estaba mirando al cielo, donde el pelinegro flotaba en el aire.

Entonces el saiyajin comenzó a descender lentamente ante la atónita mirada de Piccolo. Sus amigos tampoco decían nada, estaban igual de sorprendidos que Piccolo.

-Si soy yo Tohru, estoy aquí, y esta vez acabaré con esto de una vez por todas -dijo Goku con su imborrable sonrisa.

Entonces la dragona no esperó ni un segundo más y saltó a los brazos de Goku para después llenarlo de besos.

-Para Tohru, que nos están mirando todos -dijo Gokú con una gota de sudor.

-Me da igual, eres sólo mío -dijo Tohru abrazada a Goku.

En eso Piccolo cruzó sus brazos y esbozó una breve sonrisa que alertó a los amigos de Goku.

-Goku, ¿cómo has regresado? -dijo Krilin sorprendido.

-La verdad es que no me acuerdo, es como si no tuviera memoria de aquello, es muy raro -dijo Gokú rascándose la nuca- Pero ahora trataré de acabar con ésto de una vez por todas.

En eso Kanna se dirigió a Goku y en un movimiento rápido lo abrazó.

-Hola Kanna, regresa con Tohru, te prometo que cuando acabemos con esto regresaremos a casa -dijo Goku acariciando el pelo de Kanna.

-Vale Goku, te estaremos esperando -dijo Kanna con una sonrisa.

Entonces se dirigió corriendo a los brazos de Tohru, y Goku dio unos cuantos pasos para ponerse de nuevo al frente de Píccolo.

-Parece que ahora Goku está más seguro de sí mismo -dijo Tenshinhan observando la postura de Goku.

-Quizás haya aprendido algo allá donde estaba -dijo Bulma.

-No lo creo, pero sí es extraño que no se acuerde de nada -dijo Krilin.

Mientras tanto, Kamisama observaba aquella situación en silencio, sabía que Goku había estado en otro lugar, tal y cómo dijo Shenron.

-¿Vienes para acabar conmigo? No me hagas reír -dijo Piccolo mientras mantenía sus brazos cruzados.

-De hecho ya soy mucho más fuerte que tú -dijo Goku con una sonrisa confiada.

-¿Eeeh? -dijeron los amigos de Goku sorprendidos ante lo que dijo el saiyajin.

Entonces Piccolo comenzó a reírse como un loco mientras Goku mantenía una sonrisa confiada.

Daba la sensación de que el pelinegro guardaba un as bajo la manga, habría que descubrirlo.

-No me hagas reír insecto, ¿de veras crees eso?-dijo Piccolo sonriendo.

-No sólo lo creo, ¡¡LO VOY A DEMOSTRAR!!! -gritó Goku dirigiéndose a una gran velocidad adonde estaba Piccolo para después chocar puños con él.

Entonces se creó una onda de choque que produjo un gran impacto en el lugar.

-No está mal -dijo Piccolo sonriendo, para después aparecer en la espalda de Goku y tratar de conectar una patada, pero para la sorpresa de todos, Goku fue más rápido y logró no sólo esquivar la patada, sino también devolver el golpe en un espacio temporal muy reducido.