Hell Rider, El Jinete Del Infierno

Tercer Ataque

No Lo Hiciste Por Avaricia, Sino Por Una Buena Razón

Esas eran las palabras que resonaban en la mente del jinete mientras volaba en su dragon, ya habían llevado a su amigo a su casa pero ellos tenían que asegurarse de que los demonios que todavía rondaban por la ciudad no lastimaran a nadie y de paso llevarse algunas almas condenadas, esto último lo detestaba, iba en contra de todo lo que era, el renuncio a todo para salvar al amor de su vida y si su amigo estaba en lo correcto y si esa policía era la reencarnación de su esposa podría explicarle que todo lo que hizo fue para salvarla, lo que si ella tendría que enamorarse de él nuevamente y aceptarlo tal cual es, incluso con su maldición

Hell Rider (acariciando la cabeza de su dragon): ay amigo, esto es demaciado confuso, no se si seré capaz de hacerlo de nuevo

En eso Hell Rider sintió una presencia oscura

Hell Rider: amigo tenemos trabajo

Los dos seres de las sombras se dirigieron al centro de la ciudad, ahí aterrizaron en el techo de un edificio y camuflados por el cielo nocturno vijilaron las calles esperándo que apareciera esa alma condenada, ya la gente sabía de la existencia de ambos así que no necesitaban esconderse tanto, en eso Hell Rider vio un auto que avanzaba de una forma aparentemente normal, pero a una criatura del infierno ningún mortal lo puede engañar, sabía que había algo malo, monto a su dragon y ambos volaron hasta alcanzar al auto, Hell Rider tomó su espada, la lanzó hacia el auto y está quedo incrustada en el capo, el auto se detuvo de golpe y de él salieron un hombre y una mujer, ambos estaban asustados pero ella se veía mucho más aterrada y trató de salir corriendo pero el hombre la detuvo

Hombre: tu no vaz a ningún lado

Mujer (asustada): no sueltame

Ambos miraron lo que los había echo detenerse y vieron esa espada en llamas que derretia el capo y parte del auto

Mujer: esa espada....... estas muerto

Hombre: de que hablas ahora?, tu no eres nadie para amenazarme

Mujer: yo no, pero Hell Rider ya señaló a su próxima víctima y se que no soy yo

El hombre recordó las noticias y  al ver esa espada recordó que las víctimas de Hell Rider son criminales

En eso Hell Rider salta de su dragon y vuela hasta donde estaba la aparentemente pareja

Los dos estaban petrificados ante esa vicion de un hombre enmascarado que estaba volando y con la gracia y sigilo de un ninja aterriza en el capo del auto

Hell Rider (con voz fría y siniestra): dejala

La pareja estaba petrificada cuando el jinete bajó del capo y avanzó hacia ellos, el tipo abrazaba a la mujer pero no de una manera protectora, más bien de una forma poseciva, lo que señalaba que era más que obvio al menos para Hell Rider que ese hombre no era su novio, sino un secuestrador que la tenía cautiva quien sabe cuanto tiempo, esa era una de las habilidades de Hell Rider, poder conocer los crímenes de las personas con solo mirarlas

Hell Rider le hizo un gesto con la cabeza a la mujer para que se fuera

Mujer (aliviada): gracias

El hombre la tomo del brazo antes de que se fuera

Hombre: a donde crees que vaz?

Hell Rider alzó la mano y como por arte de magia la espada de fuego que estaba incrustada en el capo del auto voló hasta su mano y con la punta de esta amenazó al hombre que aterrado dejó ir a la mujer, Hell Rider se acerco a él y el tipo se orino los pantalones al ver su mirada