Estava en mi oficina revisando el los archivos que me había enviado el doctor Eret, el capitán me había pedido que hiciera guardia esta noche, había ido a buscar un café cuando derrepente sentí que debía salir afuera, seguí ese impulso y vi la sombra inconfundible de Hell Rider alerte a mis colegas y también a los que estaban patrullando
Astrid: a todas las unidades, aquí la teniente Hofferson, Hell Rider se dirige hacia el sur por la avenida Nocturna, al parecer esta en una persecución
Subí a una de las motos y fui tras el, lo seguí a una distancia prudente para que no me viera y en eso veo que lanza su espada de fuego al capo de un auto y una pareja sale aterrada, Hell Rider toma al hombre y me dio miedo cuando vi que de los ojos de ese hombre salía fuego, una cosa es verlo en un video pero verlo en vivo es algo aterrador y si a eso se le agrega el hecho que junto a el hubiera un dragon real no savia si asombrarme o asustarme, en eso escuchó que el Jinete dijo algo que me heló la sangre
Hell Rider: 2.000 años viviendo esa maldición y nunca me acostumbrare a esto, cuanto odio hacer esto amigo
Eso me dejo pensativa, el estaba maldito y odiaba hacer algo, en eso llegan varias patrullas y lo rodean
Capitan: Hell Rider, por la autoridad conferida por la ciudad de Berk quedas bajo el arresto
Hell Rider se dio la vuelta y me vio, aunque estaba a una buena distancia de él pude distinguir un brillo verde en sus ojos, todos mis colegas lo apuntaron con sus armas
Hell Rider: yo no soy el criminal, respecto a lo que hago no tengo elección
Capitan: te pregunto, si tanto odias acesinar personas por que lo haces?
Hell Rider: y dije que no tengo elección
Astrid: y tienes razónes para hacerlo?
Hell Rider: lo que hago estoy obligado a hacerlo, es por la maldición del jinete
Patán: no nos puedes maldecir demonio
Hell Rider: no tengo nada contra ustedes y no tengo razones para lastimarlos
Que extraño, el ha sido despiadado con los criminales que mato y ahora dice que no quiere lastimarnos, dicen que los demonios son muy traicioneros pero algo me dice que el esta siendo sinsero, pero eso no duro mucho ya que derrepente dijo algo que proboco que todos tuvieramos que jalar el gatillo
Hell Rider: amigo dispara
El dragon disparo una bola de fuego hacia nosotros pero al parecer fallo
Capitan: DISPAREN
En un parpadeo Hell Rider rápidamente monto a su dragon y ambos se dirigieron hacia nosotros, pero el Jinete y su dragon estaban bajo fuego cruzado, pero al parecer las balas no les hacian ningun daño, el dragon lanzó una bola de fuego al cielo abriendo un portal por el que ambos desaparecieron en la noche
Capitan: que demonios paso?
Astrid: escaparon capitan
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Al Día Siguiente
Hoy es mi dia libre pero no puedo estar tranquila sabiendo que en la ciudad hay un demonio que monta un dragon, pero algo me dejo pensando, que habra querido decir con su maldicion?, pense que quisa Hipo deveria saver algo al respecto, despues de todo Hell Rider es uno de sus ancestros, despues de darme una ducha y desayunar fui a la casa de Dagur por resuestas, cuando llegue vi que Dagur aun estava en pijama y se notava que aun tenia sueño
Dagur: buenos dias teniente Hofferson, que la trae por aquí tan temprano?
Astrid: Hipo esta despierto?
Dagur: si, el y Chimuelo madrugaron, a donde fueron? o que fueron a hacer?, no tengo idea
Astrid: bueno, gracias, volveré mas tarde
A donde habrán ido esos dos, lo que si no dejo de pensar en esa noche que me salvo y despues de un hermoso momento el beso que nos dimos, nunca havia sentido ganas de besar a alguien y mucho menos como las que tengo de volver a saborear los lavios de Hipo, ese beso fue de otro mundo, me dejo hechizada, si ahora me siento suya con un simple beso ya me imagino lo que podría hacer en la cama y despues de ese encuentro con Hell Rider anoche tenia mas ganas de besarlo, la señora Nilsa tiene razon y ella nunca se equivoca, ya no quedan hombres como Hipo, la vida es demaciado corta y con mi trabajo como policia me expongo a demaciado riesgo, no solo por los criminales, sino tambien ahora con Hell Rider, pero con respecto a lo que siento no puedo negarlo, ya no mas, me enamore de Hipo y lo necesito
Estaba pensando en como decirle a Hipo lo que sentia por el cuando escuche el ladrido de un perro, mire en esa direccion de donde vino y vi a Chimuelo echado afuera del museo, fui hacia el
Astrid: hola Chimuelo
Chimuelo ladro de una manera amistosa y se paro sobre sus patas traceras y me abrazo con las delanteras mientras movia la cola, yo solo me limite a acariciarlo
Astrid: Chimuelo Hipo esta adentro?
Chimuelo ladro y señalo la puerta con su nariz, eso comfirmo que Hipo estava en el museo, ya que no se podia ingresar con mascotas
Astrid: gracias amigo
Entre al museo y tenia una corazonada de donde podría estar Hipo, de repente escuche un grito que sonaba como un grito de terror, pensé que algo malo estaba pasando y corrí en la dirección de donde vino el grito, en eso apareció el encargado del museo corriendo asustado y gritando, tenia una exprecion de terror en el rostro y estaba completamente pálido, parecía que que había visto un fantasma
Encargado (corriendo hacia la puerta y saliendo a la calle): no puedo con esto, RENUNCIO
Recorrí el museo buscando lo que sea que pudo haber asustado tanto al encargado que lleba casi diez años trabajando aqui y nunca havia actuado de esa manera, tiene que ser algo realmente aterrador para asustarlo así y aun mas para hacerlo renunciar, el ama su trabajo, llegue a la sala donde estaba la pintura del jefe Estoico y su hijo, pero esta vez note que havian dos pinturas mas y una de ellas era la del jefe Hipo III y mirando con nostalgia esa pintura estaba Hipo X, no aguante mas y fui hacia el
