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11 de Abril

SeungMin peinó su cabello hacia un lado, resaltó su fleco y lo separó dejando ver gran parte de sus ojos. Se miró al espejo con una sonrisa.

Se había puesto un poco de brillo labial, sólo un poco porque su madre podría verlo y ella le reñiría. Abotonó su abrigo y amarró sus agujetas dejando un moñito sobre sus zapatos.

—Mamá, papá, ya me voy. —Bajó corriendo las escaleras, dando grandes zancadas y saltitos en el proceso.

—¿De verdad? ¿No te quedarás a cenar? —Su padre le preguntó antes de que pudiera cruzar la puerta. —De seguro volverás hasta la madrugada y entrarás directo a dormir.

Se debatió internamente en mentirle sobre a dónde iría, se sentía culpable pero al final no iba muy lejos así que no le importó.

—HyunJin me invitó a ver una película en su casa, ustedes saben que hace mucho que no teníamos nuestro tiempo de chicos. —Respondió intentando escapar antes de que lo obliguen a sentarse. —Nos vemos al rato.

Salió de ahí con un poco de timidez, debía recalcar que nunca se había sentido así. Con nervios sólo porque se encontraría con alguien, y no era cualquier alguien era su mejor amigo, aquél que se le había declarado.

Caminó con lentitud, HyunJin le había dicho que probablemente se encontraría a su madre, ella estaba enferma y necesitaba quedarse en casa así que no iba a trabajar. Su hermano mayor había salido con su novio y quizá no habría mucho ruido.

A diferencia de SeungMin, él era hijo único.

Tocó la puerta segundos después de haber hecho algunas respiraciones, era literalmente una cita. O eso creía él.

—SeungMinnie, te estaba esperando.

HyunJin abrió con los ojos un poco rojos, se veía cansado y tenía puesta una camisa color verde. Era el uniforme de la cafetería a la que siempre iba con sus amigos.

La casa por dentro era linda, justo como la recordaba. Le encantaba ese sentimiento de calidez que le invadía a penas ponía un pie dentro, ellos eran una familia tradicional. Así que se le hizo extraño encontrar a su HyunJin en ese estado.

—¿Trabajas? —Preguntó una vez en el sofá. La televisión estaba encendida y había un bol de palomitas cerca.

—Tengo la necesidad. Perdón por recibirte así, tuve que cubrir el turno de... Un amigo porque recién se recuperaba de una fiesta. —Le sonrió, sentándose a su lado.

Decidieron dejar la conversación para después, prestando atención a la película romántica que ambos aceptaron ver.

A la mitad de ella, SeungMin la pausó esperando a que HyunJin fuera al baño. No se sentía incómodo, pero eso no era lo que le preocupaba. Le tenía inquieto el que cada que HyunJin hacía un movimiento, él empezaba a sudar y a ponerse rojo, quizá estaba esperando de más.

Al carajo. Kim SeungMin. —Al escuchar su nombre levantó la vista, viendo a su mejor amigo peinar con una mano su cabello negro hacia atrás. —Te invité a mi casa porque estaba planeando pasar mis brazos por tus hombros, o siquiera darte un lugar en dónde llorar cuando la película se pusiera triste. Pero nada salió bien.

SeungMin le miró sonrojado.

—Estoy sudado, y casi durmiendome. Elegiste la película de romance y te exhaltas cada que quiero estirar un brazo o algo. Como si me tuvieras miedo, y eso me hace enojar mucho. Crees que puedes tentarme poniendo tus labios cerca de mí, sabiendo que me gustas. Y probablemente soy un tonto, creyendo que tendré alguna oportunidad contigo, perdón por ser así. Por tener sentimientos siquiera, por verte tan lindo y adorable cuándo sólo tratas de ser un amigo--

SeungMin le interrumpió, pensando seriamente en lo que iba a decir.

—Creí que... me besarías. —Soltó con nerviosismo. Jugando con las yemas de sus dedos, quería correr lejos de ahí. —No estaba asustado, estaba nervioso. Y en realidad... Creo que tú también me gustas un poquito...

HyunJin se quedó con la boca abierta, que si estuviera acostado pensaría que era un sueño. Se pellizcó pero SeungMin seguía ahí, viendo a sus pies y con las mejillas a punto de explotar.

Se acercó a él y volvió al mismo lugar en donde se encontraba antes, estando muy juntos.

—Quieres... Ya sabes... Darme una oportunidad... Digo, porque tú me gustas, yo te gusto... Sí, eso. —HyunJin suspiró. Debía tomar valentía y dejar de tartamudear. —SeungMin, salgamos.

—¿Salir? Como de una pareja, ¿cómo novios?. —Preguntó levantando la mirada, viéndole a los ojos. —¿Quieres que seamos novios?.

HyunJin asintió, posando una de sus manos sobre las de SeungMin.

—Está bien, quizá podemos intentarlo. —Le sonrió.

Sorpresivamente dejó que se acercara con lentidud, y plantó un rápido beso sobre sus labios.

No era la confesión perfecta, pero ahí estaban intentando hacerlo funcionar. Minutos después SeungMin estaba recostado en el hombro de su ahora novio.

¿Tendría que decirle bebé y cosas así? No era bueno siendo amoroso, mejor dicho, nunca había sido amoroso en su vida. ¿Y si su madre los descubriera? Ni si quiera tenía tiempo para pensar en ello, estaba feliz y era tonto, tan sólo arruinaría el momento.

Cuando dio la media noche, se despidió de él con un abrazo.

—¿Sabes? —Preguntó, a lo que HyunJin le miró con atención. —Hueles a café, es lindo.

Ambos rieron y SeungMin volvió a su casa. Ya estando en su habitación, en la cama gigantesca y con las ventanas abiertas se puso a pensar.

Justo cuando sus ojos estaban por cerrarce, una notificación en su teléfono hizo que sonara el tono de gatito que le había puesto. Leyó el remitente y casi le da un paro cardíaco, era HyunJin.

HyunJinnie😼:
Descansa, novio
✔️✔

Yo:
Tú también, novio
✔️✔

Sonrió y se sintió jodido, ya no había vuelta atrás. Estaba enamorado, de nada más y nada menos que Hwang HyunJin.

[💞]

Ya se habían tardado jaja

¡Stop it! [HyunMin]Where stories live. Discover now