Lo que te hace feliz tiene nombre

1.6K 70 19
                                    

Aitana pasa por cada una de sus paradas.
Yo me mantengo informado hasta que son las 18:00 y me toca verla para dejarle a las niñas.
Me acerco para pasarle a Gala que ,afortunadamente se ha despertado un ratito antes y tenía el simpático subido.

-Luis...
-No Aiti,luego hablamos.
-Pero...
-Te espero en el aeropuerto.

Sin más me voy.
Sabiendo que la acabo de dejar a cuadros no puedo hacer otra cosa que cruzar la calle,buscar un sitio estratégico y quedarme mirandolas.

Veo que mientras tiene a Gala cogida habla con Julia,seguramente de temas demasiado infantiles para Aitana y demasiado importantes para la pequeña.

Meto mi mano en el bolsillo y encuentro un papel.
Enseguida me acuerdo que al salir de casa Julia me lo ha dado.
Una carta para su madre que no me puedo resistir a abrir aún sabiendo que está mal.

"Mamá,
Soy Julia.
Estos días papá y yo hemos estado preparando esto.
Esta carta te la voy a dar cuando se acabe nuestro ratito pero solo quería que supieras que eres la mejor madre que podemos tener.
Gracias por quererme tanto a pesar de todo,por apoyarme y por darme al mejor padre y a la mejor hermana.
Y sobretodo gracias por ser tú la que me duerme,me obliga a comer fruta y me abraza para que se vayan todos los monstruos.

Te quiero mamá.
Julia".

No puedo evitar alguna lágrima y armado de valor vuelvo a cruzar la calle para entregar esa carta a su dueña.
Malditas coincidencias y benditas tiendas de flores en mitad de las calles.
Que sí,que la carta era maravillosa pero una carta de su persona favorita y su flor favorita quizá agrandaba más la sonrisa.
No lo pienso dos veces y cuando ya lo tengo todo entro en la heladería.

-¡Papá!¿No venias dentro de un rato?
-Hola peque.Sí pero resulta que una niña ilvidadiza se ha dejado esto en mi chaqueta.
-¿Has estado llorando?-Aitana me mira muy extrañada-.
-Tú espera al final de esta cita y a que la señora olvidadiza te de algo y luego hablamos.
-¿Te quieres quedar papá?
-No,merendad tranquilas.Nos vemos luego guapas.

Beso todos los flequillos existentes en aquella mesa incluido el de Gala que casualmente y sin mano de obra de su madre ya tenía pelitos y algun que otro caía en su frente.

La tarde transcurre normal y cuando llega mi hora las niñas se quedan con Ana que para ser sincero no se cuál de las tres estaba más emocionada.

Llego al aeropuerto y me coloco en la terminal que aparecí hace ya algún tiempo al llegar de Galicia.

Aitana tarda unos diez minutos en llegar y en cuanto me ve viene directa hacia mi.

-Hola.
-¿Ahora si podemos hablar?
-Ya puedes decir lo que quieras.
-Luis,no hacía falta todo esto.
-Bueno...
-No,no.No me malinterpretes.Me ha encantado y me lo he pasado genial pero no sé...no hacía falta.
-Aiti...me gustaría que todo fuera como antes.
-Y a mí.
-¿Caminamos?

Agarra mi mano y caminamos en alguna dirección que debe suponerse que sea la del coche.

-¿Quieres venir a casa esta noche?
-Las niñas están con Ana en la mía,no va a ser necesario que vaya a darles las buenas noches pero si quieres te las puedes llevar,tu decides.
-No lo digo por las niñas.
-¿Cómo?
-Es que si queremos que sea como antes hay que empezar por ahí,antes viviamos juntos.
-Espera,espera.
-Ya vamos a empezar.
-¿Me estas pidiendo que vuelva?
-Te lo ruego si hace falta.

Sonreimos pero la veo llevarse una mano a la cabeza rápidamente.

-¿Estás bien?
-Sí,supongo que ha sido un día largo y el tratamiento no es muy compatible con tanto ajetreo.
-Vamos anda.
-Al final te vas a tener que quedar a cuidarme.
-Doctor Cepeda a su servicio señorita Ocaña.
-Idiota.
-Te quiero.

De inmediato se me viene a la cabeza una conversación hace ya tiempo que me hace sonreir de modio lado.

-Idiota.
-Te quiero.
-Sigues siendo idiota.
-Y yo te sigo queriendo.

Y como si de conexión se tratara ella contesta algo parecido.

-Sigues siendo idiota Pedrito.
-Y yo te sigo queriendo Aitanita.

Y ahí,en esas situaciones absurdas te das cuenta de que todo lo que te hace realmente feliz siempre tiene nombre.

El Silencio Dijo SíWhere stories live. Discover now