CAPITULO .35.
DÉJAME EN PAZ
Tras despedirnos cada una se fue a su casa, vivíamos casi al lado, pero de las tres yo era la que tenía que cruzar el paso de peatón para llegar a mi casa portal, cuando estaba abriendo la puerta apareció Miguel, me dio un susto de muerte y más cuando me agarró por el brazo y me obligó a ir con él...
· Déjame Miguel, ¿te volviste loco?
· ¿Estás con otro?
· ¿Que dices?
· Escuché como les decías a las chicas que habías conocido a un médico.
· Estás loco.
· No lo estoy, ¿Por eso te fuiste?, ¿Me has engañado con otro?
· No estoy con nadie, pero si así fuese, tampoco te debo explicaciones, tú y yo no estamos juntos.
· Eras mi novia y te largaste así de sopetón.
· No me largué de sopetón y hubiese seguido siendo tu novia si tú me hubieses apoyado, pero en vez de eso, solo discutíamos y ya se convirtió en una relación toxica e insoportable.
· ¿Te crees una estrella?, no creo que llegues muy lejos, no eres tan buena como te crees.
· Tal vez llegue lejos o tal vez en un futuro me vea dando clases de canto en alguna academia pequeña, pero sea como sea, seré feliz porque estaré haciendo lo que me gusta.
· Esto es un espejismo, conmigo tenías un futuro.
· Un futuro que tú mismo tiraste por la borda.
· Te fuiste.
· Da igual, podíamos haber seguido juntos.
· Claro, tú en Madrid y yo en Sevilla, ¿no?
· No hubiésemos sido la primera pareja en mantenerse unos años separados por los estudios.
· Lo que tu estudias no se le pueden llamar estudios.
· ¿Por qué?, que yo sepa voy a clases, tengo exámenes y seguro que más duros que los tuyos.
· No te lo crees ni tú, lo mío es una verdadera carrera universitaria.
· No voy a seguir discutiendo, déjame en paz, ya te dije antes que no teníamos nada de qué hablar.
· Te vas arrepentir.
· De lo único que me arrepiento es de haber vivido a tu sombra en algún momento de mi vida.
· Si mírate, vas buscando guerra con esos pantalones y esas botas.
· Estamos en el siglo veintiuno, no en el quince, las mujeres se visten como quieren, no olvides eso porque creo que tanto estudiar historia está haciendo que te quedes en las épocas antiguas.
· Ni siquiera hablabas así antes.
· Déjame en paz, te lo advierto.
· Yo quería hablar contigo, quería pedirte disculpas, quería que volviésemos, pero...
· Pero nada, tú podrías querer muchas cosas, la diferencia es que yo ya no quiero nada de eso, no quiero tus disculpas, no quiero hablar contigo ni mucho menos quiero volver.

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PASIÓN
RomanceEn primer lugar, con esta historia solo quiero entretener a los lectores, los personajes son totalmente propios y el relato también, pero las canciones cada una tiene su creador y como tal solo quiero usarlas sin animo de lucro en este relato. ARGU...