Izuku Midoriya junto a su compañero Denki Kaminari, tenian como misión recoger a las hermanas Shield hasta que ocurren ciertos incidentes.
Provocando que tengan que hacerse pasar por estas.
Basada en la pelicula con el mismo nombre.
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No sabían cuantos segundos se había quedado viéndolas. - Bueno, no finjan como si no nos conocieran. - Izuku y Denki se miraron. - Mina, Ochako, Tsuyu.
Las rubias se rieron fingiendo recordarlas. - Hace siglos que no las veíamos.
- Solo ha pasado un año. - dijo Tsuyu.
- ¿Hiciste algo con tu cabello? - habló Izuku para romper la tensión. Tsuyu respondió que no.
- ¿Engordaste? - Melissa miró a su hermana con un ceño fruncido. La peliverde contesto no algo ofendida. - ¡Ya se! Fue tu cumpleaños.
- Si, de hecho si.
- Jajaja ya lo decía yo, ya lo decía yo.
- Esperen, hay algo que no me cuadra en ustedes dos. - dijo Mina. Los oficiales encubiertos se miraron asustadas.
- ¡Ah! Sus lentes. - los chicos recién se habían dado de cuenta que se olvidaron de los lentes. - están usando de contacto.
- Eres una bruja ¿como lo supiste?
- Era obvio chicas.
- Y veo que ustedes crecieron.- hablo Ochako.
- Nos rehicieron las rodillas. - al escuchar eso las chicas se sorprendieron, preguntando si eso era posible. Para que Tsuyu se lo hiciera.
- Bueno ha sido genial saludarlas, adios. - Izuku se llevó del hombro a Kaminari.
- Disculpen ¿A donde creen que van? - las detuvo Asui. - La revista Yuei abrió sus inscripciones, así que vamos. - dicho esto se llevó a las chicas a la parte de atrás del jardin. Donde habían miles de personas vestidos con ropa elegante, incluido millonarios y otras personas famosas. El lugar estaba decorado con mesas llena de comidas y meseros llevando bandejas de bebidas y con flores por casi todo el lugar.
- Oye mira eso.- Terminó su bebida de un trago. Señalo a donde estaban las chicas - ¿No son las hermanas Shield? - dijo Kyoka. Teniendo que subir a su amigo a una mesa para que pudiera ver, ya que era algo enano.
- No me habían parecido tan altas. - dijo Mineta para por fin verlas entre la multitud.
- Para ti todos son altos. - bebió un sorbo de otra copa.
- ¡Pero me siguen gustando! - Minoru seguía siendo un calenturiento de mierda.
- Oh, por dios. Es Kyoka. - Mina comenzó a juguetear con su cabello y a acomodar sus cuernos. - Hola, hola. - le saludo con la mano pero la de pelo violeta solo aparto la mirada.
- ¿Estás saliendo también con Mina pink? - le preguntó el niño uva. - Pero, ¿como sigues convenciendola?
- Le sigo diciendo que terminare con mi chica.
- Espero que Momo no lo descubra. - bebió de su copa.
- No lo hará, a menos que termine con un negocio con su padre.
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