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-¿Levi?

-¡Hanji!

La castaña beta sostuvo a Levi de los brazos inmovilizándolo.

-Eren, corre al baño y enciérrate. Y sobre todo lo hagas caso a lo que dirá Levi.

-Pero...

-¡Corre!

Eren corrió al baño e hizo lo que la beta le ordeno. Levi se liberó de la castaña fácilmente y corrió donde su hijo. Levi seguía en celo, y los supresores no le habían hecho efecto nunca.

-¡Eren!- gritaba mientras daba golpes contra la puerta.

El castaño seguía asustado. Lo que había hecho hace unos minutos era algo nuevo para él. Tenía miedo. Miedo de su padre a hacer cualquier estupidez.

La castaña clavó un tranquilizante en el cuello del azabache, este fue nublando poco a poco su vista hasta que ya no vio nada.

Eren al no escuchar nada abrió la puerta. Hanji le dio una pastilla para suprimir su celo.

-Eren... A partir de hoy vas a vivir conmigo.

- ¿Qué?- dijo asustado- yo quiero a Levi, lo amo ¡Me dijo que se iba a casar conmigo!

-¡Eren! Tu papi ha hecho algo malo. Mi deber como educadora es protegerle. Es esto o dejarlo que lo arresten. Tu eliges.

Eren no muy convencido cogió la mano de la castaña y salió de la casa junto a ella.

Ya no estaría con Levi.

(216 palabras)

¡Hijo! (Terminada) Where stories live. Discover now