Rude - Aristemo

09

Aris conduce a casa de Temo con una sonrisa, mira el asiento a su lado y sonríe al ver la Caja forrada con papel celeste.

En cuanto lo vió, supo que sería ideal para ellos. Los uniría más y los prepararía para un futuro… futuro.

¿Qué si Aristóteles quería un futuro con Cuauhtémoc?

Sip, cada día las ganas aumentaban más.

Llega al domicilio con el número 1123 y fachada color blanco, estaciona el auto que su padre le prestó (su papá tan lindo) y toma la caja entre sus brazos con cuidado. La acomoda encima del auto para poder cerrar bien las puertas y después camina hasta la banqueta, cruza la valla blanca y aspira el olor a tierra mojada, esa mañana había llovido y el césped en el jardín desprendía un olor delicioso. El aire estaba fresco y todo pintaba para un día excelente, más porque pasaría la tarde con su chiquito viendo películas, comiendo porquerías y jugando con su nuevo bebé.

Sube las pequeñas escaleras del porche y acomoda la caja en la mesa que Susana utiliza para la merienda.

Se aclara la garganta y toca el timbre, frunce el ceño al oir una tonada. Es nueva, normalmente el sonido es el típico de timbres.

Su suegro y sus ridiculeces.

Escuchas que le quitan el seguro a la puerta y después el rostro sonriente de Pancho le recibe, rostro que cambia al ver quien es el visitante.

-Buenas tar…  -las palabras se quedan en su boca cuando siente el aire que la puerta hace al ser azotada.

Frunce el ceño y mira hacia el suelo hace una mueca que incluye una sonrisa cuando escucha la voz de Pancho “¡Temo, hay un vagabundo en la puerta!”.

Segundos después su lindo novio abre la puerta.

-¡Tahi! -Ari sonríe y abre sus brazos para que su novio se refugie en ellos.

-Hola, bonito -el mayor envuelve la cintura de Temo en sus brazos y esconde si cara en su cuello- ¿Cómo te fue en la prepa?

-Bien, amor -el menor le da un pequeño beso en los labios y escuchan un carraspeo, ambos ruedan los ojos al saber de quien se trata.

Se dan vuelta y ven a Pancho “leyendo” una revista de farándula, Ari ríe un poco.

-Te traje un regalo, mi amor -ambos aún están abrazados.

-Ay Ari, eres el mejor novio del mundo.

Ari echa su cabeza hacia atrás y ríe.

-Ya lo sé -desenvuelve sus brazos del cuerpo de su chico y apunta la caja. Temo le mira con una sonrisa y sus ojos brillantes.

Le da otro beso y procede a abrir la caja, suelta un chillido cuando ve su interior. Un pequeño perro de pelaje negro y ojos oscuros le observa moviendo su colita.

-¡Tahi, es hermoso!

Temo saca al animalito de la Caja y lo abraza contra su pecho, el perro lame su mentón y Temo ríe más. Ari sonríe al ver a su chico feliz, el orgullo naciendo al ver que él lo causó.

-Es nuestro bebé -dice Aris acariciando la cabeza del perro.

-¿Y ya tiene nombre? -Temo esta tocando sus patitas y lo tiene acostado en sus brazos.

-No, eso te lo dejo a ti.

Temo ríe y tuerce el gesto pensando en un buen nombre, unos minutos después habla.

-¡Toribio Córcega López!

Ari frunce el ceño pero carcajea.

-Le queda perfecto, sabía que tenía cara de Toribio.

-Muchas gracias, Tahi. Es perfecto -Temo se acerca a él y se dan un beso, Toribio queda entre ellos.

Sus labios se mueven en sincronia, la lengua de Ari entra en la boca de Temo y se mueven juntas. El perrito lame el mentón de Temo y se separan riendo.

-Que una cosa quede clara, Toribio -dice Aris elevando al perrito y mirandolo- Temo es más mío que tuyo, ¿Me entiendes?

-Si, papá -Ari hace una voz chillona y Temo se ríe.

-Que ni crean que esa bola de pelos pulgosa se va a quedar aquí -Ari rueda sus ojos al oir la voz de su suegro.

-Si me permite decirlo, señor. Yo llame a su esposa y le avise del regalo para Temo, le pedí permiso y ella me dijo que mientras Temo limpiará; todo estaría bien.

-Y bueno, ¿yo estoy pintado? Sepan de una vez que en esta casa mando yo.

-¡Ahí viene Susana! -grita Aris.

-¡¿Dónde, dónde?! -Pancho mira a todos lados y luego gruñe cuando se da cuenta de la salvajada que hizo su yerno.

-Ay, Papancho -Temo hace la mueca del berrinche que nunca falla y Pancho le mira con una ceja arqueada, luego mira a Ari, el hombre tiene al peludo en sus brazos -Por favor, por favor, por favor -Temo Junta sus manos en símbolo de suplica y sabe que falta poco para que Pancho flaquee- Anda, di que sí, por favor, por favor -Temo hace un puchero y Pancho bufa.

-Esta bien -dice al fin, Temo suelta un gritito de felicidad y lo abraza.

-Eres mi papá favorito.

-Pues si solo tienes uno, Cuauhtémoc.

-Por eso -dice el menor después de reír.

-¡Pero nada más que vea pipí o popo por la casa y el animal se va!

-Entendido.

Pancho les mira con los ojos pequeñitos y después se mete a la casa.

Esa noche, mientras Temo y Ari salían al cine, Pancho salió al supermercado a comprar unos platos para comida de perros, comida para perros y limpio los desechos de Toribio dejó en la sala.

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Hola a todes

¡Ya hay más de 4k en esta fic!

dios, estoy ta feliz de que les guste esta historia.

Gracias por todo <3

Igual y paso a dejar algo de spam xd, vayan a mi perfil y chequen mi nuevo fic "Only Angel • Emiliaco" les va a gustar hee hee

de nuevo gracias infinitas por todo 💕✌🏻

Les amo

Xx