Sus manos sostuviero mi rostro. Me estremecí por su tacto, ya que, además de ser naturalmente frías, no había podido tacarla desde que la vi.
Antes de este encuentro, sólo había escuchado su voz en vídeos de instagram, eran un poco antiguos, pues desde mí partida no había compartido ni una sola historia. Nada nuevo.Dudaba que fuera por mi ausencia, no era tan egocéntrico como para pensar que alguien como Morgan se deprimiria por que su novio no estaba.
Dijo que me necesitaba, pero sabía que había algo más detrás. Estaba sufriendo demasiado y a cómo era Morgan, era difícil que me lo dijera. Tal vez hace dos semanas hubiera sido honesta conmigo, pero hace dos semanas confiaba en mí. Ahora era más que evidente que no.
—Mírame—sollozo, y eso me rompió el corazón.
Con delicadeza me obligó a mirarla, hasta encontrarme con aquellos ojos celeste que comúnmente era penetrantea y sensuales; sin embargo, justo ahora habían perdído toda la audacia que los caracterizaba. Estaban enrojecidos y tristes. La pesadumbre en ellos era evidente.
Comprendía que cualquier cosa que dijera podría destruirla, pero que debía hacer, ¿mentirle? Decirle, ¿qué? Que dejaría de ver a mi mejor amiga de toda lo vida y olvidar todo lo que pasamos juntos, todo lo que ella sufrió por mi culpa.
—Dime...dímelo. Mírame y dime que me amas.— susurró inquieta. Sus palabras me desgarron el alma. No sabía tan siquiera si era sincera, al decir que me amaba o era por el sufrimiento que había estado atravesando estos días. Si tan sólo me dejara saber. Además, ¿qué sería de Emily? Había dejado tantas cosas por mí, la había herido demasiado. ¿Qué quería Morgan de mí? ¿Qué dejara de verla? No podía hacer eso, no me lo perdonaría.
Cerré los ojos. Sabía que tener que se honesto con Morgan. Yo la quería, pero Emily siempre sería una parte importante de mi vida. No podía dejarla.
¿Eso significa no amaba a Morgan? ¿Mi lazo con Emily era más fuerte que el Morgan y yo? ¿O tal vez eran guías distintas?
Ni siquiera sabía que sentía por Emily, antes hubiera jurado que la amaba, pero ahora, no lo sabía.
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Reflejo
Teen Fiction"Yo sólo sé que no sé nada", esas fueron las palabras de uno de los más grandes pensadores de la historia. Palabras que yo ignoré por mucho tiempo. Ahora, luego de dos años de creer que yo sabía todas las respuestas, me doy cuenta, que no tenía ni l...