No tenía motivos para odiarlo, más bien nunca los tuvo. Siempre creyó que su simple presencia era algo por lo cual odiarlo, pero no era así. Solamente se había dejado influenciar desde muy pequeño por todo lo que decían, porque todos querían a Harry Potter y no a Draco Malfoy. Siempre buscaba algo para querer odiarlo.
Pero nunca se dio cuenta que criticarlo por todo, iba a terminar provocando que terminara enamorado del niño-que-vivio, ¿Hasta cuándo lo supo? Cuando lo vio supuestamente muerto en los brazos de Hagrid quién lo había traído cargando detrás de Voldemort quién iba tan feliz de la vida. Ese mismo momento pensó que su vida se había terminado, las esperanzas de que el señor tenebroso fuera derrotado, el no volver a ver a Potter, solo provocaban qué se sintiera a morir. Bien decían los Muggles: uno nunca sabe lo que tiene, hasta que lo pierde.
Y entonces su madre lo supo. Fue la primera en saber (antes que sus amigos) que estaba enamorado de Harry Potter, y ella simplemente había sonreído. El corazón nunca se equivoca. Aquellas palabras seguían resonando en su cabeza cada día.
Pero al recordar a su madre, se quedó totalmente helado dejando de picotear la comida. Cerró sus ojos esperando que todos se quedarán callados, pero era imposible así que trató de concentrarse lo más que pudo tratando de que su mente quedará en silencio pero fue imposible. No lograba concentrarse, ni acordarse.
—Pansy, Pansy... —llamó a la chica quién se encontraba hablando con otra Slytherin, al tener su atención volvió a hablar—, ¿Tienes un pensadero?
—¿Eh? No, no podemos tener uno, Draco.
Maldijo en voz baja dejando el tenedor sobre su plato, podría preguntar a Theodore y Blaise pero sería la misma respuesta, además no estaban, se encontraban repitiendo un exámen.
Entonces su vista se fijó en cierto cabello rebelde qué sobresalía de la mesa de los Gryffindor's.
Sin esperar un maldito segundo, se puso de pie para caminar a prisa hasta donde esos malditos leones estaban. Sin importarle la mirada de sorpresa que los de las demás casas le daban por encontrarse caminando en su pasillo correspondiente. Todos de inmediato comprendieron a donde se dirigía.
Quizás a Potter le avisaron que se estaba acercando, porque este giró a verle de inmediato, a lo mejor feliz. Era la primera vez que lo buscaba directamente.
—Potter... —ignoró a sus amigos sin dirigirles la mirada y centrarse en el mencionado—, ¿Tienes un pensadero?
La sonrisa de Harry se borró para mostrar confusión, este miró a sus dos amigos antes de volver a verle.
—No Draco, ¿Por qué quieres uno?
—Necesito uno. Me di cuenta de algo y necesito uno.
—Bueno yo... ¿Ustedes tienen uno? —volteó a ver a Weasley y Granger, pero estos negaron.
Asintió dando un profundo suspiro, había caminado para obtener nada, simplemente había gastado su valioso tiempo y no quería esperar para llegar a la mansión. Quería recordar ahora, en ese mismo día.
Se suponía que debía de retirarse, pero seguía ahí parado, con la garganta hecha un nudo, con el alma siendo torturada.
—Potter, ayúdame a encontrar un pensadero —Le volvió a ver esperando una aprobación, no quería echarse a llorar en ese momento—, lo necesito. Dime que me vas a ayudar.
—Si Draco, pero, ¿Que pasa?
—No recuerdo la voz de mis padres... necesito ver mis recuerdos.
Supo que habló de más, estaban aquellos a quienes una o quizás más de una vez había insultado y podrían tomar eso en su contra pero poco le importaba.
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• Criticando a Potter; [ Harco ]
FanfictionDraco no sabe cuál es el motivo exacto por el que odie a Harry Potter, lo creía cuando era un niño pero en el último año en Hogwarts, solo se la pasa criticandolo al no obtener suficiente motivos para odiarlo. • Harry x Draco. [ Harco ] • Los person...